Diario de una Cuarentena: Capítulo 526

A 12 años del cambio de paisaje de Lina Ron y a 10 de Hugo Chávez

A 1.084 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en la finalización de la semana 154 de esta contingencia, y siendo el domingo 05 de marzo de 2023,hoy de manera obligatoria debo referirme sobre el cambio de paisaje de dos imprescindibles: De Lina Ron y de Hugo Chávez.

Primero me refiero de Lina, no sólo por ser la mujer y como la educación nos ha enseñado que las mujeres primero, más que por eso, lo hago como parte de la deconstrucción colonial que debemos hacer debido a que la sociedad hegemónica que hoy tenemos es fundamentalmente patriarcal y machista. Y Lina Ron, que en vida fue muchas veces controvertida y polémica, y aun en su condición de mujer humilde, algunos y algunas tratan de invisibilizarla.

Por eso quiero rendir tributo y honor a su memoria. A esa mujer que vio su primera luz en la ciudad de Anaco, en el estado Anzoátegui, un 23 de septiembre de 1959, a la cuarta hija del matrimonio del dirigente político Manuel Ron Chira y de la docente Herminia Pereira. Su padre fue apresado a causa de un homicidio, por lo que fue criada por su madre al igual que sus seis hermanos y ocho primos. A los 27 años de edad se trasladó a Caracas y trabajó en un centro comercial. Fue dirigente estudiantil de izquierda, destacando su papel como dirigente en el Comité de Luchas Populares (CLP) donde realizó protestas a favor de los estudiantes, los vendedores informales (buhoneros) y los denominados "invasores". Lina estudió medicina en la Universidad Central de Venezuela (UCV) hasta el octavo semestre cuando abandonó la carrera.

Cuando el Comandante Chávez asume la Presidencia de la entonces República de Venezuela el 2 de febrero de 1999, Lina lo apoyó. Participó en muchas marchas a favor del Comandante, pero se dio a conocer públicamente por un acto en la embajada de Estados Unidos en Caracas a raíz de los hechos del 11 de septiembre de 2001. Y aunque su causa en la izquierda venezolana era de años, fue a raíz de los atentados terroristas del 11 de septiembre de ese año cuando cobró notoriedad. Según sus palabras: "su meta consiste en luchar a favor de los más desposeídos para que no sean víctimas eternas de algunas personalidades representantes de la oligarquía y el imperialismo en Venezuela", de lo que ella llamó la Sociedad Sambil (en referencia a una empresa de Centro Comercial de Venezuela) y la oligarquía criolla. También conservó diferencias con algunas de las corrientes existentes entre los sectores chavistas y donde Ron representó a los movimientos de calle.

Ron dirigió el Centro Cultural Cristóbal Altuve, que lleva el nombre de quien fuera su segundo esposo, ubicado en la antigua Plaza Andrés Eloy Blanco de Caracas. Participó y condujo programas de televisión alternativos (de opinión, participativos y programas juveniles) y siguió realizando un activismo político a favor del Presidente Hugo Chávez y la Revolución Bolivariana.

Luego de una corta ausencia de la vida pública, Lina Ron volvió a asumir protagonismo noticioso en 2008 cuando realizó una toma de la sede del Palacio Arzobispal de Caracas; con ayuda de sus seguidores, Ron desalojó a todos los trabajadores del lugar e hizo público un comunicado en el cual llamó a la reflexión y exhortó a los jerarcas de la iglesia católica a que depusieran su actitud ante el proceso que se vivía en el país.

El 4 de agosto de 2009, docenas de motorizados con boinas rojas rodearon la entrada de las oficinas de Globovisión y sometieron a los guardias de seguridad, ingresaron a la fuerza a la planta baja del edificio y lanzaron dos bombas lacrimógenas. El mismo día Lina Ron se entregó a la sede de la Dirección de Inteligencia Militar, en Caracas luego de que un tribunal local ordenara su captura por participar en el ataque contra la sede del canal de televisión Globovisión. En ese momento, el comandante Chávez condenó sus acciones afirmando que el ataque fue un acto ‘‘contrarrevolucionario, anárquico, que atenta contra la paz del país''. Fue puesta en libertad dos meses después, el 14 de octubre.

No fue la primera vez que Lina era detenida, ya que previo al Golpe de Estado contra el Comandante Chávez el 11 de abril de 2002, Ron se encontraba detenida en la sede de la antigua DISIP, y en sus épocas en que estuvo detenida se intentó varias veces asesinarla a través de envenenamiento y otras modalidades. Así sería el temperamento de Lina que sus enemigos no escatimaban esfuerzo alguno en tratar de sacarla como fuera del camino.

