Este planteamiento tiene que ver con los detalles que debemos concientizar para solucionar graves problemas de los que aun en contra de nuestra voluntad, marcan pautas del plan conspirativo que utilizan disimuladamente los quinta columnas; se nos hacen distantes para controlar sus tácticas de mal poner los avances del proyecto ante los ojos de los inconscientes oposicionistas que los oyen; este caso tiene que ver con el acto conspirativo que presencié y está llevando a cabo, parte de la administración anterior, que estoy seguro aun queda en la propiedad del Estado, por lo tanto mía, llamada Banco de Venezuela.
El cuento para exponer es sencillo, pero no quiero que solo sea un cuento; quiero que sea concientizado y digno de tomar en cuenta por los camaradas que tienen la responsabilidad de desmontar con sapiencia administrativa, los vicios burocráticos que estamos heredando del capitalismo, para que con el esfuerzo revolucionario lo llevemos en el menor tiempo posible a la ética productiva del socialismo.
El problema: Resulta que en nuestro Banco, ahora de la patria; cuando pasa más de dos meses sin movilizar la cuenta, la desactivan por seguridad; hasta allí todo está bien; además controlan las formas de robar que tenían antes, sobre todo con los “clientes” de la tercera edad, que por cuestiones de movilidad no podían ir al Banco, apenas una vez al año; pero de allí a que para activarla nuevamente, cuando la necesidad y el dueño aparezcan, haya que calarse una cola de tres horas (que por mala suerte y desconocimiento lo he hecho ya dos veces) lo grave de todo esto es que el personal se burla de los que hacen la cola con sorna y además sentí que se burlan de los clientes, en su mayoría escuálidos, porque es muy poco el pueblo que tiene cuenta para desactivar; por lo tanto habría que buscar la lectura política de perjuicio al proyecto, la mayoría de los que están en la cola, sabe que ahora el Banco es del Estado y cree que por eso es que funciona con deficiencia.
Pero si me preguntan: como estoy en revolución y conozco el problema; diría que eso no es nada, es un sacrificio por el cambio, que aunque no lo acepte estoy dispuesto aguantarlo por el bien de nuestro proyecto.
Lo que no es fácil aguantar, aunque ya lo hice, es la conspiración que montan en la pata de la oreja de un radical, unas disociadas escuálidas, dilucidando sobre las culpas de la tardanza y todas llegan llenas de odio y conclusiones mediáticas; que el culpable y sustentan la mentira ante los ojos de los asistentes, es mi amigo personal EL HOMBRE QUE EMPUJA.
Hasta ahora he mantenido la compostura para no armar un escándalo y sabotear mi propiedad.
Por lo tanto hago el llamado a quien corresponde tomar en cuenta este flagelo, con el fin de ir poco a poco corrigiendo; porque de lo contrario el uso conspirativo que le están dando a la Institución, va a seguir llenando de mentiras, en contra de los que estamos construyendo y ellos destruyendo en nuestros propios espacios.
EMERGENCIA, Departamento de Recursos Humanos del Banco: Vamos a poner atención, sobre todo en esta parte de la operatividad que está llena de conductas que no son para nada lo que estamos construyendo, recuerden que
PATRIA SOCIALISTA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
HAZTE CONCIENCIA.
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