Opiniones de ONG sobre conducta de los
medios de comunicación en Venezuela
La República Bolivariana de Venezuela ha logrado avances considerables en el campo de los derechos humanos. En el año 2007, se pueden palpar algunas realidades que apuntan a logros con relación al derecho a la vida, trabajo, cultura, educación, justicia social, a la igualdad sin discriminación, sin subordinación. Citando el Preámbulo de la Constitución Bolivariana de Venezuela, los Derechos Humanos son concebidos como una garantía universal e indivisible. En tal sentido, la libertad de expresión es un asunto inherente al hombre y a la mujer expresado en el Capítulo III, artículo 57 de la Constitución, el cual garantiza una comunicación libre y plural dentro de los deberes y responsabilidades de ciudadanos y ciudadanas.
Respecto a la libertad de expresión, sobre la cual se mantiene un total respeto en Venezuela, ha habido diversos y constantes pronunciamientos en determinadas coyunturas políticas por parte de múltiples organizaciones no gubernamentales (ONG) especializadas en esa materia. Para evidenciar sus posiciones se presentará una muestra cronológica de extractos de comunicados y pronunciamientos de distintos organismos orientados hacia el tema de los derechos humanos y la libertad de prensa. Es, básicamente, un diagnóstico de la opinión de las ONG sobre la conducta de los medios de comunicación en Venezuela.
Podría considerarse ésta una información redundante, dado que las posturas de las ONG que se reseñan han tenido amplia difusión y recibido profusa cobertura por parte de la prensa escrita y los medios audiovisuales en Venezuela. No obstante, la información difundida por los actores mediáticos ha sido expresamente seleccionada, y en esa selección han obviado censurado las opiniones que les señalaban y reprochaban su conducta fuera de derecho.
Esas opiniones silenciadas son las que recoge este aparte. Son las posturas que denuncian la extralimitación y deformación de las funciones de los medios de comunicación y su transformación en partidos políticos, según indican los propios documentos. Las ONG que se citan son Amnistía Internacional (AI) de Reino Unido; Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela (CDH-UCAB); Consejo para Asuntos Hemisféricos (COHA) de EE.UU. ; Comité de Protección a los Periodistas (CPJ) de EE.UU.; Federación Latinoamericana de Periodistas (Felpa) de México; Human Rights Watch (HRW) de EE.UU. ; Equipo Nizkor de España; Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea) de Venezuela y Reporteros Sin Fronteras (RSF) de Francia.
Conducta de los medios de comunicación en Venezuela,
años 2002 y 2003
A partir del golpe de Estado de abril del año 2002, algunas organizaciones no gubernamentales realizaron investigaciones y estudios en las cuales emitieron opiniones, pronunciamientos y comunicados sobre Derechos Humanos y libertad de prensa en Venezuela. Más allá de analizar coyunturas políticas y situaciones propias de la realidad venezolana, estas ONG enfocan su atención en el comportamiento de los medios de comunicación en torno al tratamiento de la información, la cual es evaluada como un hecho de activismo político.
Cabe mencionar que queda reflejado en estos informes aunque algunos obvian situaciones y casos concretos que los medios en Venezuela han incurrido en faltas graves, a las leyes nacionales e internacionales, así como a la ética, la moral y al respeto de todos los ciudadanos y ciudadanas, al abandonar su función de procurar bienestar a la sociedad.
A continuación se hace mención de algunas re- flexiones contenidas en documentos oficiales de estas ONG: Consejo para Asuntos Hemisféricos (COHA), “Quemar la casa para eliminar el comején” Washington, 20 de diciembre de 2002 Los medios venezolanos no reportan sucesos, ayudan a crearlos. Su punto de vista se encuentra no sólo en la página editorial, sino en todas y cada una de las columnas de sus periódicos, en escandalosa contradicción con todo sentido de responsabilidad profesional.
La oposición apunta hacia la vena yugular, sin importarle el daño al tejido social y económico del país. Human Rights Watch (HRW), “Crisis política en Venezuela” Nueva York, 3 de julio de 2002. El historial de Venezuela en materia de libertad de expresión ha sido objeto de considerables críticas internacionales. Cabe destacar, sin embargo, que no existe censura previa en Venezuela, no se encarcela a periodistas y los medios de comunicación tienen plena libertad para decir o publicar todo aquello que estimen conveniente. De hecho, la mayoría de los medios de comunicación simpatizan claramente con la oposición, actúan como defensores de sus posturas y emplean un lenguaje agresivo en contra del gobierno.
