Luego de la elección del Primer Mandatario Nacional Nicolás Maduro como presidente del Psuv, en el marco del III Congreso del partido de la Revolución Venezolana, los retos continúan y la bisagra entre el pueblo y el gobierno, que tanto anhelaba el Comandante Chávez, ahora sale más fortalecida que nunca.
La forma de hacer política y de enterrar para siempre en Venezuela los vicios del capitalismo, expresados en la IV República, son el mayor reto a cumplir por las bases de la Revolución congregadas en Caracas e integradas a los cuadros del Gobierno, que ejecuta el legado del “Comandante Supremo” Hugo Chávez y el cual está expresado en el Plan de la Patria.
Las expectativas surgidas en torno al Congreso del Psuv en toda Venezuela, en la Patria Grande y en el mundo han sido abundantes. La variada participación de los diferentes estados, representados por regiones, han deliberado a sus anchas, expresado sin tapujos sus ideas y han resumido de manera concreta,sus objetivos básicos para avanzar e impulsar al Gobierno del Presidente Nicolás Maduro, hijo de Chávez, hacia el logro de sus metas y que además el pueblo reclama.
El concepto de lealtad ha sido también esgrimido y reiterado por la mayoría de los participantes y delegados al III Congreso, como uno de los principios relevantes para la Revolución.
Luego de insistir en la formación ideológica y la formación de cuadros, tambiénse ha considerado de gran trascendencia, la participación de los movimientos sociales,como el Polo Patriótico, los colectivos y las UBCH, como signo indiscutible de la inclusión para el debate.
Si bien ha privado la sobriedad en los planteamientos durante el desarrollo del Congreso, el mismo ha estado a la altura del compromiso histórico y ha resultado una muestra de la gran madurez política, alcanzada por todos los revolucionariosde este proceso, bajo la luz y la escuela del Comandante Hugo Chávez.
Quienes apostaron a la división del PSUV, en esta nueva ocasión, tendrán que comerse sus bajas pasiones, porque “deseos no empreñan” y en la Revolución además no hay “encerronas”.
Para el principal líder del Gobierno y ahora presidente del partido, Nicolás Maduro,el compromiso debe asumirsecomo una nueva etapa de la Revolucióny con mayor participación popular.
La experiencia acumulada durante estos 15 años del gobierno de Chávez y ahora junto al mandato de Maduro, son una buena señal para alcanzar el rumbo marcado por el Plan de la Patria. El mismo se renueva con la participación protagónica de las bases,quienes sin dejar ser irreverentesen la discusión, semantienen con la lealtad,principio indispensable para concretar las ideas y avanzar con hechos y resultados.
El Congreso del Psuv, del cual esperamos atentos la mayoría de venezolanos sus conclusiones, debe ser positivo. Los frentes allí representados de mujeres, juventud, trabajadores, comunicadores, comuneros, entre otros, así lo ratifican. Todos estamos alerta para sumarnos al legado dela “unidad, lucha, batalla y victoria” y además para reafirmar el legado del ideal bolivariano y chavista que ya está Maduro.
No debe quedar, para nadie, ninguna duda del carácter antiimperialista de la Revolución Bolivariana. Igualmente,para todos los venezolanos quienes debemos estar conscientes de la firme y constante lucha por la unidad revolucionaria y socialista; el único antídoto contra el sectarismo y el fantasma del capitalismo burgués, el cual siempre va a estar al acecho, comoúnicaexpresión de la “burguesía parasitaria” y sus aliados.
El fantasma del imperialismo no descansa,siempre está activo y preparando una nueva celada. En la medida que se fortalezca la Revolución Bolivariana y se sigan consolidando los ideales de Chávez en América y el mundo, como expresión de una nueva geopolítica multicéntrica y pluri-polar,el enemigo reacciona y ataca, al ver perder sus espacios que siempre habían estado bajo su dominio.Por eso, el mensaje permanente de Chávez de “ojo pelao”, no debe olvidarse.
La discusión en el Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela, Psuv; incluso conla participación de amigos de otros países del mundo, ha sido fructífera.Sólo nos queda “pasar del dicho al hecho”.
La militancia revolucionaria, formada bajo las enseñanzas del Comandante Chávezen la participación democrática y protagónica,ahora reclama sus espacios y debe ocuparlos.
El Psuv debe ser, después de este Congreso, un partido de calle y respaldar abierta y directamente el Gobierno del Presidente Maduro con másahínco, junto a todos los venezolanosquienes creemos en la defensa de la Patria como una unidad cívico-militar.
Como lo dijera el “Comandante Supremo” Hugo Chávez - no se les olvide, porque ahora tenemos Patria - y al recordar al Cantor del pueblo Alí Primera, también nos decía: ¡la Patria es el hombre!
Es por eso queahora más que nunca,tenemos una realidad que va más allá del lema: “unidad, lucha, batalla y victoria” y que en la voz del pueblo nos reclama respuestas. ¡Amanecerá y veremos!