“El problema de las relaciones entre la estructura y las superestructuras es el que hay que plantear y resolver exactamente para llegar a un análisis acertado de las fuerzas que operan en la historia de un cierto periodo, y para determinar su correlación”… Gramsci
La historia reciente y no tan reciente nos señala que EEUU en su posición como guardianes del mundo envestidos como tales, por decisión divina, son los protagonistas de todos los golpes de Estado en Latinoamérica, pero cuando fracasan en sus intentos de colonización se lavan las manos, como lo hicieron en las últimas guarimbas. Su reciente acción de intentar un golpe para así generar una acción de caos en nuestro país, lo hacen bajo la total certeza, de su imposibilidad de ganar las próximas elecciones parlamentarias, pero también lo intentaron pensando como si la Fuerza Armada Bolivariana fuera una corporación separada del proceso social, es decir actuaron con un análisis fuera de la actualidad, de verdad ¿se creerían que una mayoría una Fuerza Armada Bolivariana, al ver su insolencia, los secundarían? ¿De verdad calcularon, que la Fuerza Armada Bolivariana realizaría un intercambio en posiciones, como en otras épocas? ¿Sinceramente pensaron que negarían el proceso revolucionario y la unión cívico-militar? Gran equivocación.
El imperio se siente agredido y retado, por las declaraciones de soberanía realizadas por la mayoría de los países latinoamericanos, “torcer el brazo a quienes no hagan lo que queremos”, declaración que indica su desesperación y actúan en su búsqueda, por la salida de las democracias revolucionarias, para imponer una subordinación militar a las ordenes del gobierno de la Casa Blanca, y así aplicar su “control social”. Pero chocaron con una Fuerza Armada que defiende la Constitución Bolivariana, leal al legado del comandante Chávez, y en defensa del gobierno del presidente Maduro por eso fracasaron es la razón de ese apoyo mínimo, por parte de los militares, expresión de traición y de una actuación contra la dignidad de un cuerpo y la de un pueblo que mantiene con nobleza e integridad su voluntad de cambiar este sistema agresor por otro que defienda el interés de la mayoría.
El apoyo de sectores de la población venezolana hacia el oposicionismo no incluye su aprobación de ataques a instalaciones en nuestro país; ellos olvidan que cuando el golpe 2002 muchos de sus seguidores, al ver su gran arbitrariedad, y violación del marco constitucional y de los derechos humanos se opusieron a sus desmanes, imaginasen como actuarían al ver un derramamiento de sangre como el que hubiese provocado ese tucano disfrazado como venezolano, esto porque ese sector que los sigue, también es venezolano, y como tal es pacifico profundamente democrático y se rebela ante eventos como el intentado por ese sector esquizofrénico de la derecha venezolana.
Lo acontecido nos visualiza a una dirigencia opositora en un laberinto, que les anula su capacidad de ver y analizar la realidad que les rodea, perciben inestabilidad por confrontaciones internos en el seno de la Fuerza Armada Bolivariana, califican a un gobierno sin apoyo popular, cuando en la realidad es todo lo contrario, sigan así para poder seguir dándole palo al tiburón.
“La fuerza Armada Nacional bolivariana (FANB) es ahora determinante para la construcción de una sociedad cada vez más justa, y por ello deben seguir consolidando el nuevo pensamiento militar bolivariano y la unidad cívico-militar”… Hugo Chávez