Lamentablemente, a pesar de la vitalidad del debate político en Venezuela, hay muy pocos indicios de que sea constructivo. Programa Venezolano de Educación- Acción en Derechos Humanos (Provea). “Derecho a la Libertad de Expresión”, Informe Anual 2002-2003. La cobertura completamente sesgada y parcializada de los medios privados abre serias interrogantes en torno a los compromisos éticos, de cara a la ciudadanía, por parte de estas entidades que intervienen decididamente en la vida pública. La actuación en este contexto contribuyó a que sectores de la población venezolana aboguen por una legislación para regular los medios. …una legislación para este sector en sí misma es compatible con el derecho a la libertad de expresión e información… Consejo para Asuntos Hemisféricos (COHA), “Reunión de alto nivel en Venezuela concluye con magros resultados”. Washington DC, 10 de marzo de 2003
La mayoría de los medios privados no usaron su libertad para propiciar prudentemente una solución electoral que fuera aceptable para ambas corrientes enfrentadas en la crisis, sino que los periódicos y las estaciones de televisión sirvieron de tribuna a los voceros de ultraderecha más radicales de la oposición.
Durante el paro general, las estaciones privadas de televisión sacrificaron el tiempo de comerciales pagados para transmitir cuñas pidiendo la renuncia del Presidente. En algunas cuñas se usaron niños para conmover a la audiencia. Human Rights Watch (HRW), “Carta al Presidente Hugo Chávez”, Washington DC, 1 de julio de 2003.. Cabe subrayar que, bajo su mandato, la prensa ha disfrutado de amplios márgenes de libertad de expresión. De hecho, como parte del debate con frecuencia acalorado y enconado entre los simpatizantes del gobierno y sus opositores, la prensa ha podido expresar sus opiniones críticas sin restricciones. Desde luego reconocemos que su gobierno no practica la censura…
Golpe de Estado de abril de 2002
En consecutivas y reiteradas ocasiones la desestabilización política, social y económica se vio fortalecida por las líneas informativas de los medios privados que, además, restringieron severamente el libre flujo de ideas. La serie de fragmentos de cada uno de los informes de ONG que se presentan permiten reconocer que, más allá de la falta de objetividad, los medios de comunicación privados extralimitaron sus funciones antes y durante los acontecimientos del 11, 12 y 13 de abril. El continuo y creciente enfrentamiento de los medios con el gobierno, más allá de ser una acción heroica, es una acción que desvirtúa la ética y la esencia de un medio de comunicación, también empaña el papel al que está destinado a cumplir un comunicador social o profesional de la rama de la comunicación.
Committee to Protect Journalist, (CPJ), “Ataques a la prensa en el 2002.
Las Américas”
En los días que siguieron al derrocamiento de Chávez, los cuatro principales canales privados de televisión brindaron escasa cobertura de las manifestaciones a favor de Chávez. Los venezolanos tuvieron que depender de la CNN y de los canales colombianos y españoles de cable o satelitales para ver noticias sobre las protestas. Muchos periodistas venezolanos y extranjeros afirmaron que los ejecutivos de los medios privados habían actuado en connivencia para imponer un bloqueo informativo, siguiendo instrucciones impartidas por Carmona. A su vez, los ejecutivos de medios adujeron que no podían cubrir la noticia por temor a que los partidarios de Chávez, que habían hostigado a varios medios a principios de año, pudiesen atacar al personal
o las sedes de los canales. Varios periodistas locales insistieron en que los acontecimientos se podrían haber cubierto sin exponer a los periodistas a riesgos innecesarios. Además, durante otras crisis y períodos de inestabilidad, los periodistas
venezolanos no dejaron de proporcionarle información al público.
Durante el breve mandato de Carmona, las fuerzas de seguridad a sus órdenes hostigaron a periodistas de medios comunitarios partidarios del gobierno; mientras que el canal de televisión estatal, Venezolana de Televisión (VTV), fue sacado del aire en la tarde del 11 de abril después de haber sido ocupado por fuerzas policiales que se habían plegado al golpe. VTV permaneció cerrado hasta el 13 de abril, cuando partidarios del gobierno lo tomaron y lo volvieron a sacar al aire. Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (CDHUCAB).
