La muerte de un venezolano degollado por los que “luchan por la paz” no puede quedar impune, no es posible que abiertamente a través de las redes sociales y otros medios, se indique cómo se debe matar a venezolanos. Este es el caso del indigno general (Así mismo en minúsculas) Vivas. Este señor, que en vez de Bolívar tiene como héroe a Mickey Mouse, debe responder a la justicia, pues manchando el uniforme militar irresponsablemente dio técnicas de guerra a civiles para enlutar hogares venezolanos sólo por complacer intereses que sólo le conviene a grupos económicos nacionales y foráneos.
Luego de la lógica decisión de Nicolás Maduro de exhortar a las autoridades para aprender a ese sujeto, cuando éstas llegan a su casa, el general agarra un fusil de asalto para no dejarse capturar, (otro acto irresponsable y cobarde pues se escuda con su familia) y no se da cuenta que lo usan para que sea un mártir por parte de la oligarquía que está ligando su eliminación por las fuerzas gubernamentales. Por otra parte, muchos opositores Mickeyguarimberos dicen que ese señor evoca el artículo 350 de la actual Constitución aprobada por el pueblo, sin darse cuenta que ese individuo no reconoce la Carta Magna, pues utiliza la bandera de siete estrellas e invita a todos a usarla en vez de la que tiene ocho estrellas. (La verdad no es nada extraño sabiendo que los Mickey-manifestantes son contradictorios sin un proyecto de país).
Sabemos que el pueblo venezolano va a superar estos desórdenes, porque un batallón de sifrinos adoradores de Mickey Mouse no podrán quitarnos jamás los logros que hemos conseguido en el área social, económica, política, regional, etc., pero la Revolución por la que luchamos todos los días no puede permitir estos llamados irresponsables de personajes que se sienten de una u otra forma, apoyados por fuerzas extranjeras y grupos económicos nacionales y foráneos. Nuestro comandante eterno en su oportunidad dijo que el Chávez “pendejo” del 2002 ya no existía. Lo dijo en referencia a los desmanes de la dirigencia opositora que pusieron en vilo a todo un pueblo en esa época. En estos tiempos no podemos dejar que exista un Nicolás Maduro “pendejo”. Es hora de aplicar la Ley, siempre en el marco de la Constitución, pero no dejar jamás que la impunidad triunfe.
Hasta La Victoria Siempre.
