Muerte a los chavistas

El odio antichavista en nada difiere del que le profesaron los nazis a los judíos, el cual tuvo como atroz expresión el asesinato de más de 6 millones de ellos, muchos militantes y simpatizantes "comunistas" y otros tantos más (minusválidos, gitanos, etc.), en sólo cinco años y lo más perverso de toda esa atrocidad, es que en buena parte se hizo con el beneplácito y la participación de muchas personas comunes y corrientes.

La derecha fascista criolla nos llama desdentados, asquerosos, tierrúos, etcétera y agrega que, como tales, debemos morir todos, sin dejar a ninguno para garantizar así que la especie a la cual pertenecemos, desaparezca de la faz de la tierra.

En absoluto exageramos. Lo hemos escuchado varias veces y verificado que otros han oído lo mismo y vaya a cuento este caso que pareciera increíble y que, aclaramos, nadie nos lo contó, lo vivimos: Una dama de avanzada edad y quien, supimos, rezandera como pocos, ante una recriminación que se le hiciera por desear la muerte de los chavistas, pues con ello quebrantaba los sagrados mandamientos de "no matarás" y de que "amarás al prójimo como a ti mismo", sin titubear, ripostó: "eso Dios me lo perdona, él sabe que es la única solución si queremos salvar a Venezuela."

Ello explica el primer bloque de texto. Afirmamos, sin titubear, que en el supuesto negado de que llegara a gobernar el país la extrema derecha venezolana, los Pinochet y los Videla se quedarían como niñitos de pecho. La razia criminal anti chavista no tendría parangón alguno en la historia de las últimas cinco o seis décadas, al menos, en nuestro continente…

No olvidemos que en abril/02, ya Carmona auto juramentado, no sólo el país todo vio el asedio fascista generalizado. Repudiable fue el ataque feroz a la embajada cubana, igual la golpiza al exministro Rodríguez Chacín durante su detención por parte de hordas al mando de los alcaldes Capriles y López, criminal la furia desatada por la policía Metropolitana contra un pueblo que pedía el retorno de Chávez y, quizás, lo peor de tan espantosa realidad, la conducta reprochable en extremo que asumieron algunos presentadores de la TV privada, aún muy activos muchos, quienes, sin descanso ese 12 de abril/02, hacían llamados urgentes para que se le informara a la policía del "gobierno de transición democrática", el escondite de los funcionarios del recién derrocado régimen chavista…!

Muy a pesar de que haya venezolanos que les incomoda que se les hable de historia, es necesario que jamás olvidemos que la persecución, la tortura, la desaparición y el asesinato de adversarios hacen parte de una política de Estado infaltable de la derecha fascista adonde llega a gobernar, por la vía que fuese. Los ejemplos al detalle, nos llenarían cientos de cuartillas…



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Iván Oliver Rugeles


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