¡Carajo, el asesor que le dijo a Embajada Radonski que fuera a Miami y les prometiera un barco a los venezolanos que están allá para venir a Venezuela, hay que despedirlo ya! Parece que lo hiciera para que nos jodan los chavistas. No es posible que en el estado Miranda lo están esperando desde que ganó las elecciones, y ese hombre no sabe todavía cómo llegar hasta allá. Y además, también se dice que Embajada Radonski aprovechó ese viaje para visitar a su protegido, es decir a Oscar López, el hombre que maneja los reales de la gobernación. Mejor dicho, nos estamos pisando una bola con esa estrategia de Embajada Radonski.
En Miami hubo unos compañeros que se salieron de la reunión, a pesar de que fue en uno de los mejores hoteles, y otros que no quisieron asistir porque están arrechísimos con Embajada Radonski y su política de saltaperico: va para allá, viene para acá, salta más allá y no cae en Miranda. Así no nos salva nadie de la derrota que está por venir, o que está en nuestro porvenir, en fin, una de dos. Estamos sin liderazgo, todo el mundo hace lo que le da la gana y nadie le da un parao a Embajada, que de paso, se nombró jefe de campaña para las elecciones del 8 de diciembre y por lo visto la campaña la va a hacer en Miami.
A uno le provoca salir corriendo de esta oposición, lo que pasa es que uno no soporta a estos chavistas que se quedaron con todo, pero viendo las vainas que hacemos, más de uno está pensando en abandonar este barco, que por cierto, Embajada Radonski le prometió un barco a los venezolanos que están en Miami, y esa gente que se fue en primera clase en las mejores líneas aéreas, está molestísima con esa pendejada. No es posible que nosotros no tengamos visión política, mientras los chavistas andan en su campaña casa por casa y haciendo gobierno de calle, nosotros vamos a Miami a hacer gobierno de exilio y hotel por hotel. Esas son las vainas que a nuestra militancia les arrechan. Así no nos guste esa chusma que anda por allí, lamentablemente tenemos que buscar a esa chusma y tratar de que voten por nosotros para ver si volvemos al gobierno y después los mandamos bien lejos al carajo.
El papá de Margot también se nota que está perdido. Compra todos los periódicos y recorta vainas y habla solo y escucha la radio y ve televisión. Ayer llegó y ni siquiera se sentó, escuchó en la televisión que Embajada les había prometido un barco a los venezolanos mayameros, y el hombre dijo: “Ahora sí nos jodimos”. Y lanzó la puerta tan duro, que el margariteño vecino que vino de vacaciones, gritó: “Esfarátala, que esa te la regaló el gobierno”.
- El tinajón de mi abuela se rompió.- me canta Margot
