Al cruel, las lágrimas lo deleitan,

no lo ablandan.

Proverbio castellano

La pregunta la repitió Capriles Radonski, con sus acostumbradas amarguras, reflejadas en el rostro. La palabra fariseo, le encaja a la medida, no merece decirle gobernador, menos señor, a quien, ha perdido esos calificativos, por una razón totalmente entendible por los defensores de la paz: de guarimbero, paso a terrorista, para ir cavando su propia "tumba" política, al convertirse en uno de los jefes de grupos de encapuchados–gráficas y videos lo atestiguan– en plena autopista "Francisco Fajardo" retando al gobierno, y a la ciudadanía en general, el cual diariamente tiene que aguantar todos los arrebatos de locura, de estos facinerosos.

La expresión, parece una oferta de mercado, solamente le faltó decir: ¡Se los tenemos! No es nada nuevo su manera de actuar, desde hace varios años se encuentra alimentado por el odio, vomitando en contra de la paz. No podemos olvidar el asalto a la embajada cubana, creando destrozos a los inmuebles de esa sede diplomática, y si el pueblo no sale a la calle al rescate del Comandante Chávez, restituyendo el hilo constitucional, no sabemos qué les hubiese pasado a los integrantes de esa delegación.

Con toda razón un joven universitario, en repetidas oportunidades le escuche decir ¿Quién protege a Capriles? El muchacho, Andaba con su padre, haciendo unas compras en pleno centro de Acarigua, y en una corta conversación sobre la grave situación del país, hacía la misma pregunta. El papá, hombre muy comedido, trataba de calmarlo, estaba muy inquieto, y por momentos muy contrariado, cuando se alejaron, dejó escapar la rabia contenida al expresar en un tono muy fuerte: ¡No hay castigo! ¡Capriles tiene varios años jodiendo, como cualquier terrorista y hasta los momentos la justicia no actúa!

Por los vientos que soplan, parece que va a seguir en la misma desenfrenada carrera; se está jugando a Rosalinda (poema de Ernesto Luis Rodríguez) y no es precisamente en un par de dados. Ahora se encuentra inhabilitado –15 años– por razones justificadas, según el informe de la Contraloría General de la República: "Actuó de manera negligente al no presentar el proyecto de Ley de Presupuesto para el ejercicio fiscal correspondiente al año 2013 ante el Consejo Legislativo del estado Bolivariano de Miranda. Celebró convenios de cooperación internacional entre la gobernación a su cargo y las Embajadas de la República de Polonia y de Gran Bretaña, sin la autorización legal requerida, y algo muy grave: Omitió el procedimiento de selección de contratistas, comprometiendo el presupuesto público mediante contratación directa".

Esa decisión no lo deja dormir tranquilo, y además del subconsciente no se le borra una frustración muy grande, al ser derrotado en dos oportunidades al presentarse, como candidato a la Presidencia de la República: el primer revés fulminante se lo dio el Comandante Chávez, el cual ofendieron hasta el cansancio, pero nunca pudieron humillar, y menos doblegar. Después fracasó antes Nicolás Maduro, por una votación muy importante, desconociendo los resultados emitidos por CNE, el mismo organismo, que lo proclamó gobernador. La respuesta un grito de guerra: ¡Hay que descargar las arrecheras!

Desde ese momento, Capriles Radonski, prácticamente abandonó la gobernación de Miranda, para apoyar todos los intentos golpistas contra el gobierno bolivariano. Se despierta, y se acuesta, pensando en la caída de Maduro, sin importarles los muertos, heridos y destrozos tanto públicos, como privados. Al desechar el dialogo, no le queda otra: mudarse para la autopista "Francisco Fajardo" para seguir cometiendo sus fechorías, y mantenerse vigente ante la opinión pública con el apoyo de los medios. Sus declaraciones lo acusan. El axioma jurídico: "A confesión de parte, relevo de pruebas" es muy claro por su significado: quien confiesa algo libera a la contraparte de tener que probarlo. ¿Qué espera la justicia para actuar?