Las revistas y medios que tienen a la mujer por objeto y a su desnudo, como un subproducto comercial que asegura ventas, supongo que han desarrollo técnicas y poses para que esta mujer- objeto sirva o sea más útil a la razón que la define como cosa. Cada vez la mujer o un tipo de mujer cumple mejor esa condición de objeto para estimular ventas. En este caso, ese tipo de mujer sabe hacer “artísticamente” su “trabajo”. Es decir, sabe cómo y de qué manera debe desnudarse.
José Manuel Insulza no es mujer, no es un modelito de hombre que también sirve para vender cosas, pero frecuentemente tiene una manera particular de desnudarse y no se ve bien; no por la grasa que acumula en su cuerpo, sino por la manera en que se desnuda. A veces, suele vérsele comedido, prudente y equilibrado, pero aun viéndose en esas condiciones, queda totalmente desnudo frente a la región.
En el caso de Honduras por ejemplo, optó por desnudarse de diferentes maneras y en cada uno de esos desnudos quedó horrible. Se le veía aparentemente al lado del pueblo Hondureño y muy diligente para gestionar la aplicación de la carta democrática, pero en cada de unas de esas actuaciones que realizaba para hacernos ver que gestionaba el regreso de Manuel Zelaya a sus funciones como Presidente, quedaba sin vestimenta y mascara. La OEA con este mal títere de por medio, optó por desincorporar a Honduras de la organización y el golpe quedó totalmente legimitado. No hizo falta ni los malos desnudos de Insulza, ni la deseimcorporación de Honduras de la OEA
Después de este acontecimiento se asomaron otros conflictos en la región e Insulza y la OEA aparecían más activos en aquellos que tenían unas condiciones políticas más favorable para fomentar la desestabilización en ciertos países. Recientemente estando de muy bajo perfil, porque la OEA es lo que es y esto no puede evitarse, decidió desnudarse para servirle a la política de desestabilización que los Estados Unidos tiene hacia Venezuela. En su último desnudo, cada movimiento respondía exactamente a lo que ya Estado Unidos había dicho.
José Manuel Insulza y la OEA hacen lo que deben hacer, porque la OEA en estado de coma, tiene todavía la capacidad de moverse para cumplir con el perfil que tiene. Aunque muy pronto haya una reunión para tratar la ingerencia de Insulza en una asunto interno del país y los miembros decidan desautorizar a Insulza; su horrible desnudo produjo el efecto que quería y aquí, como dicen el refrán, después de ojo sacado, no hay Santamaría que valga. Insulza como siempre quedó horriblemente desnudo, pero cumplió su papelito. Eso es suficiente para que los Estados Unidos sigan manteniendo a la OEA en sus funciones.
