Uno ha oído y repetido que la oposición carga en su cabeza un proyecto neoliberal de corte salvaje. Asocia, bajo condicionamiento tal vez, esta condición de salvaje, como un proyecto que nada tiene que ver con lo humano y nos equivocamos. La oposición si tiene un proyecto humano y hay todo un cúmulo de evidencias que así lo demuestran. Paso a preciar algunas.
Mucho antes de culminar el siglo XX, existió una ley (entre otras muchas) conocida como la Ley de Vagos y Maleantes y si uno logra leerse esta ley hoy y tiene la oportunidad de recordarse lo que pasaba en los momentos de su vigencia, tiene el primer dato para echar por tierra esta melodramática teoría Castro-Chávez-Comunista sobre una oposición sin proyecto humano. El vago y maleante estaba totalmente identificado en esa ley. Un desempleado por ejemplo, era ya un vago y estaba a la puerta de ser un maleante. El desempleo pisaba casi el 15%. Faltaba únicamente una redada policial en un barrio o comunidad pobre y ya: vagos y maleantes por montones. Aunque no estaba escrito en esta ley, en ella había una perfecta fotografía social de esta condición de vago y maleante. Me “iría demasiado”, si llego hoy (2013) suponer que esta ley pudo haberse aplicado en el este y hacia el este del este; aunque en mi memoria recuerdo los vagos que supuestamente acabaron con el niño vegas.
Esta ley de haber estado en vigencia hoy era muy difícil aplicársela (por ejemplo) a un Mezerhane o a uno de estos policías que el 11-Abril contribuyó eficientemente con los francotiradores que asesinaron vilmente a muchos venezolanos. Hoy vemos reclamar a la oposición por estos seres y queda clara la evidencia. Si uno ve por ejemplo, a Edgar Zambrano mendigarle una audiencia a Maduro para interceder por los políticos presos, tiene un dato más para darle apoyo al desmontaje de esta teoría. ¿Qué adeco hizo eso antes con los desaparecidos y torturados?
¿Se acuerdan de los famosos comités de pro-cupos en las universidades? Si uno revisa esta historia de los comités de pro-cupos, tiene en la mano otro dato histórico irrefutable para echar por tierra esta mal intencionada teoría sobre una oposición sin proyecto humano.
El hecho de que cientos de miles de jóvenes se les negaran un cupo a la universidad y que un hijo de un profesor universitario, heredara un cupo con un promedio de 9,5 no implica que ahí no hubiese un proyecto humano.
Vemos otra evidencia irrefutable para desmontar esta teoría de una oposición sin alma. ¿Cuánta pobreza extrema y general produjo la denominada IV República? Si nos remitidos a los datos, prácticamente el 70% de la población venezolana vivía en la pobreza y un (más o menos) 30% pisaba la pobreza extrema. “Aja”; no es este otro dato preciso que pone en ridículos a los actores intelectuales de la CCC (Castros-Chávez-Comunistas) Este hecho de la pobreza y la desigualdad, es estadísticamente hablando, una realidad irrefutable.
Todo esto no implica, que la oposición careciera de alma y no respondiera a un proyecto humano. La oposición torturaba, desaparecía, calificaba de vago y maleante a un negro y existían los comités pro-cupos, precisamente porque tenía una teoría humana. Todo lo que no cuadraba en su perfil social, no debía de existir y por eso la exclusión, la pobreza y cientos de miles de jóvenes provenientes de los liceos públicos no encontraban un cupo en las universidades.
Ahí hay implícita y explícitamente una teoría humana con un límite y unas fronteras sociales y económicas. Así pues, dejen esta teoría CCC (Castro-Chávez-Comunistas) de un lado que no tienen sustento empírico ni filosófico.
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