¡Toma chocolate, paga lo que debes! Estos chavistas nos van a volver locos de bola a bola. Antes hablaron de una canasta de divisas, después del Petro, y ahora le dijeron al dólar, aparta de mi este cáliz, y dicen que la cosa es con el euro. Y los compañeros, que estaban acostumbrados a robar en dólares, ahora tendrán que cambiar de ramo y llevarse todos los euros que puedan. Más de dos mil millones de euros inyectó el dictador al mercado, y uno esperando esa inyección para ver si se compra un bohío en Salamanca, España, allá en el Rancho Grande, donde vive Antonio – Sanciones- Ledezma y otros compañeros de los que no quiero acordarme porque están allí haciendo oposición a punta de lucha y solidaridad y prohibido olvidar.
Uno sabe quiénes fueron los compañeros que crearon el paquete económico del compañero Pérez, a quien Dios tenga bien gordo en la gloria, allí estaban Miguel –Paquetico- Rodríguez, Ricardo – Cisne Negro- Hausmann, Moisés -FMI- Naím y Gerber Torres, pero todavía nadie sabe los nombres del equipo económico que ha creado este paquete que nos montó el dictador. Si estuviera por allí Giordani uno pensaría que fue él, pero de los que están uno sabe que ninguno de esos sabe lo que son unas operaciones de arbitraje. Así que, mientras algunos países europeos quieren salirse del euro, allí está Italia, por ejemplo, nosotros nos lanzamos de cabeza como pájaro buchón con el Euro. Coño, un momentico, no se apuren, que vamos en bajada y vamos todos en el mismo autobús del progreso que dejó Embajada Radonski abandonado, triste, fané y descangallado.
El compañero exembajador de Estados Unidos aquí, William Brownfield, también nos quiere joder acelerando las sanciones y el bloqueo para ponernos a sufrir no importa por cuánto tiempo, con tal de que salgamos del dictador, pero carajo, la vaina tampoco es así. Ese compañero Brownfield quiere cobrarnos las vainas que les hizo Espoleta Allup en la Embajada, y Víctor Bolívar y Pedro Pablo Alcántara, que tenían locas a las secretarias de la embajada llamando a cada momento y preguntando si había llegado el cheque. Ahora el compañero Brownfield nos quiere cobrar ese chantaje adeco que le hicieron mientras fue embajador, la vaina tampoco es así, Míster Danger.
Y también hay que decir que hay unos carajos que quieren diálogo con el dictador, pero no lo quieren decir por temor a que le caigan encima los bam- bam-, es decir, los aquí manda papá Montero. Pero ya sabemos que invasión no hay, como no hay carne ni azúcar ni leche ni gas, así que mejor salimos a votar el 9 de diciembre para ver si ganamos esas elecciones y nos dejamos de pendejadas golpistas, porque según la encuesta del ex rector Luis – Golpe- Ugalde, el gobierno va de frente y da la cara, y nosotros vamos de espaldas y dando pena que jode.
El papá de Margot estaba viendo su canal de televisión y salió el vicepresidente económico rodeado por el presidente del Banco Central y el Ministro de Finanzas, y cuando dijo que ahora no queremos nada con el dólar sino con el euro, el hombre se puso de pie, vio el techo del apartamento, giró la vista hacia la puerta del cuarto, y dijo: "Me acuerdo de un grupo de maracuchos que cantaban, y se llamaban las cuatro monedas. Así estamos nosotros, con el bolívar fuerte, el soberano, el dólar y ahora el euro, ¿Cómo puede un país vivir con cuatro monedas?". Agarró la puerta y se cuadró, como si fuera a dar un batazo, y se escuchó aquel campanazo de padre y señor mío, y un vecino dijo: "Me rindo. No disparen más. Me rindo"
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Usted la mandó a poner, que si la pone la paga y sino la pone también.- Me canta Margot