Vivimos momentos difíciles, donde el poder mediático domina la humanidad, son muchos los enajenados, muchos los ciegos ante las patrañas que el imperio comete día a día. El daño es tal que algunos "inteligentes" en especial abogados, cuya mayor habilidad es estafar a pobres, tienen el tupé de esgrimir dentro de sus análisis que el mandatario libio Muammar Gaddafi fue derrocado por dictador y que el pueblo, lo derrotó.
Entendemos que Estados Unidos ha hecho uso de su «americanismo» y el destino manifiesto para asegurar la presencia de sus propios intereses en América Latina. Al comenzar el siglo XX, Theodore Roosevelt (presidente de EEUU 1901-1909) justificaba cualquier intervencionismo estadounidense en América Latina, su fin era solo garantizar sus intereses geopolíticos y económicos en pleno período de expansión imperialista de Estados Unidos.
Durante el siglo XX, dos instituciones permitieron concretar el proceso de dominio norteamericano: la Unión Panamericana, nacida en la IV Conferencia Interamericana de 1910 realizada en Buenos Aires, y la Organización de Estados Americanos, que nació en abril de 1948 y sustituyó a la UP.
La OEA en el campo de las relaciones intergubernamentales y el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR, 1947) en la esfera militar dominaron la geopolítica americanista del anticomunismo. Desde la Revolución Cubana (1959), ambos se transformaron en los instrumentos internacionales de la guerra fría en América Latina. La expulsión de Cuba de la OEA, el 31 de enero de 1962, durante la VIII Cumbre realizada en Punta del Este, Uruguay, fue la primera expresión nítida del «americanismo» anticomunista. Bajo un contraste paradójico, la OEA había permanecido impávida, ante regímenes abiertamente represivos y antidemocráticos como los de Fulgencio Batista en Cuba, Rafael Leónidas Trujillo en República Dominicana, Anastasio Somoza en Nicaragua, Francois Duvalier en Haití o Alfredo Stroessner en Paraguay; tampoco luchó contra de las dictaduras latinoamericanas instauradas en la década de 1960 en varios países, en especial: en Ecuador, en 1963, con directa intervención de la CIA, y mucho menos contra las dictaduras militares del Cono Sur, sucedidas a partir del derrocamiento del presidente Salvador Allende en Chile, en 1973. Durante la Guerra de Malvinas (1982), Estados Unidos sostuvo un decidido apoyo a Gran Bretaña, a pesar de las disposiciones para la unidad continental suscritas en el TIAR y en la Carta de la OEA.
Asumimos que la Organización tiene como fundamento especial: "un orden de paz y de justicia, fomentar su solidaridad, robustecer su colaboración y defender su soberanía, su integridad territorial y su independencia". La OEA se basa en sus principales pilares que son la democracia, los derechos humanos, la seguridad y el desarrollo. Siempre y cuando sean al servicio de Estados Unidos, esto debido a que todo país que se contraponga a la postura gringa es atacado, por ello Cuba fue expulsada y, ahora le toca a Venezuela a la cual se le pretende aplicar la Carta Democrática Interamericana, por asumir su propio destino.
La situación es tan irreal que en estos momentos se celebró la reunión ordinaria semanal del Consejo Permanente de la OEA, donde se discutieron algunas sandeces, con el agravante que en el apartado de "otros asuntos", la delegación de Canadá leyó una declaración conjunta sobre Venezuela, divulgada previamente por Estados Unidos, la misma fue firmada por Argentina, Belice, Brasil, Canadá, Costa Rica, Colombia, Chile, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay. Como se puede apreciar esto es irregular y anti diplomático, Venezuela está involucrada y no es llamada a participar, no le han notificado nada a nuestro Representante ante la OEA Bernardo Álvarez. La solicitud es que no haya demora en el proceso de referendo revocatorio que promueve la oposición en Venezuela, contra el presidente de la República.
La pérdida de credibilidad de la OEA y el «americanismo» de exclusiva vigencia unilateral comenzó a hacerse evidente. El proceso de desarrollo de nuevos gobiernos progresistas en la región, a partir de fines de la década del 90 y que cobró impulso en los primeros años del 2000, pusieron en cuestión las prácticas de esta organización continental y comenzaron a desandar un nuevo marco de integración.
Las cosas podríamos decir han comenzado a cambiar, por ello el triunfo de Mauricio Macri en Argentina, la postura post golpe en Paraguay y el vil crimen cometido por Temer en Brasil, permite al secretario general de la OEA, Luis Almagro, una coyuntura más favorable para retomar el americanismo tradicional y hacer asumir una postura genuflexica de la OEA, de ahí que ha encabezado la aplicación de la Carta Democrática contra el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela. La posición de Almagro no se centra tan solo en la situación interna del país –que resulta netamente conflictiva–, sino que apoya, sin temor a expresarlo abiertamente, los planteamientos de la oposición venezolana y solicita la renuncia de Maduro.
