En el colmo de la molestia de la dirigencia de la Federación Rusa, su Primer Ministro, Vladimir Putin calificó a los Estados Unidos como un PARASITO que viene
tragándose la economía mundial; afirmación que confirma, no solo la
gravedad de la situación financiera mundial, sino especialmente, el
generalizado malestar de las elites de las principales economías del
planeta que ven como el gobierno de Barak Obama continua con un
comportamiento monetario y financiero irresponsable, tomando solamente
en cuenta los intereses de sus grupos financieros nacionales y despreciando los llamados a la rectificación profunda que permanentemente salen de
los gobiernos de las grandes economías rivales y emergentes, quienes ya
no resisten más la actitud prepotente, arrogante e irresponsable de un
país y un gobierno que se ha acostumbrado a vivir del dinero producido por el resto de los países, manteniendo un nivel de vida que no se corresponde con su actual capacidad de producción nacional.
La decisión del senado Congreso de los Estados Unidos de América de aprobar un aumento a la ya descomunal deuda de 14 billones de dólares y el compromiso del gobierno de Barak Obama de reducir en DIEZ AÑOS¡ solo DOS BILLONES de esa descomunal deuda, la cual ha sido presentada por las corporaciones mediáticas y sus repetidoras
subalternas del resto del mundo como la “gran solución” a la crisis
financiera mundial, es una “huida hacia delante”, por cuanto mantiene
intacta la situación económica y financiera de los
Estados Unidos de América y su imposibilidad de cumplir con sus
obligaciones con sus acreedores internacionales, especialmente con la
República Popular China, la Federación Rusa y los reinados, sultanatos y
emiratos petroleros del golfo árabe-pérsico; manteniendo esa especie de chantaje global, según la cual, “o me sostienen o nos hundimos todos”.
La sorprendente declaración pública del Primer Ministro Putin, posiblemente también motivado
por su condición de posible candidato presidencial en las próximas
elecciones rusas, parecieran indicar la decisión un sector importante de
la realidad económica mundial de avanzar en la generación de un acuerdo
sobre una alternativa monetaria al dominio del dólar como medio
intercambio mundial de comercio, (impuesto unilateralmente
por el presidente usamericano Richard Nixon, al desvincular el valor
del dólar al patrón oro) que pudiera estar expresado en el
uso de un conjunto de monedas o, un sistema compensatorio parecido al
SUCRE (Sisterma Unico de Compensacion Regional Economico), aplicado por varios países miembros de ALBA-TCP, que les ha permitido reducir la dependencia del devaluado dólar usamericano e incrementar sus intercambios comerciales.
Lo
que no dijo ni podría haber dicho Vladimir Putin, representante de los
intereses económicos de la renacida burguesía rusa, es que, aún con
tales medidas monetario-financieras, el problema de la crisis del
Capital, es que es que este se encuentra en estado terminal, por lo que podrían postergar un tiempo más su derrumbe, pero no podrán reconstruir un sistema de producción, distribución y consumo como el Capitalismo que es hoy antihistórico y que la única salida posible es iniciar la larga transición histórica hacia una cambio del sistema económico
mundial y de las economías nacionales, basadas en el
respeto a la naturaleza, la satisfacción de las necesidades de los
pueblos y la Humanidad y el intercambio justo de bienes y servicios, a
través de medios de cambio que respondan a las realidades económicas de los países y no a los mecanismos especulativos de las mafias financieras.