Salvo contadas excepciones, la oposición venezolana ha hecho un escandaloso silencio ante el llamado terrorista del extremista religioso Pat Robertson a que se asesine al presidente Chávez. Mientras los antichavistas radicales celebran la amenaza, los mas moderados la desestiman por no tener mayor resonancia en la política de la administración Bush. Sin embargo, el fascista Robertson y su logia extremista cristiana sí tienen una gran influencia en Washington, incluso mucho mas peligrosa que la de sus copartidarios neoconservadores.
El propio presidente Bush se considera un "born-again-christian" que ha vuelto a nacer como cristiano. A Dios le debe su "salvación" de las drogas y el alcohol, y a Dios ha jurado pagarle desde la cima del poder político. No es casual que siendo gobernador de Texas haya ofrecido el 10 de Junio como el "Día Oficial de Jesús" a satisfacción de la extrema derecha cristiana con la que comenzaba a vincularse de manera muy estrecha. De acuerdo al pastor presbiteriano Fritz Ritsch (Washington Post, 2 de Marzo de 2003), la derecha cristiana estadounidense cree que el Estado debe someterse a lo que ellos interpretan como el designio de Dios en la tierra, y han añorado el surgimiento de un dirigente davídico - "un líder político como el David de la Biblia, capaz de unir su visión secular con sus aspiraciones espirituales" - encarnado en el presidente Bush. Para el pastor Ritsch, los grupos religiosos que apoyan a Bush son sus mas grandes "cheerleaders", discípulos del líder escogido por Dios para librar al mundo de las tiranías, así sea mediante el secuestro y el asesinato de Jefes de Estado electos democráticamente, tal y como lo aconsejó el fascista Robertson.
La influencia de la extrema derecha cristiana sobre Washington quedó demostrada cuando el pasado mes de marzo el presidente Bush y su hermano Jeb, gobernador de Florida, se volcaron a rechazar cualquier forma de eutanasia para Terri Schiavo, quien desde 1990 se encontraba en un persistente estado vegetativo. A pesar de la sentencia de la Corte de Florida que ordenó retirar la sonda que la alimentaba, el presidente Bush aprobó una legislación que le permitió a los padres de Shiavo acudir a las cortes federales, mientras el gobernador maniobraba políticamente para que el estado interviniera y asumiera su custodia, lo cual le daba tiempo al partido republicano para que forzara desde el congreso la aprobación de leyes que revocaran la decisión de las cortes.
Igualmente, los grupos cristianos extremistas han influenciado tremendamente el sistema escolar para que deseche la teoría de la evolución y en su lugar incluya la teoría del "Diseño Inteligente", la cual establece que la composición biológica de los seres vivos es tan complicada que no es posible que sea el resultado de un proceso de selección natural sino el producto del trabajo de un "arquitecto", lo cual no es mas que otra manera de justificar el principio creacionista cristiano. En la nueva ley de educación "Que ningún niño se quede atrás", aprobada por el presidente Bush en 2002, se incluyó la enmienda del senador Rick Santorum que permite la enseñanza de "teorías alternativas" en aquellas áreas donde exista "controversia", señalando específicamente a la teoría de la evolución para desalentar su aprendizaje a favor del "Diseño Inteligente." En la ciudad de Dover, en el Estado de Pensilvania, la junta escolar aprobó un nuevo pensum de biología en el que se incluye el "Diseño Inteligente"; en las escuelas de Wisconsin se comenzó a ejercer presión para que en los maestros comiencen a enseñar "alternativas" a la teoría de la evolución; y en Carolina del Sur se introdujo una moción en el parlamento estatal para reexaminar la enseñanza sobre origen de las especies. Asimismo, la junta de educación de Ohio determinó que el estado está obligado a incluir teorías "alternativas" a la evolución en el pensum de biología; y en el Estado de Kansas los conservadores lograron mayoría en la junta de educación desde donde esperan incluir el "Diseño Inteligente" en escuelas y liceos.
Los grupos cristianos extremistas están convencidos de que el presidente Bush ha sido escogido por Dios para liderar la nueva "cruzada" contra el mal encarnado en el terrorismo y los "enemigos de la libertad." Por su parte, el desprecio del presidente Bush por los principios democráticos a favor de su ideología neoimperialista ha cultivado entre sus mas fervientes seguidores cristianos la idea de que no es posible una total separación entre Estado y religión, y que por lo tanto el ejecutivo debe intervenir en cualquier aspecto de la política interna o externa cuando así lo determine la "justicia divina", la mas alta de todas las cortes. Bajo esta lógica extremista, el asesinato del presidente Chávez para salvaguardar los intereses energéticos de Estados Unidos está plenamente justificado. De allí el silencio ensordecedor de la administración Bush y sus cipayos criollos.
(*) Internacionalista
