En una nota anterior nota, traté la calificación que la Profesora Gloria Cuenca le ofrecía al Capriles. Le colocó 18 puntos y el no merecimiento del 20 era porque los líderes de la MUD no lo estaba acompañando. Finalizaba Cuenca su justificación de los 18, diciendo que Capriles es un tipo “preparado, crecido políticamente, sano y democrático va por buen camino”
El perfil que sugirió Poleo fue muy distinto. El retrato hablado que elaboró ofrece una imagen de una persona insípida. No se acerca en nada al tipo “preparado y crecido políticamente” que no trató de vender (muy éticamente) la profesora Gloria Cuenca.
¿Cuál de estos dos contrapuestos perfiles se acerca más a la realidad?
Existe una vía más objetiva para llegar a un perfil. Desde cualquier perspectiva que se observe un hecho o sujeto, los antecedentes son un elemento o variable importante para lograr el retrato hablado más cercano a lo que el sujeto es y representa. Vale tanto lo realizado y el comportamiento asumido por una persona (historia de vida) para conocer al sujeto y proyectar a futuro ese perfil. No es por pura casualidad que ayer y hoy bajo otra señal, te precisan cómo puedes ser, averiguando lo que has hecho.
Existe otra manera de entender o comprender como una persona se labra una conducta para mantenerla dentro del rango que lo define como sujeto. El famoso decir, “dime con quién andas y te diré quién eres”. Esta manera de decir, es también una metodología que nos permite llegar a una conclusión más o menos cierta. Esta manera de ver el asunto se asocia con aquellos consejos que nos planteaba nuestros viejos, que al vernos con un amigo no muy acorde con lo que esperan de uno, solían decirnos: deja es “juntica” que no te lleva a nada a bueno. Era un alerta muy sabio.
Todo esto sirve para desmontar el discurso de Poleo que califica a Capriles de chayota o el de la profesora Cuenca, cuya evaluación lo coloca como un sujeto “preparado y crecido políticamente”. Capriles, no es algo insípido. La vida de Capriles está asociada con PJ y esta organización, tiene su origen (antecedentes) en una secta que en la década de los setenta tuvo una historia cargada de violencia y de situaciones peligrosas
Nadie nos los dijo. Toda Venezuela lo vio violentando una embajada y más recientemente; los venezolanos y venezolanas vimos a Capriles en estrecho contacto con Uribe y cada unos de estos detalles, conducen a con conclusión: No es Chayota y no es tipo “preparado, crecido políticamente y sano”. La “juntica” con Uribe, nos comunica lo que es y en lo que anda. Es un tipo asociado con la violencia. No puede ser menos de lo que ha mostrado en su trayectoria de vida.
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