¡Soberano coñazo nos acaba de meter el régimen! Cinthya, Kathy, Harold, y Philip se fueron a hacer la cola en el Colegio Sucre para sacar el Carnet de la Patria. Nos jodímos por completo y no se reserva el derecho de admisión. Al principio nos arrechamos bastante, pero al rato nuestra propia gente comenzó a decir que la vaina parece que va a funcionar, así que mejor déjense de pendejadas y saquen su Carnet de la Patria para pagar la gasolina, eso sí, los bonos que les lleguen por allí, se los dan a las señoras del servicio de adentro y de afuera. Y lo peor es que no hay un timbre que tocar para ver si sale alguien en quien confiar. Tanto gritar "y va a caer y va a caer, este gobierno va a caer", y terminamos cayendo nosotros como unos mismos pendejos en una cola, después que nosotros mismos habíamos prometido que aquella, la de las elecciones a la Asamblea en Desacato, sería la última cola, no me jodas, Espoleta Allup.
Y antes vino el Bolívar Fuerte, y lo derrotamos, como debe ser, porque aquí entre nos, eso de derrotar un Bolívar es una épica, una batalla de gloria, libertad y honor, y ahora nos vienen con el Bolívar Soberano y nos clavan, porque dicen que está anclado en el Petro, que a la vez lo anclaron en millones de barriles de petróleo, y mira ese barco que va por la bahía. Y después de jodernos con aquello del medio Petro, salimos a decir que no teníamos cómo pagarle a nuestros explotados, perdón, a nuestros trabajadores ese sueldo mínimo que había decretado el dictador, y salió todo el mundo a sumar panes y cachitos con el sueldo anterior y la suma era más que la de María – Sumate- Machado y la vaina parece que sí da. Y después vino el remate, a ahorrar en ricitos de otro, perdón, en lingoticos de oro. Quién carajo soporta a un chavista ahorrando en oro, cuando todo el mundo sabe que esos carajos lo que ahorraban antes eran penas y penas que jode.
Es que también nosotros somos muy vagabundos. La última sesión de la Asamblea en Desacato nos dio vergüenza ajena. Espoleta Allup llamó a votar y se presentó la de Dios es Cristo. Y además, no había cuórum en esa vaina, porque los demás diputados estaban sacándose el Carnet de la Patria. Nada más estaban allí 37 diputados. Y de ellos 30 ya tenían el Carnet de la Patria, y están pidiendo un cajero automático en la Asamblea en Desacato para sacar sus bolívares soberanos. Yo nací cuando Dios estaba enfermo, grave.
El papá de Margot llegó muerto de la risa. Se metió la mano en el bolsillo y mostró contentísimo el Carnet de la Patria y se fue al cuarto, y para celebrar, agarró la puerta y le metió aquel coñazo tan fuerte que un vecino gritó: "Urgente. Reunión de condominio para botar a este carajo de una vez".
- Solo, irremediablemente solo.- Me canta Margot
