Acuérdate siempre, Antoñito, hijo de mi alma, que en Venezuela vivir sin poder es no poder vivir, y cuando no se tiene plata, como no la tenía yo, tan sólo un camino: Coger aunque se fallo. Quien conoce el deleite del mando, es como el tigre que come carne humana (…) Tan sólo el poder, y nada más que el poder será su afán; y si para lograrlo hay que comer mierda, se come aunque sea de a buchito”[1]
Este lunes (22/02/2010) los cinco gobernadores de la oposición junto con el Alcalde Ledezma, enviaron una carta pública al Presidente con la singular versión (talla única) que regularmente utilizan para “discutir” un tema o para tratar de cuestionar una nueva Ley que les limita poder y reduce la cantidad de recursos que reciben por concepto de FIDES y LAEE para hacer sus negocios o resolver “sus vidas”. Si falta la “platica” su poder se reduce y por esa razón, andan detrás de la miseria vendiéndose, porque para estos personajes, que tuvieron mucho poder y lo derrocharon, “vivir sin poder [y sin platica] es no poder vivir” y en esa búsqueda de “platica” y poder, optan por mentir, manipular a unos que se la echan de sabios e intelectuales y si tienen que comer mierda gringa para conseguir eso, no lo dudan, se atragantan.
En esta carta abierta enviada al presidente con un subtítulo muy sugestivo (Una vía hacia las grandes soluciones) es posible ver parte de ese dialogo imaginario que Herrera Luque trazo entre Antonio Leocadio Guzmán y su hijo en su novelas los cuatro reyes de la baraja. Cada vez que le meten una “rabo cochino” para transferirle competencia y poder al pueblo, se retuercen en su mierda y se la tragan de una vez.
La carta tiene un contenido de esos que dejan desnudos a los que la firman y permiten verlos tales y como son. Primeramente y como parte de libreto ya escrito, califican de anticonstitucional la Ley del Consejo Federal de Gobierno. Así lo han hecho con todos y cada uno de las leyes aprobadas durante este proceso. No declararon inconstitucional el Proyecto de Constitución aprobado en referéndum nacional, porque se dieron cuenta era que mucha barbaridad junta, pero eso no impidió que se produjeran cuestionamientos y calificativos, que hoy ya no usan porque la constitución le sirve para todo.
Una vez cumplido con el requisito del libreto: Todo es anticonstitucional, pasan a desarrollar los otros esquemas que repiten indistintamente en cada “cuestionamiento”. Como deben suponerse, porque es parte de ese libreto escrito, el tema de la descentralización hace su aparición y aquí, comienza a salirle la condición de cínicos que tienen unos personajes que resistieron y le dieron larga a esa lucha que emprendieron los denominados notables para producir una reforma al Estado, que no logró pasar de tímidas propuestas. Todo ese proceso que los adecos y copeyanos represaron (y con Ledezma en funciones de mando), llegó simplemente hasta la elección directa de los gobernadores y producción de una leyes, entre la que sobresalen: FIDES y LAEE. No huno otro avance.
Con todo el cinismo que es posible imaginar en unos bandidos y eso ya es como un contra sentido, estos seres son capaces de escribir una carta al Presidente que contiene muchas “perlitas”, pero para ahorrar espacio, me permito colocarle una, que luego veremos su alcance cínico.
“La descentralización fue la más importante conquista de la democracia en la segunda mitad del siglo XX. La idea venía germinándose progresivamente pero se materializó el 27 de febrero de 1989, cuando un pueblo harto de no ser escuchado, salio a la calle a reclamar su derecho a ser más dueño de su propio destino (…) La Descentralización liberó a la providencia venezolana del duro, enojoso y excluyente control de centralismo, que venía frenando el desarrollo, dependiendo como estaba en los caprichos displicentes de la burocracia nacional”
Si se buscan unas frases para hacerle un prólogo a una obra maestra sobre el cinismo y la hipocresía en la política, el texto anterior cabe como un hermoso epígrafe a ese prologo. Ledezma, según el sentido cínico de esta nota, no había nacido y en consecuencia, no podía haber sido diputado, ministro varias veces, gobernador y miembro de esa instancia partidista (CEN) que tenía mucho poder y represaba reformas. Morel Rodríguez para esa fecha estaría de mano derecha de algunos de los Puerta Aponte y Pérez Vivas, seguramente para ese momento tenía los típicos malestares que sufre un niño cuando están por salirle los dientes.
Ledezma no era parte importante de un gobierno cuando “un pueblo harto de no ser escuchado, salio a la calle a reclamar su derecho a ser más dueño de su propio futuro”. Morel Rodríguez posiblemente ya comandaba un frente guerrillero de Bandera Roja y Pérez Vivas con sus “dienticos” de leche ya creciditos, estaba en una tina pasando una fiebre por la aparición de las muelitas. Cuando la provincia venezolana se encontraba en ese “duro, enojoso y excluyente control del centralismo”; German Moster (Ledezma), Morel Rodríguez, Pérez Vivas y los otros no tenían nada que ver con esa dura exclusión ni con “los caprichos displicentes de la burocracia nacional”.
Su interés es la “platica” y por eso, su insistencia en preservar un modelo de descentralización para darle recursos a los gobernadores y alcaldes, porque eso le da poder y plata y sin eso, no pueden vivir. Si la línea del gobierno intenta darle recursos a las comunidades organizadas (Consejos Comunales), esa disposición se califica como un intento de liquidar la descentralización y de recomponer el centralismo. En algo tienen razón, porque, si la línea política le confiere poder y recursos a las comunidades organizadas, efectivamente se esta demoliendo en un enfoque sobre la descentralización y redimensionando el poder popular.
El artículo 7 de la Ley del Consejo Federal de Gobierno los tiene tenso porque la “platica” se le va. Esperemos que esa transferencia de recursos se instrumente rápido al poder popular. De repente veremos a Ledezma lazándose como Vocero de un Consejo Comunal. SI hay platica ahí, es posible que aspiren a una vocería de un consejo Comunal.
evaristomarcano@cantv.net