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El año pasado Vladimir Villegas le preguntó a Pedro Carreño si la realización de elecciones en Venezuela iba a depender de la superación de la crisis económica. Esta fue la respuesta de Carreño:
"¡Claro!.. ¿Vamos nosotros a satisfacer las ansias personales de un grupo (se refiere a la oposición) a costa del sacrificio del pueblo...?"
Previamente, Carreño había emitido esta opinión:
"Fundamental es la alimentación. Con los precios del petróleo que tenemos (…) creo que eso pasa a un segundo plano (se refiere a las elecciones regionales)"
Días antes Elías Jaua le había comentado al mismo Vladimir Villegas lo siguiente:
"…para ir a unas elecciones, y que las elecciones tengan un resultado a favor de la estabilidad política, tienen que haber unas mínimas condiciones; esas condiciones en este momento no están dadas…"
Desde esos episodios hasta ahora la crisis económica se ha agudizado y las condiciones generales del país han empeorado. Lo curioso es que hoy en día Pedro Carreño y Elías Jaua sí están de acuerdo con restituirle al pueblo el goce de ese derecho que el chavismo oficial ha mantenido suspendido en los últimos tiempos. Me refiero al derecho a votar. Ah, pero Carreño y Jaua no están hablando actualmente de saldar la deuda electoral que el Estado mantiene con las venezolanas y los venezolanos desde el 2016. Lo que ellos pretenden es montar una consulta sustentada en unas reglas de juego que le permitan al dictador Nicolás Maduro controlar la fraudulenta Asamblea Constituyente que los corrompidos dirigentes del PSUV están promoviendo.
Ya sabemos por qué el chavismo suspendió las múltiples elecciones que estaban previstas para el 2016. No fue por la crisis económica ni por la ausencia de condiciones mínimas sino por la certeza de que las iban a perder todas.
¡¡¡Sí a las elecciones regionales!!!
¡¡¡Sí a las elecciones para escoger nuevamente los diputados de Amazonas!!!
¡¡¡Sí al referéndum revocatorio!!!
¡¡¡No a la fraudulenta Asamblea Constituyente!!!
¡¡¡Elecciones libres, transparentes, universales, secretas y directas ya!!!
Anexos:
Video de la entrevista que Vladimir Villegas le hizo a Pedro Carreño (ver desde el minuto 10:51 hasta el minuto 11:23):https://www.youtube.com/watch?v=cc54mpEB8NM
Video de la entrevista que Vladimir Villegas le hizo a Elías Jaua (ver desde el minuto 0:24 hasta el minuto 0:35):https://www.youtube.com/watch?v=2CoEE3vTUFY
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Twitter:
Mario Villegas:
Esto decía hace 2 años el defensor Tarek William Saab sobre un nuevo proceso constituyente. ¿Qué dirá hoy sobre la constituyente de Maduro?
"No se justifica la convocatoria de un nuevo proceso constituyente porque esta constitución cumplió apenas 15 años y es la más modélica que tiene América Latina. Sería una convocatoria extemporánea" (Defensor Tarek William Saab al periodista Mario Villegas en enero de 2015)
Diario Últimas Noticias
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Suscribo este escrito de Tomasz Suárez:
"La fraudulenta convocatoria a Constituyente hay que entenderla como la etapa final de la progresiva derogatoria de facto de la que ha sido objeto la Constitución Bolivariana a lo largo de los últimos años. Gracias a sucesivas maniobras del partido de gobierno, en Venezuela han dejado de tener vigencia disposiciones tan fundamentales como: la separación y autonomía de los poderes públicos, la celebración periódica de elecciones, la iniciativa ciudadana para convocar referendos, el derecho a la manifestación pacífica, el derecho a ser juzgado por jueces naturales, la libertad de asociación política y sindical, la homologación del salario mínimo a la canasta básica, el derecho a la información veraz y oportuna, y tantos otros."
"En ese sentido, la Constituyente no es más que un último y definitivo paso en ese proceso de ruptura con el modelo de democracia contenido en la Constitución de 1999 --que aparentemente aún funciona como una precaria camisa de fuerza para las apetencias dictatoriales y fascistas de quienes detentan el poder en Venezuela. Por ello la oferta gubernamental de (supuestamente) "mejorar" la Constitución de 1999, debe ser entendida y denunciada como lo que es: una mampara discursiva para enmascarar las verdaderas intenciones políticas que se ocultan detrás de ella, y que nada tienen que ver con la defensa o el cultivo de la democracia." (Fin del escrito de Tomasz Suárez)