Como parte de las estrategias que el gobierno venezolano debería implementar para combatir el Covid-19, está la de entregar a la población venezolana lo que se podría llamar un CLAP sanitario, el cual deberá contener, como mínimo, mascarillas (tapabocas), guantes, alcohol, gel y medicamentos, a fin de equipar de mejor manera a los potenciales afectados por este agresivo virus.
Ya el gobierno nacional cuenta con los canales de distribución para ello, que son los mismos que ha venido utilizando para la entrega de las famosas cajas CLAP. La idea es que, en las próximas entregas, se incluya, progresivamente, el CLAP sanitario. La cobertura se podría ampliar a más población, si se utilizan los canales de distribución que tienen organizaciones como CARITAS y otras que pertenecen a lo que se llama sociedad civil.
Los recursos financieros y logísticos para emprender tal acción en teoría existen. Países como China, Rusia, Irán, Cuba y otros, así como la Organización Mundial de la Salud, la Organización Panamericana de la Salud y la Cruz Roja Internacional, podrían colaborar en tal sentido. Es cuestión de tomar la decisión y accionar, a tiempo, en preparación para los próximos meses. Además, sectores de la llamada oposición política venezolana parece que están dispuestos a colaborar.
A todas estas, como el presidente Nicolás Maduro está muy animado con eso de la medicina natural, y las bondades que tienen especies vegetales como malojillo, sábila, albahaca, romero, diente de león, etc., no estaría demás incluir en el CLAP sanitario, un pequeño folleto que contenga información sobre esto. En algo puede ayudar. La cruzada que se viene tiene que ver con fortalecer la cultura de salud preventiva en los venezolanos y potenciar también su sistema inmunológico. Para después será demasiado tarde.