Jóvenes Compatriotas:
Reciban un cordial y afectuoso saludo, además aprovecho para desearle toda la felicidad del mundo que bien se merecen; hago extensivo el saludo a sus seres queridos.
Les parecerá un tanto extraño que me comunique con Uds. por esta vía, en otro tiempo histórico pasado hubiera sido imposible, salvo que hiciéramos un esfuerzo como hacíamos en un pasado no muy lejano para sacar un volante en el liceo o en las universidades– y fueron muchos los volantes que hicimos con batea en el fondo de la casa de cualquier generoso amigo – pero ya atrevernos a eso y distribuirlo en ese entonces en el liceo o en la universidad representaba un costo, persecución interna y agresiones físicas contra nuestra integridad por parte de las bandas armadas de Acción Democrática y COPEI, así como expulsiones de los liceos y universidades y cuando menos, nos aplazaban las materias hasta mal ponernos, aislarnos y estigmatizarnos ante los demás compañeros y compañeras de estudio.
Quisiera que les preguntaras a tus parientes de más edad, a los amigos un tanto mayores de tus amigos, a tus propios padres, pregúntales a esas personas con oficios informales o a aquellos funcionarios o funcionarias de escala baja en las instituciones, pregunta como desde los años 60 por colocar una fecha referencial los partidos de AD y COPEI se entronizaron en el país, y cuyos funcionarios y funcionarias actuaban como reyezuelos y reyezuelas, “dirigían” a su antojo y capricho el país, para ellos y ellas el país, su historia y sus glorias patrias eran simplemente un periódico de ayer o un papel tualet.
Venezuela iba al garete, sin rumbo, era un festín de tiburones oligarcas ante una presa indefensa, inerte, pero eso no es todo, luego de forma por demás sofisticada, hay veces muy edulcorada o brutal como el Editorial de Radio Caracas Televisión leído por Eladio Lares cuando el Caracazo del 27 y 28 de febrero del año 1989 quien rubor alguno tildaba con calificativos viles a un pueblo humillado, vejado, reprimido que dijo: Basta! Y echó a andar!
Pero en distintos momentos y puedes buscar y conseguir las filmaciones de la época, las películas que se han hecho referenciando lo que en una hora y media se puede colocar allí, también puedes ubicar los periódicos de entonces, te lo digo para que mis palabras las vea con el soporte del caso y no simple palabras.
Cuando revises la prensa de los años 70, 80 y 90, así como la filmografía de las grandes protestas, estas estaban basadas por el derecho al estudio, por el derecho al trabajo, por los derechos en este caso en Caracas por mejores servicios públicos (alumbrado, agua potable, canchas deportivas, vialidad, aseo, transportes público), además cuando los viejitos y viejitas abogan en la calle por el respeto a sus años de servicio recibían lo suyo, también las manifestaciones públicas era por el rechazo a la represión, las redadas, exclusivamente en los barrios y comunidades a las faldas de las montañas.
Desde los barrios colindantes a las faldas del Waraira Repano al ver hacia el centro de la ciudad de Caracas se veía a la distancia el humo y el olor inconfundible de las bombas lacrimógenas, se escuchaban sirenas que iba y venían, los muertos quedaban sobre el pavimento de las avenidas, estampidas de personas corriendo de un lado a otro ante los fieros, indiscriminados y excesivo uso de la fuerza de la Policía Metropolitana, perdigonazos, balazos de verdad y a hasta el uso de las metras en las municiones policiales, las emergencias de los hospitales repletas, lágrimas y quejidos de las personas con huesos fracturados tirados en los pisos o con heridas abiertas en el abdomen.
Jóvenes metropolitanos, si detallan en las fotografías de los periódicos de la época con sus reportajes o notas de prensa, en las entrevistas de los impresos o en las entrevistas televisivas, en las entrevistas radiales, Uds. sin el mayor esfuerzo posible verán a un malvado y diabólico personaje justificando la represión, los planazos, los intensos chorros de agua fétida y con agregaciones químicas para propiciar enfermedades colaterales a los y a las protestantes cualquiera fuera la edad y el reiterativo mensaje de ese –repetimos- diabólico y malvado personaje- fue: hay que defender la Democracia! Hay que defender la Democracia de tantos forajidos, de tantos vagos y maleantes. Así decía campante, como el gladiador triunfante que sólo daba órdenes. Ese repugnante personaje tiene por nombre Antonio Ledezma quien escaló en la vida partidista de AD por su reciedumbre represiva único requisito exigido en el expediente para ascender en la institucionalidad del gobierno y del Estado y dentro de las filas de su propio partido político, además decía con nerviosa e insegura jactancia: ¡yo a Guárico no regresó jamás!. Por eso tenía que destacarse como el más malo entre los malvados.
Nos preguntamos: ¿Cuál Democracia defendía Ledezma? La del allanamiento, la de la cédula en mano y contra la pared y el planazo por el culo sin justificación alguna, solamente por ser pobre! Jóvenes metropolitanos, les pido disculpas por lo extenso de estas líneas y no cobra importancia quien soy, lo importante de todo eres tú! por eso era necesario, urgente! decirte o recordarte esto, convérsalo con tus amigos y amigas puesto que les llegó la hora histórica de reivindicar tu generación actual y resarcir las generaciones que te precedieron, ya que repulsivos y fascistas individuos que en esencia no te representan, ni merecen que tú le asignes poder, sería perder tu voto y traicionar el hilo histórico de donde tú emerges por eso tienes que ser patriota!.
Sería importante hacer una exposición fotográfica y/o fílmica itinerante en cada parroquia caraqueña para ver las secuelas represivas de lo que hizo Antonio Ledezma en cada uno de esos lugares para despertar la memoria y educar a los más jóvenes. La Zona Metropolitana merece un mejor destino.
Me resta despedirme y te reitero mi afectuoso saludo y abrazo patriótico!