Mientras esto acontece y los medios dicen sus medias verdades, el estafador Almagro cierra sus ojos ante el atropello de Macri hacia el pueblo de Argentina, contra la luchadora incansable, la madre eterna Hebe Bonafini, a quien mandó a detener, pero encontró resistencia en el pueblo y esta orden no pudo llevarse a cabo. El mercenario Almagro, no dice nada ante el crimen que se comete en Brasil con la Presidenta Dilma Rousseff, donde una banda de estafadores diputados y senadores, con juicios en los tribunales, le sigue juicio por un delito no tipificado. Su ceguera es tal que no toma en consideración lo que plantea el candidato demócrata Bernie Sanders quien acaba de señalar que el juicio contra Dilma Rousseff es un juicio político.
Pero lo más asombroso de este intruso, de este tarifado, es que no entienda lo que acontece en Estados Unidos y no mueva una pieza para demostrar la irracionalidad y el atropello que se comete en ese país, con el daño que los dos candidatos son mortales para la humanidad. De todas formas para noviembre el mundo sabrá quién será el próximo presidente de EE.UU. Y con cada semana que pasa la candidata demócrata Hillary Clinton está viendo cada vez más mancillada su reputación. Su nivel es lamentable y cuestionada, ya que mucha gente en EEUU la considera como una "mentirosa convulsiva". WikiLeaks sigue revelando manchas en su biografía que la conectan con financiación secreta de los yihadistas del Estado Islámico (EI) y el tráfico de armas en Siria.
Estos meses serán de espanto. Los ataques de Hillary a Trump serán lapidarios, al mismo tiempo éste atacará y sacará a la luz muchos datos esclarecedores de la gran mentira con que Estados Unidos ha atacado el Medio Oriente. El periodista Pedro González Munné ha declarado a RT, que las filtraciones de correos electrónicos de Hillary Clinton tendrán consecuencias en las elecciones ya que favorecerán al candidato republicano Donald Trump.
Ante esta realidad, los republicanos buscan destruir a la candidata, quien jugó papeles determinantes tanto en la agresión y ataque a Libia, como el descomunal crimen que sufre Siria. El exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, con esta información ha señalado que Hillary Clinton: "podría ser considerada como un miembro fundador del EI". Esta semana se conocía que la candidata del Partido Demócrata formó parte de la dirección del gigante de la construcción francés Lafarge, al que se acusa de financiar en secreto al Estado Islámico. El portal de noticias The Canary informa basándose en varias investigaciones que Lafarge llegó a un acuerdo lucrativo con la organización yihadista para maximizar las ganancias de sus operaciones locales de producción de cemento e incluso compró petróleo a los yihadistas. Además, a finales de 1980 la exsecretaria de Estado mantuvo relación con Lafarge cuando la empresa apoyó a la CIA en su programa de armas secretas dirigidas a Saddam Hussein. El pasado 25 de julio, el fundador de WikiLeaks, Julián Assange, aseguró que existen "flujos de armas que van a Siria, guiados por Hillary Clinton hacia los yihadistas, incluidos los del Estado Islámico".
Así, por ejemplo, la nefasta intervención, absolutamente desastrosa en Libia, que conllevó al asesinato de Gaddafi y a la destrucción del gobierno, lo que condujo a la ocupación por el Estado Islámico de grandes segmentos de ese país; los flujos de armas que van a Siria, guiados por Hillary Clinton hacia yihadistas dentro de Siria, incluido el Estado Islámico, todo esto aparece en esos correos electrónicos. "Hay más de 1.700 correos electrónicos de la colección de Hillary Clinton que hemos lanzado, solo sobre Libia", ha dicho Assange.
Esos "rebeldes" representaban en gran parte a las facciones extremistas de Al Qaeda y la Hermandad Musulmana, escribe el portal citando varios documentos filtrados. En ellos se precisa que "armas de los antiguos almacenes libios fueron enviadas desde el puerto de Bengasi a los de Baniyas y Burj Islam, en Siria".
Sin embargo, a pesar de todos estos agravantes, Clinton ha recibido grandes donaciones de parte de los capitanes de todos los sectores claves de la economía estadunidense: defensa, bancario, agroindustria, energía, tecnología, etcétera. Contando con el apoyo irrestricto del gobierno en turno. Es por ello Barack Obama y Joseph Biden, participan activamente en su campaña, gastando enormes cantidades de recursos públicos en actividades proselitistas.
Finalmente, tomando en consideración que el 92% de los medios están en manos de sionistas, que existe toda una política para destruir a Venezuela, que cerca del 50% de los gringos votaran por los delegados que elegirán a uno de estos dos candidatos; contando siempre con la ayuda del vendido de Almagro y sabiendo que varios países miembros de la OEA se arrodillaran al imperio gringo; sabemos que América Latina asume su reto y despierta. Es ya a paso de gigantes que avanzamos a la conquista de la nueva sociedad, recordando al cumpleañero Fidel Castro, cuando decía "ayer éramos un puñado de hombres, hoy somos un pueblo entero construyendo el porvenir". Con él repetimos, América Latina avanza hacia la construcción del socialismo. El socialismo es la esperanza y seguiremos nuestra lucha hasta vencer. Hasta la Victoria siempre.