La Plataforma Contra el Arco Minero se pronuncia en solidaridad con los profesores Emilio Monsonyi, Santiago Arconada y Edgardo Lander, destituidos de sus cargos a partir de la manifestación pública en defensa del derecho al Referendum Revocatorio, que realizaron el pasado 18 de julio en rueda de prensa con la Plataforma por la Defensa de la Constitución. Cabe destacar que los profesores son activistas en la lucha contra el Arco Minero y han venido impulsado la campaña nacional por la nulidad de este decreto. A continuación el manifiesto de solidaridad de este espacio de articulación:
Basta de retaliaciones políticas. Solidaridad con: Esteban Emilio Mosonyi, Santiago Arconada y Edgardo Lander
El pasado martes 19 de julio, Esteban Emilio Mosonyi, Santiago Arconada y Edgardo Lander, rector y profesores de la Universidad Indígena del Tauca respectivamente, fueron destituidos de sus cargos en dicha institución. La medida fue tomada un día después de que estos expresaran públicamente, en una rueda de prensa, su exigencia de respeto al derecho del pueblo venezolano al referéndum revocatorio y la defensa íntegra de los derechos constitucionales. Dicho anuncio lo hicieron acompañados de otras personalidades que conforman la “Plataforma en Defensa de la Constitución”
Desde la “Plataforma contra el Arco Minero del Orinoco” nos solidarizamos con estos compañeros y repudiamos esta acción, que no es otra cosa que una retaliación política directa por expresar una opinión distinta. Esta represalia desprecia y atenta contra más de un siglo de lucha por parte sectores de estudiantes y profesores, en Venezuela y América Latina, en defensa de la universalidad de pensamiento y el debate crítico dentro de las universidades. Es la lucha contra el pensamiento único que se han pretendido imponer desde las cúpulas.
El hecho de emitir una declaración disidente ya es motivo para que los directores de las instituciones educativas los despidan de sus puestos de trabajo y sean víctimas de campañas de desprestigio. Se hace un lado las luchas incesantes por el derecho al trabajo y la libertad de pensamiento consagrada en la constitución, mas particularmente en los espacios que se suponen se abren a la enseñanza y al debate.
Es inconcebible que esto ocurra en el siglo XXI y más en una institución única que representa una conquista de los pueblos originarios en Venezuela ante siglos de exclusión del sistema educativo en Venezuela. Además, Mosonyi, Arconada y Lander han sido luchadores consecuentes con la causa indígena y sus reivindicaciones sociales y culturales. Tienen un historial impecable que ninguna destitución puede empañar. Crea indignación ver como instituciones que se hacen llamar “revolucionarias” cometen semejantes barbaridades contra personas cuyo único interés ha sido apoyar una de las causas más dignas en la lucha de los sectores excluidos.
Igualmente, en Venezuela se despidieron mas de 2800 dirigentes sindicales entre 2006 y 2011, en su mayoría con procedimientos en los tribunales del trabajo con reenganche y pagos de salarios caídos, los cuales no se cumplió ninguno. De igual forma están los casos de los profesores Manuel Sutherland y Omar Vazquez no recuerdo sus nombres- despedidos de la UBV, también por diferencias políticas; el caso de Ivan Freites y Bladimir Carvajal, ambos trabajadores de PDVSA, directivos sindicales despedidos por opinar diferente.
Estas destituciones son un símbolo claro y peligroso de autoritarismo, el cual se viene reflejando en otras instituciones del estado, empresas y organizaciones comunitarias. Despidos injustificados, campañas de desprestigio, amenazas, hostigamiento por parte de los cuerpos de seguridad y prohibición de reuniones o asambleas en espacios públicos son algunos de los síntomas que se perciben semanalmente en estos espacios y que son direccionadas por camarillas del estado.
