En su acostumbrado programa de los domingos, nuestro Presidente realizó un anuncio que nos llenó de satisfacción y beneplácito, como lo fue la creación del Ministerio de Desarrollo Social y de Participación Popular, designando a su cargo al general Jorge Luis García Carneiro; ministerio éste que sin duda contribuirá al mejor desarrollo, avance y consolidación de la Revolución Socialista Bolivariana.
Enefecto, desde hace tiempo atrás hemos insistido en que era necesario, en función de nuestro actual modelo de Estado; enmarcado bajo una nueva concepción de democracia como lo es la democracia protagónica y participativa, la creación de una estructura que articulara el proceso de formación del Poder Popular y el ejercicio del mismo con las autoridades del Estado, con la finalidad última de cristalizar el modelo democrático que nos plantea el texto constitucional y de canalizar el ejercicio del verdadero poder soberano como lo es el Poder del Pueblo.
Yes precisamente esta la función bajo la cual se orienta el nuevo ministerio que ha sido creado, tal y como fue explicado por el Presidente, como un órgano que funja como coordinador en el desarrollo y formación de las diversas políticas de desarrollo social implementadas y a implementar por el Gobierno Revolucionario y el pueblo, articulando sus funciones en un sistema compuesto por las figuras de los núcleos endógenos, el movimiento cooperativista y desde luego el pueblo, como protagonista en la gestión y acción de gobierno.
Con ello se busca establecer una estructura de coordinación entre el Gobierno nacional y el pueblo en todos los niveles, para desarrollar una participación más abierta y activa del mismo en lo que al actuar gubernamental se refiere, logrando así una mayor eficacia y eficiencia en la instrumentación de los proyectos sociales, mediante la implementación de proyectos emanados directamente del pueblo y el aumento de los porcentajes directos para la ejecución por el pueblo de esos proyectos.
De hecho, bajo esa misma línea se encuentra orientada la decisión que también anunció el Presidente el domingo pasado, consistente en la segunda etapa de los gabinetes móviles, esta vez entrando en contacto con los niveles municipales y parroquiales para el estudio, formulación y perfeccionamiento de los proyectos elaborados por las comunidades en asambleas de ciudadanos y consejos populares, lo que desde luego comporta el redimensionamiento de la participación del pueblo, lográndose así la cristalización de una verdadera soberanía popular, propia de la Revolución Socialista Bolivariana. Por ello, la importancia del ministerio recién creado, ya que el mismo debe buscar fortalecer la ideología, la ética y la eficiencia organizacional del poder del pueblo.
Asu vez, para lograr la exacta dimensión del verdadero Poder Popular, se hace también necesario que se implanten sistemas de cogestión, con la incorporación del sector de los trabajadores en la dirección de las empresas y los porcentajes de las utilidades reales a lo largo y ancho del país; una efectiva y real repartición de tierras para los campesinos y en definitiva la concreción de los anhelos y deseos del pueblo a través de una sistematización en diversos programas y proyectos que permitan la viabilidad de los mismos, a través de una estructura orgánica que trascienda y supere las falsas y erróneas concepciones burocráticas, propias de la IV República, para que alcance con éxito los cometidos que le han sido asignados.