Cuando nadie nos conocía. Ya sabias quien era yo y por donde andaba, te jactabas de ser mi camarada; decías por nuestra posición revolucionaria, que éramos los más idóneos para sacar las tareas que como jóvenes era nuestra responsabilidad.
Ahora no se qué paso, o si se, pero no quiero decirlo, los que se quedaron en el camino asesinados por esbirros de los gobiernos IV Republicanos, se revolcarían en sus tumbas, por mi ligera apreciación.
Las ínfulas que muestras ahora en la humildad disfrazada; eran desconocidas en esa juventud llena de sueños con la que recorríamos todas las barriadas que estimulaban nuestro alrededor y jurábamos como cualquier religioso, que jamás abandonaríamos el combate.
Éramos un reflejo de lo que ya no somos, o mejor dicho de lo que ayer éramos.
Una de las desgracias que me avergüenzan en este tiempo; es entender que cuando los lideres pierden la humildad, se convierten en panfletario y se los empieza a traga el olvido; la verdad empieza a debilitarse, para convertir a los ex camaradas en pantomimas; en conveniencia de intereses mezquinos que trasforman la mentira en ilusiones, que a la larga creen sustentara el que poder.
Ahora que estamos distante, me doy cuenta; muchos se fueron tras de ti, se hicieron seguidores de marketing, o ya lo eran y botaron valores y me quede guindado en la ilusión de la igualdad que proponíamos y quede solo, buscando quien entienda comunismo como doctrina de unidad.
Que nos paso amigo mío, en que punto de la instrucción fallo la formación. Quien se hizo dueño de todos esos motivos llenos de sueños, que ahora son estorbo en la tortura que tienes como oficio.
Te voy a reencontrar, volveré a intentar mientras respire, porque aun creo en ti. Olvidare los motivos que nos separaron y volverte a la sindéresis será mi lucha nueva, porque sé que no tiene sentido si no es contigo a plenitud, en los cabales que estoy seguro te volverán a la cordura.
Ya somos unos viejos pasados de moda y la revolución no es nuestra, es de una juventud que grita y necesita de nosotros; me resisto a creer que construimos todo en bases superficiales que devora el capitalismo.
Quiero sepas, no me rendiré aunque crea que algo te separa de nosotros. Perdona, digo nosotros porque no te había contado; que ellos siguen en el mismo lugar, esperando lo que les debe el tiempo y nosotros somos responsable de encontrarlo.
Los confundidos creen este es el PUEBLO que tenían; ignoran han pasado años que hacen esto distinto: los que esperamos son los que entendimos la propuesta de cambiar, porque PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA
