Ni por asomo se me ocurriría proponerte que asumas un rol parecido al de SÍSIFO, su guaratara y la cima, que después de ser vencida se sacudía y lo obligaba a empezar de nuevo en su intento de coronarla, pero a lo que si me atrevo es a recordarte que un personaje muy querido por todos – o por lo menos por la gran mayoría de quienes lo reivin dicamos como nuestro autentico guía- sentenciaba que: La constancia y el trabajo son indispensables en la consecución de las metas superiores.
Las buenas ideas, las buenas iniciativas y todo aquello que pretende modificar lo establecido, para mejorarlo, tendrá forzosamente que enfrentar a quienes se sentirían disminuidos si tales propósitos pudieran concretarse, por que entre los insensatos, ceder espacios sin retorcerse es imposible. Por todo lo anterior y en armonía con el coro de opiniones que reclama en todos los tonos imaginables – con justificada razón, digo yo –,la desaparición de La Hojilla, es inaceptable. Uno mi ruego para que, tu que eres el padre de la criatura, no permitas que desaparezca y nos suma en esta sensación de indefensión en la que quedaríamos si no tuviéramos um mecanismo que desenmascare las manipulaciones, omisiones y alineación con intereses extraños a la Patria, que caracterizan las opiniones, noticias e imágenes de los medios enemigos de un proceso que aspira convertir a Venezuela en un país más vivible para las grandes mayorías que en el habitamos. Por favor, toma la presente situación como una experiencia aleccionadora. De los errores debemos aprender, llenar nuestras alforjas con lo bueno, desechar lo negativo y seguir el camino sobre todo cuando estamos convencidos que los objetivos y metas que tratamos de alcanzar no solo serían gratificantes para nosotros mismos sino para quienes nos acompañan en la empresa.
Estoy seguro que contamos con muchos compatriotas, que desinteresadamente, estarían dispuestos acompañarte en lo que me atrevo a calificar desde ahora como La Segunda Etapa corregida y aumentada de La Hojilla . Anímate que TU SI PUEDES.