El reciente anuncio de aumento del precio de la gasolina deja en evidencia a una corte de críticos del gobierno quienes parecen tener como objetivo cuestionar toda acción del ejecutivo, con la lógica de llevar la contraria a todo lo que este diga o haga.

Es una realidad de anteojito que lo que se paga en Venezuela por el litro de la gasolina no guarda ninguna correspondencia con los costos de producción. Si bien es cierto que la gasolina en Venezuela no puede tener un precio tan elevado como el del mercado norteamericano, mucho menos como el mercado europeo, no quiere decir que no deba tener una correspondencia con los costos de producción. Solamente el hecho de tener una inflación acumulada de 615 por ciento entre 1997 y 2006 es suficiente razón para entender que la gasolina no puede ser el único bien que nunca incremente su precio.

Llama la atención ver los argumentos tan descabellados con los que algunos tratan el tema. Uno se pregunta ¿Dónde estaba Antonio Ledezma cuanto el precio de combustible se incrementó en 1989 y por que no salió a calificar la decisión de Carlos Andrés Pérez de neoliberal?. Es sorprendente escuchar al ex camarada TEODORO PETKOFF quien en tono burlón compara a Chávez con Carlos Andrés Pérez y Caldera por una presunta coincidencia en los argumentos con ellos. ¿Es que acaso cree que Chávez se parece a Pérez o Caldera?.

Cuando CAP aumento el precio del combustible el país estaba en medio de la aplicación de un paquete fondomonetarista con liberalización de todos los mercados, en medio de una inflación de 80 por ciento. En aquel entonces vivíamos una fuerte recensión económica, una caída de los salarios reales y aumento del desempleo.

Teodoro, lo que caracterizó de neoliberal a dicho programa no fue precisamente el aumento de la gasolina, sino el conjunto de medida que liberalizaban al mercado cambiario, las tasas de interés, los precios de bienes y servicios un ajuste fiscal de shock y el proceso de privatización. Miguel Rodríguez hablaba de promover la competencia entre estaciones de servicio y hacer que los precios del mercado domestico de combustible se acercara al precio de los mercados internacionales. En realidad no pudo continuar con su plan, su objetivo era continuar los aumentos del combustible hasta llevarlo a nivel del mercado internacional.

La situación actual es muy distinta a la que tenía el país cuando Pérez aplicó su paquete neoliberal, Al contrario venimos de un periodo de tres años consecutivos de crecimiento económico en el que se acumula un 44 por ciento de crecimiento del PIB. Los sectores de bajos ingresos se han beneficiado de la política social, ello les ha permitido mejorar el acceso a los servicios de salud, educación, alimentación entre otros y se espera que la economía continué en una senda de crecimiento económico.

Veamos el sin sentido de algunos argumentos en contra del ajuste de precios de la gasolina:

“somos un país petrolero y por lo tanto no se justifica el aumento” En realidad existen otros países petroleros en donde la gasolina es barata como es el caso de Irán, y Arabia Saudita; Sin embargo, en el primero el precio del combustible es 2,5 veces mayor al de Venezuela y en el segundo es 5,3 veces más cara.

“el aumento de la gasolina va en detrimento de los pobres” Aunque algunos han querido argumentar que el aumento del combustible afecta por igual a todas las personas es difícil de sostener dicho argumento. Quien tiene en su casa tres vehículos y entre ellos una camioneta de seis u ocho cilindros consume en términos per- capita al menos cuarenta veces más combustible que una persona de bajo nivel de ingresos; lo que quiere decir que recibe cuarenta veces más subsidios que el ciudadano de bajo nivel de ingresos. No existe dudas que un precio tan bajo estimula el sobre-consumo del combustible en el mercado domestico y que cada litro de sobre-consumo es un litro de gasolina menos que se vende en el mercado internacional a un precio veinte veces mayor. Los ahorros generados por un uso más racional del combustible pueden orientarse a financiar programas sociales y educativos, de manera que en forma neta los pobres reciban una compensación mayor a la del impacto del incremento del precio de la gasolina a sus bolsillos.

“el aumento de la gasolina es inflacionario” Algunos analistas se oponen al aumento del precio del combustible porque consideran que el impacto de este en los costos de producción genera una espiral inflacionaria. El componente combustible en el costo de producción de muchos bienes es bastante bajo, dicho impacto puede estar entre 1 por ciento y 4 por ciento de los costos de producción. No obstante, los especuladores tienden a propiciar incrementos de los precios sustancialmente mayores. En todo caso se trata de un ajuste en el nivel de costos de un insumo y no de una espiral de incremento de costos. Muchos analistas no han cuestionado que el precio de vehículos de transporte se ha duplicado en los últimos tres años y que los fletes han tenido incrementos sustanciales a pesar de que el precio del combustible se ha mantenido igual. ¿Cómo se puede racionalizar que todos los precios se incrementan pero el precio de la gasolina es sagrado?.

“el precio del petróleo viene bajando en todo el mundo y no se justifica que un país petrolero aumente el precio de la gasolina, en Venezuela el precio de la gasolina debería bajar” Suena totalmente descabellado, lo arriba mencionado por un joven líder de un viejo partido. La falsedad de dicho razonamiento busca ocultar algo muy evidente, el nivel de precios de la gasolina es mucho más bajo en Venezuela al compararlo con muchos otros países, por ejemplo, en el Reino Unido el litro de gasolina cuesta más de un dólar y se vende a un precio veintiocho veces mayor al nuestro, cuando baja el precio del crudo en el mercado mundial el precio de la gasolina en el Reino Unido puede descender entre diez y veinte centavos el litro; no obstante en un país petrolero en el que la gasolina tiene un precio fijo equivalente a 4 centavos de dólar por litro no se le puedes pedir que reduzca el precio en diez centavos para ubicarlo en menos 5.5 centavos ( -5.5 centavos de dólar) que equivaldría a decir que te paguen en la estación de servicios Bs. 118.25 por cada litro que coloques en el tanque. Por su puesto que el razonamiento no tiene ni pie ni cabeza pero, a la hora de atacar “al régimen” todo argumento les parece valido.

En conclusión nada es gratis, existe un costo de producción del litro de gasolina, en otras latitudes es mucho más elevado que en Venezuela, es razonable que el combustible en Venezuela sea más barato que en muchos otros países, pero no se justifica que sea tan barato que no se pueda cubrir los bajos costos de producción que tiene la gasolina en Venezuela.

(*) El autor es Profesor de Desarrollo Económico en la Universidad Central de Venezuela. Actualmente se desempeña como Ministro Consejero de Asuntos Económicos en Comisión en la Embajada de Venezuela en Washington DC.

Sojo puede ser contactado a la dirección josesojo1hotmail.com

Anexo: Precios de la gasolina en el mundo, según Fuente: air-inc.com

Fuente: air-inc.com

(*) El precio de la gasolina en Venezuela es calculo propio, se estimó a tasa oficial de Bs.2150 por dolar