La ultra derecha venezolana es consecuente con sus códigos y sus mensajes. En el escenario que sea no cambia por nada su concepción del sueño que nunca termina. Sus representantes aunque estén sentados en la mesa de la última cena, mantienen su posición de no reconocer una realidad, que solo para sus ojos no existe.
Para la ultra derecha Venezuela no tiene presidente legítimo y si acaso existe no tiene nombre y si no que le pregunten al señor Diego Padrón, quien en representación de la Conferencia Episcopal Venezolana y en compañía del Nuncio Apostólico, asistió al Palacio de Miraflores para reunirse con el señor Presidente y el señor Canciller. Ambos personajes sin nombre ni apellido.
Este ciudadano, que funge de dignatario de la iglesia católica venezolana, junto al Embajador del Estado Vaticano, a instancias del primer mandatario nacional, -según afirmó-, asistió una interesante reunión en el Palacio de Gobierno.
Como se estila en estos casos; Protocolo de la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela, le ofreció al visitante, luego de la reunión con el señor Presidente Constitucional de la República, Nicolás Maduro Moros y el señor Canciller Elías Jaua Milano, el escenario para que conversara con los representantes de la prensa, atención que suponemos aceptó para verter el veneno, que le intoxicaba el alma.
El señor “Monseñor “ Diego Padrón, se plantó ante el micrófono y para buen entendedor pocas palabras. No se necesita ser un experto en semiótica o consumado comunicólogo, para descifrar lo que este ciudadano dejó en el ambiente. Por toda explicación expresó, pocas palabras, más, pocas palabras menos: Estuvimos reunidos con el señor presidente ¿De que? ¿No tiene nombre, ni apellido? Y con el señor Canciller ¿También sin nombre? Asistimos a la reunión a instancias del señor Presidente (Porque de nuestra parte nada que ver, autobusero a su volante). Tratamos temas muy importantes, que afectan al pueblo: “Por ejemplo la inseguridad” ¿No habría sido más idóneo, más diplomático y respetuoso, digo yo, no. Expresar, el tema principal que tratamos con el señor Presidente Nicolás Maduro, fue lo atinente al “Plan Patria Segura”, para ver cuales son los esfuerzos que estamos haciendo para combatir la inseguridad? No, porque de hacer eso se rayaba con sus copartidarios de la MUD y del norte. Tenía que recordar que este ilegal reeegimen, está permitiendo de manera irresponsable, las matanzas callejeras” . Solo le faltaron las cifras necrofílicas del día, para completar su tarea. Otro tema importante para el pueblo -que le planteamos fue el de la escasez.. ¿No hubiese sido más honesto y neutral, decir: examinamos el problema del desabastecimiento y como se ha activado el plan de seguridad alimentaria para garantizar, en un plazo perentorio, la presencia en los anaqueles de supermercados, de los rubros que hoy faltan? No. Porque eso sería una raya imperdonable y sus amigotes de las cadenas alimentarias que ejecutan el golpe blando no le perdonarían jamás que hubiese hablado de desabastecimiento, porque les estaría enchabando el arma contra el comunismo, que están acentuando cada día para salvar a Venezuela.
Otro tema importante que afecta al pueblo venezolano y que lo planteamos al señor presidente, es el de “Los encarcelados” y los que están fuera”.¿Lectura? Muy fácil le reclamamos hasta cuando el reeegimen va a tener los centenares de presos políticos que tiene en sus mazmorras, violentándoles los derechos humanos y a los “exiliados”, que no les permiten regresar, negándoles el derecho a vivir en su patria. Otra arbitrariedad del comunismo que nos dejó Chávez.
Con esa pose, el invitado a Miraflores que se despidió apresuradamente, antes que le preguntaran algo dejó claro que: reconocemos que hay una presidencia, pero no a quien la ocupa, por ilegítimo y por eso no tiene nombre, como tampoco lo tiene el ilegítimo canciller.
Porque para la cúpula de la Iglesia Católica, que no es la iglesia del pueblo y de los sacerdotes de barrio, luchadores y cristianos, es una injusticia, que estén presos, quienes durante los sucesos del 11 y 12 de abril de 2002, masacraron a la población indefensa por defender en la calle los postulados de la revolución bolivariana. Igualmente es injusto que quienes volaron con su camioneta al Fiscal de la Dignidad Danílo Anderson estén encarcelados, junto a los homicidas materiales del 14 de abril de 2013.
Que estén con medidas privativas de libertad, quienes mediante la quiebra fraudulenta de bancos estafaron al pueblo ahorrista, valga decir que el gobierno asumió y les devolvió sus ahorros. Que igualmente estén con privativa de libertad, los autores intelectuales del atentado terrorista contra Danilo Anderson, igualmente quienes colocaron bombas en las embajadas de Colombia y España. Estos señores que nadie los ha echado del territorio patrio, están prófugos de la justicia y solo poniéndose a derecho y pagando la deuda que tienen con la sociedad, podrán vivir en Venezuela, en la región que escojan, pero tiene que ser después que se haga justicia. Valga decir, que todavía esperamos que la justicia alcance al autor intelectual de los once homicidios del 14 A 2013.
Pero estos hermanitos y hermanitas de la caridad, para la cúpula corrupta golpista de la Iglesia Católica, son presos y exiliados políticos a quienes el régimen comunista, heredado de Chávez por Nicolás Maduro, les está violentando sus derechos humanos. Esa es la razón por la cual para los dignatarios de la cúpula católica venezolana, Nicolás Maduro, es un presidente ilegítimo y sin nombre.