En Margarita, había una manera de decir las cosas. No sé ahora, si la llamada "modernización" acabó con eso, pero teníamos una forma de expresar nuestras certezas e incertidumbres.
Por ejemplo, si alguien decía: Fulanita fue a la iglesia vestida de blanco y señorita, otra fulanita dudosa de esa condición, podía decir: "¡Si chaco!". Esas siete letras, mantenían a un pueblo con un ambiente crispado, tratando de asegurase cuál era la verdad.
Eso mismo pienso al ponerle el oído a la tesis del "voto castigo", que ya está instalada e institucionalizada. Una "verdad", que ya suena como pocas (absoluta) y metiéndole el dedo a Einstein.
No voy a colocarme en el papel de rebatir esta tesis. Pretendo más bien, colocar algunas referencias para inducir a otra reflexión.
Uno puede tener mucha inconformidad con las políticas que el proceso generó, porque efectivamente no fueron al punto de los problemas fundamentales. Pero hay una cosa que si suena como una verdad absoluta. Chávez, particularmente Chávez, hizo visible y les reconoció la condición de sujetos a los indígenas de Venezuela, que históricamente habían sido abandonados. Hubo ese reconocimiento y ofrecieron unas políticas que podemos por supuesto evaluarlas, pero nunca, en el ámbito de la derecha, se había ni prometido ni realizado una situación como esta.
A pesar de ello; la MUD se llevó el banderín del voto indígena o los curules. Sí; alguien podrá decirme y con razón, que muchos venezolanos y venezolanas no indígenas se les planteaba votar por un diputado indígena y tal vez por eso, no tuvimos en ese ámbito un mejor desempeño electoral. Sé de Municipios en el estado Anzoátegui, en los cuales un alto porcentaje de la población total es indígena y la derecha ganó o perdió con una pequeña diferencia.
Esto puede permitir otra lectura del "voto castigo", que esté más allá de esa conclusión que ya se instaló de este lado y del otro también.
El otro elemento o dato que parece conspirar contra esta tesis del "voto castigo", viene porque está más o menos demostrado, que una parte importante de los votos obtenidos por la oposición no vienen del cahvismo. Los chavistas no se inclinaron hacia la MUD. Una importante cantidad de ellos decidieron no salir a votar. No se molestaron en castigar directamente al PSUV. La indiferencia puede ser una posición más suave o un golpe menos severo que el votar por la MUD.
Esta Posibilidad, también nos lleva a pensar que el PSUV se equivocó con una estrategia electoral más completa en un momento de mucho descontento. Le dio facilidades a Ricardo Sánchez (por ejemplo) para quitarle votos a la MUD, pero cerró opciones que pudieron recoger electoralmente esa indiferencia (abstención) y probablemente ese más de millón y medio que se abstuvieron, pudieron haber tenido una opción para drenar su descontento. Esa abstención, pudo producir diputados y diputadas en el campo de la izquierda y facilitaba tener un "colchón" para llevar mejor este revés electoral, que es también un desencanto de mucha gente en cuanto a la ruta que lleva el proceso.
@evaromar
