Conjetura: “Del latín coniectura (coniicere), echar en un montón, conjeturar. Juicio probable formado acerca de una cosa o persona a partir de señales o indicios: después de la investigación hará pública sus conjeturas.”
Chávez se ha convertido en un estratega de la “Cuerda”, esa que se lanza para aquellos que buscan agarrarse de algo, que de paso le gusta lucir guindándose. Muchos viven intrínsecamente pegados a la Cuerda, de lo contrario sentirían que no se sostienen, es decir que no existen. Desde hace unos años, quizás después del golpe de estado del 11 de abril, Chávez tiene un mayor control de la cuerda, lo que le permite estirarla y recogerla a su antojo, necesidad o política de acuerdo al contexto que se desarrolla dentro de la dinámica diaria del país. Por tal razón, sigue siendo el presidente el único motor que genera noticia, abre los ambientes de las polémicas para la oposición (sin que esta se ubique en el debate serio y responsable). Por eso, sigue siendo muy triste, que la oposición no tenga la capacidad de generar la noticia (no me refiero a la basura diaria que sale todos los días en los medios privados), sin criticas, sugerencias, reclamos de peso y con base en la ética política, en el apego a la norma vigente, o de acuerdo al clamor popular.
La oposición involuciona, se reduce en su amorfo proceso de desaparición con sus pocas “instituciones” que la acompañan, respaldan o la estimulan. La ceguera es tan pronunciada, que aun habiendo espacios que pueden conquistar (sean cargos legislativos, administrativos tipos alcaldías o gobernaciones) no se los permiten ver. Menos alcanzar. Por otra parte, está el ganarse las masas, pero ¿Con qué trabajo ganárselas? ¿Cómo sembrar una nueva imagen en el seno del electorado, con qué credibilidad?. De allí, su diminuta influencia real (la mediática es otra cosa, que poco a poco se va evaporando, pues la gente se cansa del mismo discurso rayado de sus voceros). Por eso Chávez dice con frecuencia que el se irá en el 2021, gústele o no le agrade a la oligarquía, pero es así. En este caso, Chávez controlará la cuerda por muchos años, se ha convertido en un maestro, con arte y estilo. Además, el factor psicológico de la derrota en la oposición le engendra un desespero que de cualquier hilito se guinda sin pensarlo, también esta el Síndrome de las Dudas (pues son muchas a la hora de la verdad), sobre el triunfo, que hace mella a cualquier intento baboso del auto postulador. Se generó otro síndrome, “El Colectivo de la derrota”, los síntomas van desde la depresión se perciben detrás de cada sonrisa falsa cunado se les entrevista en sus búnkeres mediáticos hasta la desesperación. Por eso canalizan sus programas y participación en las televisoras a un público imaginario, por recomendación médica psiquiátrica. Por allí, salen las conjeturas de la conjetura, no tan solo falsean la verdad, sino sus propias realidades. La frustración es mayor cuando salen a las calles a buscar el respaldo popular, o en consecuencia a “inundar” las calles y avenidas en sus actos proselitistas o de reclamos.
La oposición, con sus dirigentes lacayos van a la conjetura de la conjetura con la patraña de la política clientelar dictada desde el imperio, pues antes de “leer, estudiar, analizar e investigar” una cosa, corren a emitir sus posiciones, recientemente pasó con la nueva Ley de Inteligencia y Contra inteligencia (ya derogada), el llamado del presidente a las FARC o sus nuevas medidas económicas, ya salieron por sus tribunas mediáticas a gritar que el gobierno quiere, que los venezolanos se conviertan en “sapos”, verdugos y verrugas de las denuncias; que ahora cambió de posición con respecto a las FARC; que por fin se dio cuenta de que el país no avanza ni crece económicamente, etc., etc., Chávez los tiene locos de remate, no pueden con él. Lo que pocos se imaginan es que el Sapo o soplón de la oposición quedó al descubierto, le echó paja a un montón de opositores, lo triste es, que es un cuento inédito de la dirigencia de la oposición, así lo recoge un informe de inteligencia de la CIA, donde contiene las “pajas” que unos se tiran sobre los otros. La Ley Sapo los puso a saltar.
El simplismo por simplicidad. La conjetura por conjeturar, ya no es un capricho de los cuartorepublicanos es una vocación aptitudinal y conductista propia, que emana desde sus huesos.
En muchos casos, es peor que eso, les sale del hígado enfermo, por creencia propia ya son unos alípedos, con un radar confundido, que no les sirve ni en las noches mas oscuras. De allí, que no sabe si volar o caminar. Esa dualidad, no los confunden, los enredan, los atrapan en sus ficciones de poder. No importa para ellos si el detalle, problema o caso es del tamaño de un alfiler o de un elefante. Apenas se enteran del caso (repito, sin “leer, estudiar, analizar e investigar”) salen a la loca a manifestar sin sentido ni coordinación política ni ética. Recuerdo el caso de la nueva ley de educación, que un periodista de VTV le preguntó a un manifestante de la oposición si se había leído la ley, y el tonto ovejo respondió que no, pero que sabia que era una mala ley para el país. También la muy Ni-Tu Pérez Osuna, que entrevistando al general (Pollolie) no sabia que expresa el artículos 46 de la constitución bolivariana, menos el resto de los artículos de la constitución. Ni-Tu léete, todo el capitulo III (De los derechos civiles), que van desde el art. 43 hasta el 61. ¡Oye! Yo vivo los últimos 8 años fuera del país y sé, que no he encontrado ninguna otra constitución en el mundo, que contengan tantos derechos civiles expresados como la nuestra. Incluso la norteamericana, tanto que los gringos se jactan de la defensa de los derechos civiles, que no la tiene recogida ni siquiera dentro de su constitución, es una ley ordinaria, que en muchos casos ni se cumple. O léete la constitución española, a ti, que tanto te gusta España para opinar basura en contra de Chávez y de la revolución y compárala con la nuestra y verás la diferencia que existe entre ambas normas.
Patria Socialismo ó Muerte
¡Venceremos!
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