Parece mentira que el dinero siga causando estragos en la sociedad y que no tiene distingo de raza, credo ni color, por 30 monedas vendió Judas Iscariote a Jesús de Nazareth, y de allí en adelante la historia se ha repetido montones de veces, unas pasan desapercibidas y otras demasiado notorias pero el significado es el mismo, con el mismo peso tras la espalda, cuando por uno u otro motivo ponemos precio a nuestra forma de proceder, abandonando los valores de todo tipo dejamos de ser quienes hemos sido para convertirnos en una simple y vulgar mercancía con P.V.P. al que cualquiera tiene derecho a decirle “te doy tanto y me haces este trabajito” que por supuesto no tiene nada que ver con la profesión que hemos elegido como medio de subsistencia son siempre trabajos sucios.
En nuestro país se han dado mucho estos casos y mucho más en los últimos años, aunque como ya lo dije la mayoría pasan desapercibidos y son el pan de cada día, pero tenemos otros que han consternado no sólo a la población sino que han hecho daños irreparables al seno familiar
1.- La muerte de nuestro amigo y camarada Robert Serra, su propio guardaespaldas le puso precio a su cabeza, ¿Que logró? La muerte de dos jóvenes que su único delito era creer y practicar su ideología y pensamiento, desmembró 3 familias y destruyó su propia persona, porque nunca volverá a ser el mismo después de haberle puesto precio a su conciencia para realizar tan abominable hecho.
2.- Leamsy Salazar soldado venezolano, hombre de confianza de Hugo Chávez, vendido por unos cuantos dólares para dar información confidencial del gobierno, acusar falsamente al presidente de la Asamblea Nacional y cuidado si tiene algo que ver con la muerte de nuestro líder su conducta deja mucho que pensar, en fin perdió su carrera, su país y dejó a su familia con una carga que no le pertenece, toda su gloria la convirtió en pena cuando sacó de su vida las enseñanzas familiares para dejarse seducir por una abultada suma de dinero.
3.- Carmen Briones, “Madre” que fue capaz de exponer la seguridad de su propio hijo cuando recibió una fuerte suma de dinero para difundir la falsa noticia de que le había sido arrebatado, ¿En qué pensaba cuando lo hizo? ¿Quién le aseguraba que todo iba a quedar solo en una voz de alarma? ¿Por qué no se detuvo a pensar que nadie da una suma tan grande de dinero solo por difundir una noticia tan alarmante?, son tantas preguntas que el solo pensar en las consecuencias de esa acción a cualquier madre asusta, pensando en manos de quien ponemos a nuestros hijos, ahora le toca enfrentar a la justicia lejos de sus hijos a quien no lo pensó dos veces para ponerlos en un riesgo inminente
Sé que estamos acostumbrados a convivir en un ambiente donde los valores, la ética y los principios son lanzados al cesto cuando el dinero llega dicen que fácil, porque en realidad las consecuencias siempre son terribles, pero muchos no dejamos de asombrarnos al tropezarnos con los bajos instintos que es capaz de generar el tan codiciado dinero mal habido.