Campaña de Marea Socialista y la LIS contra la criminalización de la lucha laboral en Venezuela

Solidaridad con el obrero venezolano Jean Mendoza desde Europa Occidental y del Este

Activistas obreros y de izquierda con Jean Mendoza, desde países europeos

Activistas obreros y de izquierda con Jean Mendoza, desde países europeos

Credito: Prensa Marea Socialista

Varios dirigentes y activistas de partidos de la izquierda revolucionaria europea se han expresado con carteles de apoyo en sus teléfonos móviles, en favor del respeto a los derechos del obrero maderero Jean Mendoza, vocero de los trabajadores de la transnacional MASISA en Guayana (Estado Bolívar, Venezuela).

En esta oportunidad los pronunciamientos provienen de Francia, España, Reino Unido y Bielorrusia, entre otros que serán informados en siguientes noticias.

Mendoza está siendo citado por los tribunales y por la policía a partir de una acusación fiscal solicitada por la empresa, que lo señala por “simulación de hecho punible” y por “instigación al odio”, por el hecho de reclamar la violación de derechos laborales y sindicales a la transnacional de la madera, que aprovecha los bajísimos salarios y nuevas facilidades al capital extranjero otorgadas por el gobierno de Nicolás Maduro, a contramano de los preceptos enarbolados por la revolución bolivariana.

La empresa, de capital chileno principalmente, utiliza una retrógrada ley aprobada por la ya desactivada Asamblea Nacional Constituyente que operó en Venezuela en los recientes años, modificando disposiciones constitucionales que habían sido aprobadas por el pueblo mediante referéndum en los nostálgicos tiempos de Hugo Chávez.

La citada ley conocida como Ley Contra el Odio ha venido siendo usada más para aplicarla a las protestas y críticas obreras y populares que a la llamada oposición de derecha en Venezuela o a las altas figuras del pseudo gobierno paralelo de Juan Guaidó, auspiciado por los EE.UU.  

Mediante la aplicación de esta ley han estado o están presos hoy en día dirigentes obreros han apoyado la revolución bolivariana y han sido parte de sus luchas, pero que ahora son evidentemente considerados como enemigos o como un estorbo por el gobierno que se ha configurado en torno a Nicolás Maduro, así como por los más destacados dirigentes del PSUV y por los principales poderes del Estado, civiles y militares.

Frente a esto, muchos de los compañeros de trabajo directos de Jean Mendoza en MASISA se han solidarizado con él, e igualmente trabajadores y dirigentes sindicales de otras empresas, principalmente de las Empresas Básicas de Guayana.

Una campaña internacional en favor de los trabajadores y líderes obreros presos, perseguidos o criminalizados por luchar en defensa de sus derechos en Venezuela fue aprobada en diciembre en una conferencia mundial realizada por organizaciones adherentes de la Liga Internacional Socialista, que se ha extendido ya por algunas decenas de países en los diversos continentes (la conferencia se realizó presencialmente en Argentina, pero también vía On Line).

Así, partidos, dirigentes y militantes de países de América Latina, Estados Unidos, Oceanía (Australia), Ásia (principalmente del Medio Oriente y Pakistán) y ahora de Europa (tanto Occidental como del Este), han venido firmando un remitido de apoyo cuya publicación se hará próximamente y han hecho demostraciones tanto colectivas como individuales de solidaridad. También se han emitido algunos pronunciamientos de partidos que actúan en países del continente africano.

Todas estas organizaciones denuncian que en un país que fue conocido en otros tiempos aún recientes, por logros y conquistas obtenidas por los trabajadores en la revolución bolivariana, ahora estén sufriendo un durísimo ataque que las echa por tierra y que además reprime y criminaliza los reclamos de la clase trabajadora: que se acuse a los voceros y voceras de la lucha obrera por “instigación al odio” cuando denuncian atropellos patronales o gubernamentales y que se califique de “simulación de hecho punible” las quejas de los trabajadores por violaciones a las convenciones colectivas de trabajo, a las leyes laborales o a las condiciones de salud y seguridad en el trabajo. Al respecto de todo ello se pretende llamar la atención de instancias internacionales, abrir los ojos de la izquierda mundial sobre lo que sucede en Venezuela y desarrollar a fondo la solidaridad de clase, trascendiendo las fronteras.

Se muestran a continuación algunos de los mensajes solidarios exhibidos en las Redes Sociales y recibidos por Marea Socialista @MareaSoc89 (organización venezolana promotora de la campaña de solidaridad):

 

 

 

 

 

 

 

 



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