La gestión cultural municipal debe poseer una recia, sólida y coherente definición conceptual en, por lo menos, tres aspectos básicos y fundamentales, a saber: el paradigma cultural, las líneas estratégicas sobre políticas culturales y un plan estratégico cuadrienal cultural municipal. Nos hemos atrevido a sugerir tres propuestas alrededor de los tres tópicos señalados, los cuales podrían constituirse en la base conceptual-teórica de la gerencia cultural local.

La primera propuesta: el paradigma cultural propuesto es la Democracia Participativa Cultural. Al respecto es menester precisar: a diferencia de las posiciones unidimensionales y elitistas que sostienen los paradigmas mecenal, tradicional, estatal y privatizante, e incluso se infiltran en el modelo democratizador, esta concepción, (el paradigma relacionado con la Democracia Participativa), defiende la coexistencia de múltiples culturas en una misma sociedad, propicia su desarrollo autónomo y relaciones igualitarias de participación de cada individuo en cada cultura y de cada cultura respecto de los demás. (Canclini, 1987).

La segunda propuesta está relacionada con un conjunto de líneas estratégicas sobre políticas culturales, tanto del poder ejecutivo como de la rama deliberante, aplicables a las entidades locales, Municipios. Las Líneas son las siguientes:

1. La actualización y creación de una legislación cultural municipal;
2. La capacitación, perfeccionamiento y formación de recursos humanos culturales municipales;
3. La protección y defensa del patrimonio cultural;
4. La investigación cultural local;
5. La comunicación social con el campo industrial masivo e impulso a las experiencias de comunicación comunitaria;
6. La promoción y difusión de la diversidad cultural municipal y fomento y estímulo a la producción y creación cultural.
7. El estímulo a la producción y creación artístico-cultural.
8. El rescate de espacios e infraestructuras culturales.
9. Las asesorías culturales, en su más amplio sentido.
10. Otras que se definan por la particularidad de la entidad local.

En torno a las políticas culturales queremos señalar: La política cultural, de manera semejante a la política educativa y a la política científica, constituye en la actualidad una disciplina de estudio con un campo de investigación, con principios generales y con instrumentos de análisis y de acción específicos, unidos a una metodología de trabajo propia que se ha ido afirmando y enriqueciendo en diversas partes del mundo. En las últimas dos décadas se ha visto crecer una producción bibliográfica excepcional alrededor de los contenidos básicos de nuestra disciplina: el desarrollo cultural, los derechos culturales, el patrimonio cultural, la creación artística, las industrias culturales, las relaciones culturales internacionales, entre muchos otros (Harvey, 1990)

La tercera propuesta está orientada a la necesidad de que las entidades locales, las Parroquias y Municipios, emprendan de manera resulta el diseño de un Plan Estratégico Cultural. En ese sentido, presentamos un esquema de desarrollo que bien pudiera orientar su elaboración:

1. Aproximaciones a un Diagnóstico Cultural.
1.1 La Gestión Cultural del Estado Venezolano.
1.2 La Situación Presupuestaria Cultural del Municipio.
1.3 Diagnóstico de la Situación Cultural del Municipio o la Parroquia.

2. Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas de la Parroquia o el Municipio, así como de la rama ejecutiva y deliberante cultural municipal.
2.1 Fortalezas
2.2 Oportunidades
2.3 Debilidades
2.4 Amenazas

3. Visión

4. Misión

5. Líneas Estratégicas sobre Políticas Culturales.

6. Programas.

7. Proyectos.

En torno a cualquier Plan Estratégico es necesario tener presente que la Aldea Cultural, el Municipio y las Parroquias, para insertarse en el proceso de globalización es vital poseer un recio sentido de pertenencia, fortalecer la autoestima cultural del munícipe, diseñar un proyecto común cultural y alcanzar óptimos niveles de competitividad, entre muchos otros aspectos. Se impone realizar una evaluación de los resultados de las gestiones públicas municipales en relación con una de sus competencias propias: la cultura. Chavistas y escuálidos tienen que rendir cuentas