8 de noviembre de 2024.- La Organización de las Naciones Unidas condena los crímenes cometidos por Israel en Gaza, asegurando que casi el 70 % de los muertos son mujeres y niños.
En un informe publicado este viernes, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) revela la “horrible realidad” de los civiles en la Franja de Gaza tras una investigación realizada sobre la guerra devastadora de Israel contra esta zona.
Los detalles de este informe evidencian la violación generalizada de las leyes internacionales por el régimen sionista y advierten que los perpetradores de este crimen contra los civiles en Gaza enfrentan cargos de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, e incluso genocidio.
Al destacar los sufrimientos y las dificultades de los civiles por el asedio impuesto contra la zona y la negativa de Israel a permitir el flujo de ayuda humanitaria, el documento subraya que la destrucción de la infraestructura civil y el continuo desplazamiento masivo han provocado niveles increíbles de muertes y heridos en Gaza.
ACNUDH ha anunciado que consiguió examinar las estadísticas de 8119 personas de las más de 34 500 que fueron martirizadas en los primeros seis meses de la guerra en Gaza, recalcando que casi el 70 % de esta cifra eran niños y mujeres.
Al respecto, ha señalado que el 80 % de todos los muertos en Gaza fueron asesinados por ataques aéreos israelíes contra edificios residenciales, y casi el 90 % murieron en ataques contra las agrupaciones de cinco o más personas, esto mientras que Israel alega que solo ha apuntado contra los militares en sus incursiones en Gaza.
“Nuestro estudio muestra que este nivel sin precedentes de muertes y heridas entre los civiles fue un resultado directo del incumplimiento por parte del régimen sionista de los principios básicos del derecho internacional”, ha denunciado el alto comisionado del ACNUDH, Volker Türk.
Desde el inicio de la guerra genocida, el régimen de Israel ha matado a más de 43 469 palestinos, la mayoría de ellos son mujeres y niños. Bajo los escombros todavía yacen miles más de personas.
Casi toda la población del territorio ha sido desplazada debido al ataque israelí, mientras que el régimen de Tel Aviv mantiene un bloqueo que ha provocado una grave escasez de alimentos, agua potable y medicina.