Me sorprendió al verlo por Venezolana de Televisión hablando sobre los crímenes de EE UU contra las sagradas y antiguas reliquias de Bagdad. Lo entrevistaba Ernesto Villegas, y luego vi que reponían el programa como una gran cosa. Inmediatamente varios amigos que conocen el personaje me llamaron: “¿Vaya lagarto, qué te parece?”. En Mérida se sabe que Fernando Báez toda la vida fue de derecha, de esa derichita que tiene cobijo en la ULA, en la Iglesia de don Baltazar Porras, en los gobiernitos adecos y copeyanos que vivían envileciendo funcionarios y promocionando grandes bandadas de sobadores de nísperos de grandes caimacanes. Fernando anduvo esperando que Chávez cayera para volver por sus andanzas de hombre de “letras” viviendo del negocio de la cultura del yoismo, “yo el poeta, yo el filósofo”; estoy absolutamente convencido que este personajillo ha sido usado por la CIA, en esa confección de las llamadas elites, para infiltrarse en el gobierno, en la cultura, y ya se los voy a demostrar. No olviden que ese es uno de los métodos predilectos de la CIA, reclutar intelectuales e intelectualoides para hacer un delicado trabajo de infiltración en universidades, centros culturales y políticos. No hay que olvidar que Frances Stonor Saunders nos dice que para hacer sus trabajos más sucios, los centros predilectos de los agentes de la CIA son los intelectuales (que siempre se hacen pasar por izquierdistas) y los matones (véase “La CIA y la guerra fría cultural”, Frances Stonor Sauder; Editorial Debate, Madrid, 2001).
Cuando este personaje de Fernando Báez se encargó de la dirección del diario El Correo de Los Andes, en Mérida, los artículos de Sant Roz dejaron de aparecer. Había recibido órdenes, el muchacho, y él estaba encantado de cumplirlas. Fernando pensaba hacer una carrera de poeta como aquí se estilaba durante la IV República, apoyándose, digo, en el bastón de los entes oficiales. Lo milagroso es que con los restos de ese pasado que sigue dominando en nuestra cultura han conseguido imponerse más que
muchos verdaderos revolucionarios. Las eternas paradojas. Para dar una muestra de su talento y de su súbito “bolivarianismo”, presentaré parte de unas declaraciones que dio a la periodista Elizabeth Fuentes de “Tal Cual”, y que aparecieron el 17 de agosto de 2004. La entrevista se había hecho antes del 15 de agosto, cuando los fascistas de la oposición estaban convencidos de que le revocarían el mandato a Chávez. Dijo el señor Fernando Báez a Elizabeth, y mucho ojo a sus expresiones, que EN VENEZUELA SE PREMIABA EL FRACASO, y añadió: “NUESTRA HISTORIA ES UNA HISTORIA DE PROYECTOS FRACASADOS. COMENZAMOS POR ESCOGER COMO PARADIGMA DE PADRE DE ESTA PATRIA A UN MILITAR, QUE FUE EL PRIMER ERROR DE ESTE PAÍS Y VER (SIC) EN ESE MILITAR TODAS LAS VIRTUDES HUMANAS, PORQUE A BOLÍVAR LO IMAGINAMOS ADEMÁS COMO EDUCADOR, HUMANISTA, SABIO, ECOLOGISTA, ASTRÓNOMO, PERIODISTA, ESCRITOR, CIENTÍFICO, NATURISTA, EN FIN. YO VIVO ASUSTADO CON ESE PARADIGMA QUE ESCOGIÓ VENEZUELA, Y QUE AHORA LE DA A LOS MILITARES LA POSIBILIDAD DE SEGUIR SIENDO LOS SALVADORES DE LA PATRIA. ALLÍ CREO QUE SUBYACE EL PROBLEMA DEL PAÍS. Y LO PEOR ES QUE ESE MILITAR FRACASÓ EN SU EMPRESA. PIENSO QUE DE ALGÚN MODO ESE SUEÑO FRACASADO DE BOLÍVAR QUE CADA GENERACIÓN SIENTE QUE TIENE QUE VOLVER A CUMPLIR, SE HA CONVERTIDO EN UN
MITO. ESO ES LO MÁS PELIGROSO DEL LLAMADO SUEÑO BOLIVARIANO, QUE ES UN MODELO DE SALVACIÓN NACIONAL QUE NOS LLEVA AL FRACASO. ANTES DE MORIR, BOLÍVAR DIJO: “HE ARADO EN EL MAR”, O SEA VIENE LA CATÁSTROFE MÁS HORRIBLE. EN FIN, ADORAMOS A UN PADRE TIPO SATURNO, QUE SE COMÍA A SUS PROPIOS HIJOS. BOLÍVAR SE HA IDO COMIENDO UNA GENERACIÓN TRAS OTRA”. Caramba, sinceramente que me maten si este tipo no es un redomado cerdo y fascista. Asumo cualquier responsabilidad sobre lo que aquí digo: Mi nombre de pila es José Rodríguez, CI 2219738, y tengo el seudónimo de José Sant Roz, registrado desde 1985, en el registro principal de Mérida.