“Entre el estruendo y el silencio. La crisis de abril y el derecho a la libertad de expresión e información.” 2002 La crisis de abril representó un clímax, en el cual la sociedad pasó del estruendo al silencio informativo, y en medio del mismo se vieron afectados los derechos ciudadanos en esta materia.
Aunque son los Estados quienes tienen claras responsabilidades en el campo de derechos humanos, no puede obviarse el asunto de la responsabilidad social de los medios privados, en cuanto constituyen el canal a través del cual la ciudadanía se informa. Los medios privados (…) limitaron el acceso a la información, en la medida en que varios canales transmitieron de manera uniforme la misma información, sin dar espacio a la diversidad informativa (…), mientras que políticamente no reflejaron (…) la pluralidad política existente en el país y privilegiaron de forma abierta a sectores de la oposición.
Esta parcialidad, que no sólo se vivió en los medios radioeléctricos, se evidenció igualmente en la prensa escrita. La actuación deliberada de los medios audiovisuales quedó asimismo en evidencia con la acción tomada contra el Fiscal General, Isaías Rodríguez. El despacho del fiscal llamó a una conferencia de prensa en la que presuntamente el funcionario renunciaría. Varios canales de televisión transmitían en directo la conferencia. Rodríguez comenzó aclarando que no dimitía, que Chávez no había renunciado y que lo que se había producido en el país era un golpe de Estado.
Inmediatamente todos los canales privados dejaron de transmitir el acontecimiento. Desde la mañana del sábado (13 de abril de 2002) (…) comenzaron a aparecer en la pantalla viejas películas, dibujos animados telenovelas y deportes. La programación de ese día no sólo dejaba de reflejar lo que ocurría en las calles, más bien parecía que intentaba negar esa realidad.
La ausencia informativa, en momentos previos al retorno de Chávez al poder, se hizo particularmente notoria debido a que los días precedentes se le había dado una completa y continua cobertura al paro general, la marcha del día 11 y la llegada de Carmona al poder. A la par que se sostenía el silencio informativo en los medios locales, corresponsales de cadenas extranjeras como BBC, CNN, Radio Caracol y la Televisión Española seguían de cerca y transmitían cada uno de los hechos que se registraron durante el gobierno de Carmona. …la labor informativa de la Cadena Radio Caracol de Colombia, se vio limitada cuando fue sacada del aire, en Venezuela, por la compañía de televisión por suscripción a la cual está adscrita, cuando hacía un pase en directo desde Miraflores, poco después de que el Presidente de facto Carmona
Estanga presentara su renuncia.
Los propietarios de los medios han asegurado que la decisión de cortar las transmisiones informativas tenía por finalidad resguardar a su personal. Estas mismas razones fueron alegadas por la prensa escrita para explicar la ausencia de ediciones en la calle el domingo 14. Otra razón esgrimida ha sido que la difusión de imágenes de hechos violentos como los saqueos que se estaban registrando en algunas zonas de Caracas, llegara a tener un efecto multiplicador de estos sucesos(...) Committee to Protect Journalist (CPJ). “Alerta 2002. Periodistas siguen en riesgo”, Nueva York, 17 de abril de 2002.
Algunos periodistas han afirmado que los ejecutivos de los medios privados, quienes por lo general han sido opositores acérrimos del Presidente, dieron órdenes a los reporteros de no cubrir las manifestaciones a favor de Chávez, y algunos periodistas han presentado su renuncia en protesta, según versiones locales. Federación Latinoamericana de Periodistas (Felpa). “La libertad de prensa vive momentos aciagos en su día mundial”,
México DF, 3 de mayo de 2002
Los medios difunden la falsa noticia de la renuncia del presidente constitucional, en que pretende apoyarse el golpe de Estado, y la mayoría parcializa la información sólo sobre el bando que lo apoya. Restablecido el orden legal, durante cuyo funcionamiento, y en medio de agrias controversias y hostigamientos, no se clausuró
ningún medio ni fue detenido o censurado ningún periodista... Equipo Nizkor. “El fallido golpe de Estado en Venezuela sirve para dejar en evidencia a la diplomacia del estado de excepción”, 15 de abril de 2002
Es evidente que el silencio informativo en que se mantuvo a los ciudadanos venezolanos fue total desde horas antes del golpe de estado; y que se mantuvo, en la práctica, hasta lunes... La libertad de información de los ciudadanos venezolanos fue claramente violada y se deberá analizar en profundidad lo que se ha dado en llamar el “golpe de Estado mediático”, pero teniendo en cuenta además que fracasó. ...la conducta de ética profesional de numerosos medios internacionales quedó gravemente afectada (…) pondremos el ejemplo de la BBC de Londres que transmitió y publicó el Texto completo de la renuncia del presidente Chávez documento que se demostró inexistente... El tipo de comportamientos descritos constituyen el más evidente riesgo a las libertades civiles en todo el mundo, porque se enmarcan en el funcionamiento de organizaciones ad hoc, cuyas actividades sobrepujan las instituciones democráticas y que crean sistemas de control políticosocial fuera del estado de derecho.
