La reflexión del pensamiento debe acompañar el acto de saber porque la mente obra como un espejo de la realidad; mas, excepto que el próximo diez de Enero, pleno —como la Luna llena— de moral dada su performance al frente del Estado, Maduro agarrará consecutivamente el coroto, no sé qué va a hacer el portátil Monifato de Macabra, si cuando los que le dan cuerdas (no digo venir porque él no se gobierna, parece un arlequín) lo trajesen o mandasen, se mancha sus pantalones de marrón al momento de cancharle las esposas o si el sujeto simplemente recula, deja la bebida y se dedica simplemente a la que hay que beber, doquiera esté pero, allende Venezuela.
Válgame evocar más o menos sic al escritor irlandés Bernard Shaw: "uno utiliza el espejo para verse la cara y el arte para verse el alma". ¿Se ve la cara en un espejo el teatral periodista que desde red ya tiró puntas contra la elección de jueces de paz?
Ah, digresión, os hago notar que desde ayer y por el resto del mes en curso he estado y estaré, probablemente, aquí en la escuelita, por lo que en vez de a la intemperie y disfrutando de las bondades del aire puro, ahora he de estar expuesto al hartazgo de bulos. Ya apenas asomé a red mi repingada naricita topé con la mar de necedades, eso es plooomooo contra el rrrééégimen, que si "los jueces de paz me parecen sospechosos" y tal y que se yo —argumentó un sedicente mal parado periodista tránsfuga (le digo mal parado por no decirle mal parido)—, y que si el pato y que si la guacharaca —vocifera otro camello— y así por el estilo otros sesudos analistas de la misma ralea que los citados.
Volviendo al hueso del asunto, a todo ello estimo que una cosa es que tú, usted esté a muerte contra el gobierno bolivariano y otra muy distinta es estarlo contra tu propia patria, lo cual parece no caber en cabeza de encopetados sin copetes.
Creo que la reflexión sobre el lenguaje es o debe ser, sobre todo, una manera de indagar acerca del conocimiento y del pensamiento, sus alcances, sus posibilidades y mecanismos de manifestación, en fin, de qué manera el pensamiento se aproxima, que no se adueña, de la tan escurridiza interpretación eficaz de la realidad real; pienso que todos pero especialmente el verdadero periodista debe hacerse preguntas a sí mismo antes de ejercer sus tareas, tanto así como el humilde trabajador , digamos de un humilde pescador artesanal, por ejemplo, que dispone sus anzuelos, su sedal y/o su chinchorro y demás aperos según sea; pero eso de medidas a medias, de que sí pero no, de siempre decir y siempre callar lo que no debe, de pretender que la realidad se adapte a su perniciosa descripción en vez de lo contrario pero sin pernición, es sencillamente manipulación descarada pero con tablas evidentes.
Fragmentar el mensaje para deliberadamente tratar de confundir al pueblo es una canallada porque en vez de hacer esfuerzos para aclarar, el sedicente los hace para enturbiar y de ahí lo de pescar en río revuelto.
Mensajes envenenados como ese de atacar en este momento la elección de jueces de paz, es como abortar a una criatura en vías de nacer, algo peor que un crimen, una cobardía, una estupidez sin sentido.
¿Que la cosa está pelúa?, ok, esa es una verdad sensata, pero que la culpa es de Maduro ¿está comprobado?, acaso no sabe el amargado camello rumiante de odio que la causa está antes que el efecto, quienes afirman que la culpa es de Maduro soslayan su evidente mentira porque son burdos, descerebrados y como tales atacan sus propios intereses, no se detienen a pensar y mucho menos a corregir su perspectiva, su noción de entorno.
Cómo puede una persona confundir una causa con un efecto?, hacerlo es una superficialidad, mucha gente está enferma de irrealidades y por eso jala´patrás y esa es la tarea del periodismo sedicente, echarle mierda encima al pueblo a sabiendas de que así como los ríos van hacia la mar y ésta nunca se llena, así mismo es el cerebro, que se llena de ideas sean constructivas o destructivas, todo le cabe, y quienes son cautivos de la ideología dominante del capitalismo chupasangre asumen resignados sin percatarse su propia esclavitud de la cual no saldrán por sí mismos sino que han de ser rescatados, y de ahí lo necesario de la disposición, de la tolerancia y de la disposición revolucionaria para ir a ese rescate.
Los mensajes envenenados son una agresión compleja, dejan secuelas porque son proyectiles de una máquina de guerra psicológica. Días, meses y años de ver y escuchar la descripción de una realidad ajena a la verdad terminan por despojar a mucha gente de un modo propio de pensar y de actuar, de concebir por sí misma su entorno tal cual es y no como se lo pintan, el ideario capitalista atrofia la capacidad de preguntar y de buscar respuestas atinentes; el capitalismo moldea a sus propios periodistas y se apodera de ellos como de una cosa, se apodera de todo, secuestra la verdad y la hace rehén de sus intereses y necesidades, se limpia el culo con ella, la problemática que está en las calles y en las casas y que esos medios de comunicación como por ejemplo aquí la otrora RCTV, las actuales Venevisión, Televen y etcétera —con rara excepción de una que otra televisora, emisora de radio, periódico, noticiario, noticiero— a diario revolotean encima de las peores noticias así como las moscas sobre el basurero, para alimentar su encendida a diario guarimba periodística: "...en el hospital tal no hay insumos…", en tal o cual parte se rompió una cloaca y, ande que no viene carro.
Y no se trata de ocultar la verdad sino del sesgo envenenado que el noticiero le da a la cuestión, nunca arrima una para el mingo, nunca da una razón de porqué no hubo medicina en tal o en cual hospital, por ejemplo; jamás eso es culpa de Trump o de Baiden sino de Maduro.
Mucha de la problemática que hoy azota al chavista pueblo bolivariano e inclusive a la escualidad descerebrada y de la cual la mosquera se desgañita pregonando al menos a los cuatro vientos de la rosa náutica, está fraguada en laboratorios que ellos mismos defienden.
¡Chapotean en su propio fango!
Ñapa:
Ojalá el imponderable no me busque antes del diez de Enero para así yo poder ir a callejear con mis compinches también sudabolas, y darle en cambote nuestro modesto respaldo a Chávez en Maduro. Pero si no, igual da. Cada quien en su puesto trabajando da su modesto aporte a la patria.