Hay muchas razones para participar en las elecciones de este agosto. Sí se está en contra del gobierno, el no participar significa que los partidarios del gobierno tomaran de forma plena los cargos que se estarán disputando, ya que los partidarios del oficialismo si participarán; lo cual traería como consecuencia que todas las decisiones serán tomadas como en casa con pocas discusiones. Por otra parte las diversas organizaciones políticas que aún tienen algo de poder a través de las estructuras del gobierno, la perderían y algunos partidos políticos correrán el riesgo de desaparecer del panorama político.
Si se esta de acuerdo con el gobierno, es muy importante la participación debido a que el partido del presidente ha sido sólo una maquinaria electoral que ha participado con éxito en nueve elecciones pero que a pesar de obtener resultados mayoritarios, hasta ahora no ha llevado a las posiciones electas a sus militantes, ha llevado a posiciones de elección popular a muchos miembros de otras organizaciones de su alianza, pero su propia militancia se ha quedado por fuera. Ahora le corresponde a su militancia la oportunidad de alcanzar los puestos que serán asignados después de la elección, eso hace necesario que los candidatos salgan a convencer a los simpatizantes y no simpatizantes para que el día de las elecciones participen... esto hará prudente que los candidatos se comprometan con el pueblo a adelantar de los cargos a ocupar con algunos asuntos que deban cumplirles.
Por otro lado está en juego la legitimación del proceso de cambios que el presidente adelante, al poner en evidencia el poder de convocatoria de quienes lo acompañan, o el poder de convocatoria de quien lo adversa. Ese poder de convocatoria medirá si es conveniente o no que los candidatos a ser elegidos sean o no, seleccionados por las bases o impuestos desde las direcciones de las organizaciones políticas. Si, es resultado de la convocatoria nos dará una especia de predicción de lo que posiblemente ocurra en las elecciones de diciembre para la asamblea nacional. porque será una especia de reflejo del nivel de madurez política alcanzado por el pueblo que por mucho tiempo ha pedido que los candidatos salgan de una elección interna de las organizaciones políticas y no desde los cogollos, pero si nos hemos equivocado al seleccionar a candidatos que no representan a nadie y que no tienen trascendencia en el pueblo, puede dar pie a que se interprete como que es un procedimiento inapropiado, toda vez que para el proyecto de cambios es necesario llevar a las juntas parroquiales y concejos municipales a gente que tenga una doble identificación, la primera identificación es con el pueblo, entender y comprender sus inquietudes, necesidades, problemas y ayudarlo a buscar ante los órganos respectivos las solución a su problemática, y la segunda identificación que requiere, se refiere a la identificación no sólo con el presidente, como ocurre con muchos que consideran que ser revolucionario consiste en adorar al presidente y salir ante sus llamados, eso es muy importante, pero se requiere que se comprenda que es lo que se quiere lograr con este proceso de cambios para poder comprender como lograrlo, es necesario que cada uno de nosotros aporte con su participación, de manera apropiada los procesos que permitan adelantar los cambios que se requieren, y eso hace necesario que se tenga conocimiento pleno de que hacer y como hacerlo. Así como reza el dicho, NO SÓLO DE PAN VIVE EL HOMBRE, hay que pensar que NO SOLO DE MARCHA REHACE LA REVOLUCIÓN...
En esta ocasión los candidatos deben convencer al pueblo, además de apoyarlos, que es necesaria la participación del pueblo en el proceso electoral. Estará en juego la medición de su poder de convocatoria y la conveniencia de la selección de candidatos mediante elecciones internas.