En una oportunidad anterior, la MUD quemó unos cuadernos de votación y los electores en esa ocasión fueron como ese judas de la tradición de semana santa. Hubo una aparente fiesta electoral y al final, los que decidieron tomarse su tiempo para votar no sirvieron para nada. Fueron útiles para el circo.
Yo creo que si alguna falla tiene las organizaciones políticas que forman parte de la MUD, es que carecen de una actualizada bases de datos sobre sus militantes y amigos. AD debe saber la utilidad de esa base de datos porque la utilizó bastante para ganar elecciones a través de la llamada operación galope, que consistía en saber dónde estaba su militancia y disponía en cada elección de una maquinaria para sacarlos a votar.
Este domingo 16 de julio, la MUD con AD dentro de ella, realizó una "consulta", que ni alcanza para llamarla encuesta porque tenía u exceso de descontrol. Vendió la idea de darle seguridad al consultado por posible represalia, pero es muy cuesta arriba suponer que este fue el motivo por el cual, una vez más; la MUD decidió prenderle fuego a los cuadernos de consulta.
A falta de una base de datos sobre su militancia y amigos, la consulta pudo servirle como una primaria información para organizar a sus simpatizantes y hacer uso de ellos de manera constructiva y organizada.
La MUD con este acto envía el mensaje que tiene de sus simpatizantes y amigos. Para la MUD, cada firma no es una persona con una capacidad, una habilidad, un sentimiento. La persona es simple y llanamente letras continuas, que después de ser usada, la única cosa que cabe hacer con esas letras es quemarla.
Lo básico es usar letras y planas, que luego la candela vuelve cenizas. Una consulta por más rudimentaria que sea, ha podido servirle a la MUD para saber quiénes están con ellos, cómo y dónde.
Un Judas de esos que queman en semana santa alcanza más respeto, porque la gente lo identifica con un perfil, se conoce a veces su testamento y se deja ver por todo un día. Estos judas de la consulta de la MUD no llegan a tanto.
