La Vega está llena de ñángaras. Hay como arroz "picao". Y aunque las elecciones del seis de diciembre hayan parecido decir otra cosa, esa partecita de la parroquia que es puro pueblo "alzao", está llena de ñángaras. ¿Eso es bueno o es malo? ¡Es buenísimo! Eso demuestra que La Vega tiene quien la defienda.
El viernes, la ultraderecha intentó hacer de la zona un laboratorio infernal con el cuento de que el pueblo tiene hambre. Pues, con hambre quedaron: duraron lo que dura un bostezo. El alboroto financiado por los golpistas, se desinfló.
César me dice que, desde el inicio, siguieron los pasos a los agitadores. El punto de partida de los antipatriotas, fue "movilizar choros que se encargaron de alborotar gente".
"Movieron dinero", agrega César.
Vio a Venevisión en la zona. Afirma que ese medio era un "sal pa’ fuera", intentando subir el fogón con sus entrevistas.
Dato candela de César: pilló "gente que no era de aquí, que ni siquiera sabía cómo salir de la parroquia". Todos, de Primero Justicia.
Otro dato, igual de "pelúo": "las autoridades ya dirán sobre los ‘franco’ que agarraron".
César recuerda que "semana antes había estado el diputado borracho aquí" y "fíjate lo que sucedió: están utilizando a pendejos de algunos consejos comunales. Les dicen que venderán harina o lo que sea", para luego activar a "los choros pagados que puedan secuestrar los camiones" y hacer ver como si fuera saqueo popular.
"Estamos buscando a los responsables, compa. Es la nueva modalidad de estos opositores", indicó.
Tengo un dato a los contrarrevolucionarios: piénsenlo dos veces si sueñan regresar a La Vega con el cuento del hambre. Lean la historia. Hambre les tienen a ustedes. Pelen por la literatura y la memoria de los viejos y las viejas.
Les repito: La Vega está llena de ñángaras y eso ¡es buenísimo!
No insistan. Déjense de vaina con La Vega
¡Chávez vive…la lucha sigue!