Chávez se detuvo frente a una vivienda, cuya familia estaba deseando que se detuviera frente a ella. Una vez que Chávez se ubico frente a la vivienda, inmediatamente la familia le expuso la situación de vivir por más de 30 años en una casa alquilada. Al oír este planteamiento, el Presidente soltó su opinión que siempre responde a una lógica que no considera ni evalúa a los destinatarios. Es un poco lo Steve Ellner denomina “los efectos sobre los perdedores no pertenecientes a la élite”. Chávez en el marco de esta lógica se pronunció y tomó partido por el inquilino.
Está bien que lo haya hecho, pero no todo propietario de una vivienda es un capitalista, oligarca o enemigo del proyecto de cambio. Puede suceder con más frecuencia de lo que se supone, que muchas personas tengan dos viviendas y una de esas viviendas la tengan como una forma de sostenerse. Invirtieron en la compra de esta segunda vivienda sus recursos para vivir de la renta. No fue este el caso de esta familia, pero la posición abona una matriz de opinión y ayuda desde este lado a contribuir con el miedo que los medios oposicionistas promueven. Toda persona humilde, trabajadora que haya invertidos por ejemplo sus prestaciones o sus ahorros de toda la vida para comprar una vivienda y tener algo para sostenerse y oye este mensaje, es rápidamente objeto del miedo. Esta manera tan ligera de opinar no va con la política de repolarización, porque tiene una mala percepción sobre quienes deben ser los perdedores con este proyecto. Toda decisión o solución de un problema en el ámbito político, es una apuesta que se formula evaluando el problema que resuelve y sus beneficios y el problema que genera. Trasmitir la impresión que todo propietario es una persona que debemos tener como perdedores en este proceso, alimenta la matriz que la oposición tiene.
En ese momento frente a la vivienda, Chávez se dio cuenta que los cables de luz parecían una tela de araña y seguidamente ofreció una opinión correcta sobre lo improcedente de ese mecanismo. Inmediatamente le pidió a Rafael Ramírez que es Vice-Presidente, Ministro, padrino y otras tantas cosas más, que resolviera esa situación. No es en la calle Real de los Magallanes donde se presente esa tela de araña; ella está en todas las calles que tiene este país y en los barrios que son productos de invasiones el asunto es peor porque en vez de postes de hierros; la maraña de cables es sostenida por un palo que las personas de esa comunidad entierran y de allí se pegan todos.
Más avanzada la cadena y sentado en una larga mesa, se asomó el caso de los terrenos y hubo una intervención de un vecino que planteo la cantidad de terrenos que están disponible. Oído este planteamiento, seguidamente vino un reclamo de Chávez a sus ministros en relación con informes que había solicitado y no conocía. Nuevamente pidió a Rafael Ramírez que se encargara de hacer un censo de los terrenos en Catia y que en una semana le presentara un informe. No hay que ser muy inteligente para entender el retraso de las cosas y las ideas que no se concretan. ¿Ramírez come? ¿Ramírez duerme? ¿Ramírez tendrá la oportunidad de hacer el amor con su pareja? ¿El stress de ser responsables de un montón de responsabilidades no lo entre con un muerto encima? No es sólo el caso de Rafael Ramírez, es una situación que está generalizada porque los ministros tienen responsabilidad administrativa en varios asuntos y problemas y responsabilidades partidistas. Si CADAFE O CORPOELEC no ha podido resolver el problema de colocar medidores cómo es que va a resolver esta situación que se observa en todas las calles y avenidas del país así como lo planteo Chávez.
Más adelante Chávez soltó otro detalle que no sé si sabía el sentido de la frase. Dijo que el gobierno estaba invirtiendo mil seiscientos millones en asfaltado y aseguró que el 95% de los caraqueños no sabían nada de esa inversión. Si Chávez pensó en lo que dijo: ¿Cómo quedan las cadenas? ¿Para qué se hacen tantas cadenas si se tiene esa idea? ¿En verdad las cadenas informan y comunican a los sectores donde hay interés de llegar? ¿Hay una evaluación de las cadenas para conocer cómo se comportan los venezolanos y venezolanas frente a esta situación? ¿Cómo deberían ser la cadenas?