En estos últimos años, hemos hecho de todo como corresponde en revolución y ahora cuando empiezan días de Pascua en nuestra PATRIA (mayoría religiosa) es tiempo de concientizar acciones, para poder celebrar.
Es importante en los tiempos que vivimos; en momentos de dudas, mirar hacia atrás y ver lo hecho; para sobre los pilares, seguir evaluando con certeza que habrá solidez y proyectar lo que es necesario sentar sobre bases solidas.
Esta situación será posible, cuando los resultados encontrados en el balance nos permitirán hacer Pascua en paz, como lo indica el cristianismo (de Jesús Cristo) no de la falsa creencia que engaña y pegar brincos de alegría; cuando por dentro estamos preocupados, bailando en un tuzero (dicho de nuestros abuelos; quiere decir que el piso no es seguro)
El capitalismo está celebrando; es probable que tenga motivos y nosotros los que estamos del otro lado, es decir del socialismo, lo dejamos; están haciendo pachanga, sin líneas de tradición; solo pegando brinco sobre una música estridente que no conocen bien, donde la alienación tiene gran influencia direccionada y el pensamiento crítico brilla por su ausencia, negando que para bailar Pascua, hay que tener conocimiento de la alegría y el motivo por el que se está celebrando.
En este escrito no quiero cuestionar la rumba, ni la pachanga, ya está en tela de juicio, no aclarada, hasta con banderas de siete estrellas al revés: lo que quiero es llamar la atención para que entendamos que tenemos un PUEBLO que es alegre y quiere bailar; pero también desarrollar pensamiento, para poder aportar en la estabilidad de nuestra nueva revolución, que no tiene formas de ninguna anterior; pero puede iniciarse sobre las bases solidas de otra visión, no alienada: que nos lleven a la independencia del yugo impuesto por el capitalismo y seamos en verdad comunista; donde este hibrido que estamos llevando, desaparezca por completo y entandamos de una vez que el capitalismo devora y nosotros somos su manjar más preciado para tragar, porque saben que si no detienen esta línea humanista que proyectamos y que es irreversible; cambiaremos el mundo y celebraremos en Pascua por siempre, porque PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA.
