15 de Octubre - Una nueva investigación realizada por científicos de Alemania y el Reino Unido muestra que el entrenamiento mental diario durante 3 a 6 meses puede amortiguar la carga de estrés sistémico a largo plazo de los adultos sanos; esto se reflejó en una reducción de la acumulación de cortisol (hormona del estrés) y cortisona (metabolito del cortisol) en el cabello, mientras que los niveles de estrés crónico autoinformado disminuyeron de manera menos consistente.

"La creciente prevalencia de los trastornos físicos y mentales relacionados con el estrés ha llevado al reconocimiento del estrés crónico como uno de los principales riesgos para la salud del siglo XXI", dijeron y sus colegas la autora principal, la profesora Tania Singer, del Laboratorio de Neurociencia Social de la Sociedad Max Planck.

"Los resultados de salud de la exposición al estrés psicosocial están mediados por la activación prolongada de nuestros principales sistemas de estrés neuroendocrino, los ejes simpático-adrenal-medular e hipotalámico-pituitario-adrenal".

"Ambos sistemas ejercen efectos complejos sobre los procesos inmunes y metabólicos y están involucrados causalmente en el desarrollo de trastornos cardiovasculares, metabólicos y autoinmunitarios, entre otros".

"Al esforzarse por reducir el estrés y promover la salud y el bienestar, las intervenciones de entrenamiento mental basadas en la meditación secular, como el programa de reducción del estrés basado en la atención plena, han ganado popularidad".

"Nuestro objetivo era investigar si el entrenamiento mental contemplativo afecta los patrones de secreción de cortisol a largo plazo como un mediador potencial de los beneficios para la salud posteriores en 227 adultos sanos", agregaron.

Los autores examinaron si el entrenamiento de hasta nueve meses de diferentes tipos de práctica mental contemplativa afecta los índices fisiológicos del estrés crónico.

En lugar de la secreción de cortisol aguda o diurna, evaluaron los niveles de cortisol y cortisona en el cabello como índices de carga de estrés fisiológico a largo plazo.

"El programa de entrenamiento consistió en tres sesiones de 3 meses, cada una diseñada para entrenar un área de habilidad específica usando ejercicios mentales del Oeste y del Lejano Oriente", dijeron los investigadores.

"La atención se centró en los factores de atención y conciencia plena, en habilidades socioafectivas como la compasión y la gratitud, o en las llamadas habilidades sociocognitivas, en particular la capacidad de tomar perspectiva de los pensamientos propios y ajenos".

"Tres grupos de aproximadamente 80 participantes cada uno completaron los módulos de capacitación en un orden diferente. El entrenamiento duró hasta nueve meses, 30 minutos al día, seis días a la semana ".

"Después de seis meses de entrenamiento, la cantidad de cortisol en el cabello de los sujetos había disminuido significativamente, en promedio un 25%", dijeron.

"En los primeros tres meses, se observaron al principio efectos leves, que aumentaron durante los siguientes tres meses. En el último tercio, la concentración se mantuvo en un nivel bajo ".

Los científicos concluyeron que vale la pena practicar más y llevar a cabo la práctica mental más allá del típico período de entrenamiento de 8 semanas de los programas de reducción del estrés basados ​​en la atención plena que se ofrecen actualmente en las sociedades occidentales.

"Suponemos que diferentes aspectos del entrenamiento son particularmente útiles para diferentes formas de estrés", dijo la coautora, la Dra. Veronika Engert, investigadora del Instituto Max Planck de Ciencias Cognitivas y Cerebrales Humanas.

"Hay muchas enfermedades en todo el mundo, incluida la depresión, que están directa o indirectamente relacionadas con el estrés a largo plazo", añadió la primera autora Lara Puhlmann, estudiante de doctorado en el Instituto Max Planck de Ciencias Cognitivas y Cerebrales Humanas.

"Necesitamos trabajar para contrarrestar los efectos del estrés crónico de manera preventiva. Nuestro estudio utiliza medidas fisiológicas para demostrar que las intervenciones de entrenamiento basadas en la meditación pueden aliviar los niveles de estrés general incluso en personas sanas ".