“Jamás imagine que la política fuera tan sucia”
Evo Morales hermano indígena presidente de Bolivia
La política es una de las mayores cloacas nauseabundas que existen en el mundo.
Es el sitio perfecto, donde se dan cita las mentes más perversas, donde se planean las peores y maquiavélicas emboscadas, a los grandes hombres que intentan hacer algo digno de nuestro mundo para las grandes mayorías, como lo intentó nuestro máximo líder, Hugo Rafael Chávez Frías.
La prueba irrefutable diaria, es la cautela necesaria que deben tener los personajes que hacen vida en ella.
Es la personificación perfecta de la contradicción, en donde te acaricia la gloria cierto día, para regresarte al siguiente atardecer en las más oscuras profundidades del olvido, en un abrir y cerrar de ojos.
Contradicción que no sabe diferenciar la verdad de la mentira, en un escenario donde es de suma importancia hablar mucho, pero que a la vez nos advierte de lo necesario de no abrir mucho la boca, por algo mucho más importante que las propias moscas.
Y dentro de dicha paradoja, es elemental intentar andar siempre con pies de plomo y guantes de seda, intentando torear diariamente dicha política, evitando con ello, no salir corneado y mal herido.
Pero las ansías de poder, por el solo hecho del poder mismo, hace que muchos cantinflescos políticos se ven atrapados en errores infantiles no deseados, convirtiéndolos en una apresurada extinción, que los convierte en la nada……
La diputada María Corina, desde comienzos de su aparición en nuestra política, siempre se le vio como una muchacha apresurada, desbocada, tal vez como intentando saltarse tiempos elementales (tipo pasantías) en el ruedo de captar adeptos en el extraño arte de solo cacarear y no poner huevo, cuando solo se habla de promesas.
Ella pretendió venderse como una mujer de pantalones (como diría mi abuelo), con el resultado de que la culata de su escopeta la hizo caer de bruces, en un mundo (político) donde cuando se caen, ya es casi imposible volverse a incorporar.
El video o grabación de estos días, terminaron por desnudarla literalmente, de lo que muchos ya sospechaban, una mujer que pensó que la política era pancita (como dicen los chamos) para ella, olvidando las estrategias más elementales en el quehacer político, para alguien que se cree capaz de salir airoso entre tanto excremento…
Despotrico de todo el mundo, descargo su ira al sentirse atada por las barreras que le colocaron sus propios compañeros, por su alocada manera de hacer política.
Echando por tierra sus supuestas luchas, por la libertad, por la patria, contra un régimen dictatorial, los presos políticos, los exiliados, bla, bla, bla, bla, bla…
Nos habló de los gringos, de los colombianos y los brasileros, no de la mejor manera para sus intereses. Arremetió contra Capriles, de un supuesto recule vergonzoso del flaco, no tuvo contemplación con el supuesto director de la MUD Aveledo, en donde demuestra que las sanas charlas y los abrazos de unión, son solamente para las cámaras de televisión, cuando en su más profundo interior solo existen espacios para un existente cólera si se quiere peligroso…
Cosa cierta, que decía siempre mi abuelo: Si los seres humanos pudieran leer la mente de las personas…otro gallo cantaría...
Los políticos muchacho… son los mismos pendejos que nosotros…
Pretenden hipnotizar a la chusma (así nos llaman), para auto glorificarse quizás hasta más alto que los propios dioses del Olimpo.
Todo eso, es lo que alimenta a la estupidez humana, y está en nosotros ser parte de ellos…
Creo sin temor a equivocarme, que con este nuevo episodio de la diputada Machado, aunada al de las niñas vendedoras de café en nuestras carreteras y autopistas…
Ya le llegó la hora de velar por sus hijos a tiempo completo…
Vengan a mí que tengo flor…nos diría Chávez…