Este fin de semana pasado, el pequeño grupo que se autodenomina “pepe grillo”, realizó un encuentro estadal en el municipio Bruzual -Clarines- del estado Anzoátegui y ahí estuvimos 57 personas y un invitado que contactamos para que nos presentara una ponencia sobre su visión para el 8-D en Anzoátegui.
El invitado es del estado[i] no muy conocido, pero activa en Caracas y tiene un acercamiento indirecto a través de dirigente nacional con el equipo de los 15 de la dirección PSUV Anzoátegui. Además de esta condición, tiene información sobre la situación electoral y siendo un cuadro del PSUV está conectado con encuestadoras. Después de un cafecito casero preparado por una de las camaradas que estuvo en esa logística, se dio inicio al evento con la disertación del invitado.
Pensé que nos presentaría una balance mostrando datos y números para confirmar sus planteamientos de cómo veía el escenario del 8-D en Anzoátegui y me equivoqué totalmente. Hizo una larga introducción a la situación electoral desde 1998 y presentó algunas gráficas nacionales sobre el movimiento de los datos y cuando suponía que entraría particularmente en materia del estado Anzoátegui, presento un documento que él creía era del conocimiento de los que estábamos ahí reunidos y de la militancia del PSUV. Era un documento que dejó ver en la pantalla donde hacía la presentación, que según sus palabras, fue un documento elaborado por una comisión del PSUV Anzoátegui y que discutido en su seno.
Si me obligan hacer un resumen de los que pude leer en pantalla mientras el camarada invitado se refería al contenido del documento, debo decirle, que de lo que pude leer, concluyo que la Comisión que elaboró el informe y si el PSUV Anzoátegui lo discutió internamente, están claros que lo que paso el 14-A no fue su responsabilidad o parte de su responsabilidad. En otras palabras; cada uno de los 15 están claro y responde a esa inocente expresión de: Yo no fui.
Si me atengo a lo que rápidamente pude copiar de la presentación; la derrota del 14-A fue en primer orden culpa de Chávez. A la pregunta: ¿Qué sucedió el 14-A? La comisión y el PSUV Anzoátegui nos remiten a la ausencia de Chávez. Se concluye entonces que los 15 carecen de proyección y “yo no fui” emerge como explicación. Culpa de Chávez, según se lee.
En segundo lugar, los 15 acuerdan que los resultados del 14-A fueron productos del comportamiento de los electores. Este “yo no fui”, se explica un poco más responsablemente porque según el informe, “no se hizo una valoración del descontento”. ¿Quién no lo hizo? ¿Quién debía hacerlo? ¿Era muy complejo conocer el porqué del descontento? Más adelante pude copiar lo que sigue y donde persiste el “Yo no fui”
“se observa debilidad ideológica en parte de los sectores populares que no lograron establecer las diferencias entre los dos modelos. Ese segmento del pueblo confundido, al ver que algunas de sus necesidades básicas no estaban cubiertas, ignorando, por desconocimiento , por falta de identidad con su clase, al no tener claridad que solo –sin acento-en el socialismo es posible resolver las carencias, votó por la propuesta de la oligarquía”
Surge aquí nuevamente el “Yo no fui” porque estaba comprando kerosene. Pero además, esta “explicación” burda merece una aclaratoria. Dicen que hay debilidad ideológica y que no lograron establecer las diferencias entre los modelos y que ese “pueblo estaba confundido al ver que algunas de sus necesidades básicas no estaban cubiertas. Este “yo no fui” se conjuga con desorden en las ideas. El Pueblo según los 15 no logró establecer las diferencias y estaba confundido, pero sabía –y sabe- que sus necesidades básicas no estaban siendo satisfechas.
Luego este “yo no fui” se le endosa a las instituciones públicas por la “poca identificación y falta de compromiso”. Pregunto: ¿Para qué es una dirección política? ¿No es para conducir, vigila, evaluar y trazar líneas? ¿Han asumido esta responsabilidad?
El análisis que nadie conoce está lleno de incoherencias y con más “Yo no fui” de explicación. Culmina con “propuestas” de reuniones, discusiones y análisis con las coordinaciones municipales, parroquiales, UBECH y sus patrullas que la realizarían en la luna. Nada de esto se hizo y el “Yo no fui” quedó como excusa y vamos a este 8-D sin haber conversado y analizado científicamente una derrota importante.
[i] Omito su nombre porque yo intervine con otros dos camaradas en su contacto y traída a Barcelona, nos pidió que la reunión fuera reservada y con personas de mucha confianza. Entendí que no quería que se conociera su presencia en Anzoátegui. Al saber que el documento no fue público, no lo dejó