Amnistía Internacional (AI), 10 de abril de 2003
Si se ha de determinar la responsabilidad, tanto criminal como moral, por la violencia de abril del 2002, es también esencial que la oposición, incluso los medios de oposición, contribuyan a que los hechos se esclarezcan, aún cuando los resultados no necesariamente coincidan con sus intereses políticos inmediatos. Human Rights Watch (HRW),“Crisis política en Venezuela” Nueva York, 3 de julio de 2002. Nos preocupa seriamente que los líderes de la oposición continúen buscando una salida no constitucional a la crisis política.
La oposición se niega a calificar de golpe los eventos del 11 y 12 de abril y, de hecho, ni siquiera los ha condenado como una ruptura del orden constitucional. Los líderes de la oposición siguen insistiendo en que Chávez deje el poder antes de que acabe su mandato y a algunos parece preocuparles muy poco la legalidad del mecanismo que permitiría su salida del poder.
Las únicas soluciones políticas que respalda la oposición son la renuncia de Chávez o un referendo para sacarle del poder, al que seguiría una elección a la que no podría presentarse como candidato. Paro petrolero de diciembre de 2002 y enero de 2003. Seguidamente, y al igual que en los puntos anteriores, se presentan una serie de extractos de informes y comunicados de ONG donde analizan la actuación de los medios privados durante el paro petrolero impuesto al país.
Constituyen evidencias de que la estabilidad constitucional y democrática en Venezuela se ha visto continuamente quebrantada por las acciones apartadas de derecho y responsabilidad por parte los medios de comunicación privados y su relación con intereses políticos.
Consejo para Asuntos Hemisféricos (COHA).“Reunión de alto nivel en Venezuela concluye con magros resultados”, 11 de marzo de 2003 (...) Los medios de Venezuela actuaron vociferando de una manera poco profesional, con poca exactitud y presentándose ellos mismos más como adversarios de Chávez que como operadores neutrales y responsables.
La mayoría de los medios privados no usaron su libertad para propiciar prudentemente
una solución electoral que fuera aceptable para ambas corrientes enfrentadas en la crisis, sino que los periódicos y de las estaciones de televisión sirvieron de tribuna a los voceros de ultraderecha más radicales de la oposición. Durante el paro general, las estaciones privadas de televisión sacrificaron el tiempo de comerciales pagados para transmitir cuñas pidiendo la renuncia del Presidente.
A lo largo de los dos meses del paro general, el intransigente antagonismo de los medios hacia el gobierno llegó hasta provocar un sentimiento de burla hacia el orden constitucional de la nación. Cuando el paro entraba en su segundo mes, las estaciones de televisión transmitieron repetidamente mensajes en los cuales los líderes de la oposición, Carlos Ortega y Carlos Fernández, incitaban a la audiencia a no pagar los impuestos para sabotear al gobierno.
La alianza de facto entre medios y oposición, da bases al gobierno para creer que el periodo que transcurrirá hasta el referéndum será de una mayor campaña de difamación anti-Chávez, lo cual está sucediendo ya. Esta es una consideración seria ya que en Venezuela las estaciones privadas de televisión cuentan con casi 80 % de la audiencia. Chávez no es tonto y con toda razón no querrá tomar parte en un evento electoral donde los medios le pintarán de forma desmedida como un villano y él tendrá pocas oportunidades para responder a esas acusaciones. Por lo tanto deberán acordarse reglas inflexibles para regir ese proceso.
