En los últimos años el pueblo venezolano ha sido sometido a una bestial guerra económica, donde su salario fue por demás pulverizado. Prácticamente no se podía comprar nada. A los anuncios del Presidente Maduro de aumento salarial, bonos y otras compensaciones, la burguesía parasitaria le respondía con descarados aumentos de precios. La burda excusa era el alza del criminal DolarToday. El presidente Maduro y el pueblo estaban claro, que todo esto era parte de un plan macabro para asfixiar al pueblo y que este explotara en una guerra civil o justificara cualquiera intervención extranjera. El horizonte estaba claro en una evidente manifestación de la lucha de clases. Era la continuación de toda la conjura y satanización que le hicieron al comandante supremo Hugo Chávez Frías. No conforme con esto, la Revolución ha tenido que soportar toda una escalada de violencia, con muertos, heridos y destrucción hasta llegar al magnicidio con grado de frustración del pasado 4 de Agosto. Esa es la historia de la manera más sintética. En toda esta confrontación, el pueblo con altos y bajos le exigió a nuestro presidente que actuara y gobernara. El presidente Maduro con gran paciencia y valentía esperó el momento político oportuno (Constituyente y grandes victorias electorales) para pasar a la contraofensiva económica, y ha lanzado el PROGRAMA DE RECUPERACIÓN, CRECIMIENTO Y PROSPERIDAD ECONÓMICA que ha sido recibido con alegría y satisfacción por la inmensa mayoría del pueblo venezolano.
Es un programa que ha sido elaborado pensando en los asalariados y por consiguiente en la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores. Rescatar las categorías del TRABAJO, SALARIO Y PRODUCCIÓN y ponerla en función de la nueva economía, que no siga dependiendo del rentismo petrolero. Una economía donde ya están activados los motores productivos en diversas áreas. La jugada magistral de Maduro con la reconversión monetaria estuvo en crear un nuevo cono monetario, donde el Bolívar soberano queda anclado a la Criptomoneda el Petro (60 dólares) en equivalencia de 3.600 bolívares soberanos. De esta manera se están rompiendo con viejos esquemas y paradigmas económicos. Un Petro por demás respaldado por nuestro principal recurso como lo es el Petróleo. De esta manera el Presidente decreta que el salario mínimo y pensiones se ubican en medio Petro (1.800 bolívares soberanos), y como si fuera poco otorga un bono de reconversión de 600 bolívares soberanos. Vamos hacia la salarización del trabajo. El presidente como sabía que los empresarios se iban a quejar por el "impacto de las medidas", decreta que el Ejecutivo asumirá el pago de nómina por un lapso de 90 días mientras entramos a una etapa de estabilización económica.
A esto se le suma el renglón de los precios acordados entre el gobierno y los empresarios, para lo cual ya se publicó un primer listado (25 rubros). Vendrán grandes anuncios con la sinceración del precio de la gasolina, que como se ha dicho es casi regalada en nuestro país (habrá un subsidio directo a través del carnet de la patria). Viene un plan de ahorro sobre todo para los pensionados y cajas de ahorro del país. No entraré en detalles sobre las otras medidas de corte fiscal y monetario. Señalado lo anterior, ahora viene el gran RETO Y DESAFÍO para el pueblo venezolano para ayudar al Presidente a que se cumplan sus decisiones. Que todos respeten el nuevo orden económico. Que se convenzan que con este programa todo salimos ganando. Sabemos que los capitalistas y usureros no se cruzarán de brazos. No lo hicieron con las leyes habilitantes promulgadas en el 2002 donde dieron un golpe de estado, mucho menos ahora. De manera tal, que debe ser el pueblo al lado de las FANB, PSUV, GPP y toda la institucionalidad revolucionaria la que haga cumplir las medidas del presidente Maduro.
El poder popular dando de nuevo un paso histórico. Abrazado a la causa independentista. La ofensiva fiscalizadora ya arrancó con buen pie en todo el país. Hasta el momento hay alegría en el pueblo por las medidas anunciadas. Alguien dijo que con los anuncios económicos del presidente se está recuperando hasta la capacidad emocional del venezolano. Así se siente en la calle. Poco a poco se va empoderando de las virtudes de la misma. La gente habla y discute en la calle los pormenores de las medidas del presidente obrero. Hay un pueblo despierto, que "ha vuelto a respirar" después de la agonía causada por los pelucones de los grupos económicos y las mafias. ES LA HORA DEL PUEBLO para hacer de verdad irreversible esta Revolución. El pueblo sabe que las medidas del presidente están en el marco de la justicia social chavista. La jugada de Maduro ha sido genial y por demás audaz. Lo que quedó de la oposición, quedó paralizada. El pueblo no dejará que le arrebaten sus sueños y esperanzas. Este es el momento de más unidad, organización, disciplina, conciencia y de pelea en la calle. Es la hora de la grandeza del pueblo de BOLÍVAR Y CHÁVEZ. Ese es el llamado de nuestro presidente Nicolás Maduro.