¡Ahora sí se montó la gata en la batea! Embajada Radonski no fue a Miraflores porque dijo que no lo habían invitado oficialmente, y después, cuando vio que todo el mundo estaba allí, parece que dijo. “No voy yo a Miranda, donde soy gobernador, voy a ir Miraflores que no soy nada”. ¿Cómo va a decir Embajada Radonski que no lo invitaron? Si todo el pueblo escuchó a Maduro decir por todos los medios públicos –los privados son nuestros- que esperaba a los gobernadores y alcaldes el miércoles en Miraflores, y el único pendejo que no se enteró parece que fue Embajada Radonski, y Julio – vendedor de verduras- Borges dice que por estar protegiendo a Oscar Colina López se olvidó de ir a Miraflores.
Pareciera que todavía Embajada Radonski no se ha recuperado de la coñaza que nos dieron los chavistas en las elecciones municipales, además, después de decirle a Maduro que era ilegítimo y que lo invitaba a otras elecciones y otro montón de pendejadas sin sentido, seguramente no fue porque le daba mucha pena estar allí, en Miraflores, donde por lo visto no va a llegar nunca. Vamos, como dicen los margariteños, de churumbo en bandola, es decir, el camino es culebrero. Y hay que decir una vaina, cuando la cámara enfocaba al alcalde Alfredo Ramos, uno pensaba que esa gente estaba allí para firmar el decreto de Pedro Carmona Estanga, porque todos ellos apoyaron esa vaina. Y el Ocariz estaba gozando una bola porque había llegado a Miraflores primero que Embajada Radonski, a quien ya lo están apartando de la Mesa de la Unidad. Y Antonio –ataca jubilados- Ledezma habló como el candidato de la oposición para el 2019.
Lo que más nos jodió ese día de la reunión en Miraflores, fue que salió en El Universal – un medio nuestro- una entrevista al compañero Ramos Allup, y aquel hombre no dejó títere con cabeza, a Leopoldo – cheque Pdvsa- López y a María Corina – Sumate- Machado, los batió contra el suelo, y además, se arrechó y dijo: “ En la Mesa no estamos hablando con sinceridad”, es decir, que viene un peo de padre y señor mío, y mientras tanto, nosotros, los que apoyamos a la oposición, los propios bolsas, seguimos esperando una feliz navidad y un próspero año nuevo, porque tenemos 14 años con una tristeza larga.
El papá de Margot no quiere saber nada de Embajada Radonski. El hombre rompió todos los afiches donde decía hay un camino. Y cuando vio a Henry Falcón hablando en Miraflores, bajó la cabeza y murmuró una vaina rara, se puso de pie, fue al cuarto y le metió un coñazo tan fuerte a la puerta, que un vecino del edifico del frente gritó: “Carajo, estamos en navidad, deja esa puerta en paz”.
Te vestiste de amarrillo.- Me canta Margot.
