El asesinato del diputado Robert Serra dice el Ministro Miguel Rodríguez Torres fue “Un homicidio intencional, planificado y organizado en detalles, macabra encomienda”. Diríamos sin ninguna duda que fue un asesinato por encargo, ejecutado por el sicariato al servicio de obscuros intereses fascistas y terroristas que actúan dentro y fuera de Venezuela.
La respuesta la encontraremos, sin temor a equivocarnos, en los videos publicados a través de los medios de comunicación , donde terroristas de oposición confesaron los planes que cumplieron y los que iban a cumplir: Asesinatos selectivos a líderes populares revolucionarios y comunales, para amedrentar sus bases, además de la colocación de explosivos (C4), en sitios públicos importantes, escuelas, abastos, discotecas, centros comerciales, cafetines, teatros etc.
Es un ataque certero a los planes de paz implementados por el gobierno, como lo hicieron con las guarimbas, pero no debemos caer en provocación y seguir adelante con dichos planes. sin dejarnos amedrentar.
Debemos encontrar y castigar a los culpables materiales e intelectuales y aplicarles todo el peso de la ley.
Robert Serra, tenía un brillante futuro político, fue un ejemplo para la juventud tanto en su vida pública, privada y política, además de ser leal y fiel a los principios revolucionarios a el Comandante Hugo Chávez y al presidente Nicolás Maduro.
Es el diputado más joven, que ha tenido la patria en 200 años, su discurso elocuente y encendido lo hizo acreedor, al calificativo de “La ametralladora revolucionaria de paz”. Robert Serra no murió y vive en el corazón del pueblo venezolano. Decía el cantor del pueblo Ali primera, “los que mueren por la vida no pueden llamarse muerto”. Todos somos Robert y María Herrera.
La muerte de Robert, es un golpe duro, es un golpe tremendo para la juventud y para la revolución, pero se equivocan los que cantan victoria, porque con su muerte lo que hacen es fortalecer mucho más el espíritu revolucionario de la juventud y de un pueblo que siempre lo admiró.
Debemos estar alerta, y no bajar la guardia, porque esto puede ser el comienzo de una nueva escalada terrorista anunciada por ellos previamente; dirigida por el Paraco Uribe y amamantada por el Imperialismo Yanqui.