Human Rights Watch (HRW). “Venezuela debe modificar el proyecto de ley sobre radio y televisión”. Caracas, 21 de mayo de 2003 Durante una huelga general de 62 días, entre diciembre de 2002 y febrero de 2003, con la que la oposición política esperaba forzar la renuncia del Presidente Chávez, los canales privados de televisión emitieron gratuitamente durante horas la propaganda de los partidarios de los huelguistas. Los programas de noticias y de debate hicieron gala de una hostilidad extrema contra el gobierno de Chávez.
Human Rights Watch (HRW). “Entre dos fuegos. La libertad de expresión en Venezuela” Nueva York, mayo de 2003. Los canales privados de televisión venezolanos bombardearon a los televidentes con la cobertura de las marchas y emitieron gratuitamente los mensajes políticos de la oposición en lugar de los anuncios
comerciales. Esta intensa cobertura de las protestas contrastó claramente con el hecho de que los medios de comunicación no hubieran informado ocho meses antes de los acontecimientos del 13 de abril de 2002, cuando las fuerzas armadas reinstauraron a Chávez en el poder tras un intento fallido de derrocamiento organizado
por civiles y militares.
Reporteros Sin Fronteras (RSF).
“Entre el autoritarismo del Presidente y la intolerancia de los medios de comunicación”. Francia, 11 abril 2003. En enero de 2003, la situación de la libertad de prensa en Venezuela era de lo más confusa. Desde hacía un mes, una parte importante de la prensa privada apoyaba un paro de actividades decretado por la oposición, para conseguir la dimisión del Presidente Chávez. Difusión de propagandas incitando a la desobediencia civil, retransmisión de llamadas a la sublevación armada, difusión de informaciones falsas. (...) en realidad, los principales medios de comunicación privados hacían algo más que apoyar la huelga, a su manera participaban en ella, al precio de trampear con los más elementales principios de la deontología. Ocho meses antes ya habían aprobado un golpe de Estado que llevó al derrocamiento del presidente Chávez, durante cuarenta y ocho horas.” “Como los precedentes, ese nuevo paro tuvo una cobertura común en los canales privados de televisión.
Trabajando en cartel, intercambiaban sus imágenes para cubrir mejor el acontecimiento….” “Todas las tardes, los canales emitían información sobre la movilización, de manera continuada. Daban, sobre todo, la palabra a la oposición, difundiendo simultáneamente cada día, al final de la tarde, la conferencia de prensa que ofrecían los líderes de la oposición...”
Comité de Protección a los Periodistas (CPJ) “Ataques a la prensa en el 2003.
Venezuela” Nueva York, 2003
Los medios privados continuaron su participación en la arena política en el 2003, promoviendo sin ningún reparo la plataforma de los partidos de oposición en detrimento del profesionalismo y el equilibrio informativo. Según fuentes locales, debido a que en Venezuela los partidos de oposición están desacreditados o divididos, los medios se han ocupado de llenar el vacío, volviéndose una fuente extremadamente
poderosa de oposición política. (Final)
Tomado del (Libro Blanco sobre RCTV), publicado por el Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. Marzo, 2007. 1era Edición Impreso en la República Bolivariana de Venezuela ISBN: 980-227-038-5 Depósito Legal: lf8712007384754 (Caracas, Venezuela).
Con el capítulo 8 doy por culminada la entrega en formato solo texto de lo que copié de este revelador libro que el Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información ha obsequiado en material impreso, libro, como en versión digital que usted puede bajar de Internet en formato PDF en los sitios Web de este Ministerio así también en www.rnv.gov.ve. Un trabajo que gustosamente hice a merito propio para dar un pequeño aporte en la campaña a favor de la NO RENOVACIÓN DE LA CONSECIÓN a RCTV.
Tanto en el libro impreso de distribución gratuita, que aún no poseo, como en la versión digital se encuentra todo un material de soporte que puede documentar aún más este trabajo de investigación periodística. Gracias al Ministerio del Poder Popular para la Comunicación de esta gran iniciativa, esperando así que igualmente se divulge todo lo relacionado al otro canal emblemático de la ultraderecha venezolana como es el Canal 33 de Globovisión. Les invito a escuchar el programa que conduzco los días martes de 4:00 pm a 5:00 pm por nombre LATRINCHERA.COM en la radio-emisora comunitaria ARTE 91.5 FM, parroquia, La Candelaria Caracas, Venezuela.
Juliocesar1221@gmail.com