Pese a que el Comandante la catalogaba de "indomable" y que en múltiples ocasiones le llamó la atención públicamente y en diferentes oportunidades, la quiso mucho y ella a él. Si algo tenía Lina Ron era una enorme capacidad de movilización y un fuerte activismo de calle que en estos momentos de coyuntura hace muchísima falta.

Algunas de las vivencias de Lina están relatadas en el libro "La incontrolable" de Douglas Bolívar. Vivencias estas relatadas por la propia protagonista.

Lina Ron falleció la mañana del 5 de marzo de 2011 y los forenses informaron que la causa de su deceso habría sido un infarto del miocardio producto de una enfermedad coronaria que venía padeciendo desde hacía largo tiempo. Ron ingresó sin signos vitales a la Clínica La Arboleda en la ciudad de Caracas.

Puedo decir que Lina Ron es el símbolo de la rebeldía dentro del chavismo y de un pueblo indómito siempre dispuesto para el combate.

Lina Ron fue y es considerada como una de las figuras femeninas más importantes de la Revolución Bolivariana y una de las más apreciadas por el Comandante Hugo Chávez.

En 2004 fundó el partido Unidad Popular Venezolana (UPV), que desde el inicio manifestó su apoyo irrestricto a la Revolución Bolivariana del Comandante Hugo Chávez.

Durante los actos en honor a esta heroína revolucionaria, el Comandante Chávez expresó: "El pueblo te declara eternamente viva. ¡Viva! No morirás. Te declaramos viva, como viva estarás para siempre en las luchas del pueblo, en el canto del pueblo, en las batallas del pueblo y en las victorias del pueblo… ¡Para siempre!".

Algo que no se ha escrito ni dicho suficientemente de Lina Ron es que producto de su sensibilidad social y su servicio a los más desposeídos, el único cargo burocrático que Lina Ron ejerció en vida fue la presidencia del Fondo Único Social (FUS) en el estado Miranda, durante la gestión de Diosdado Cabello al frente de la primera magistratura de la referida entidad federal. Al asumir el puesto, la primera irregularidad que detectó fue justamente en la Oficina de Atención al Soberano, indicando que 60 personas sólo se ha dedicado a pedir ayudas a los entes gubernamentales pero no han trabajado por mejorar sus comunidades. Detalló que las conoce bien, y señaló que este tipo de situaciones no puede continuar. Inmediatamente se tomaron los correctivos correspondientes.

Durante su gestión al frente del referido despacho siempre se dedico a la ubicación de soluciones rápidas e inmediatas a las personas que lo necesiten. Es por ello que inició una evaluación exhaustiva de los activos con los que cuenta para llevar a cabo su labor.

Durante esta gestión de Lina Ron la indigencia fue prácticamente erradicada durante ese tiempo en el estado Miranda, además de adelantar trabajos de humanización dentro de los recintos penitenciarios ubicados en la referida entidad federal. Además de chocar de frente contra el burocratismo.

Eso es lo que tengo que referirme en cuanto a Lina Ron.

En cuanto a los diez años del cambio de paisaje del Comandante Chávez. Y que se lea bien, del cambio de paisaje como decía el cantor del pueblo Alí Primera, porque realmente a Chávez lo sembramos en el Cuartel de la Montaña (antiguo Museo Histórico Militar) el 16 de marzo de 2013 y en nuestros corazones desde hace 31 años con aquel "Por Ahora". Y que escribir hoy que ya no se haya escrito del "Libertador del Siglo 21" "Del Bolívar de nuestros tiempos". O como escribir hoy de él sin que en los ojos no se asomen sin disimulo algunas lágrimas y de llorar como aquella tarde del martes 5 de marzo de 2013.

Aun queda pendiente y es parte de una deuda histórica que tenemos con él, de nombrar una comisión que investigue si la enfermedad, si el rabdiomiosarcoma que tuvo el Comandante Chávez fue provocada por sus enemigos, teniendo en cuenta que el cáncer que sufrió el Comandante rompía con todas las regularidades y comportamientos de este tipo de enfermedad. Muchos cometieron el error de que eliminando a Chávez se acababa la Revolución Bolivariana, y ya ven que se han equivocado de banda a banda.

De la enfermedad del Comandante, el tenía la intuición, pero diez años después, algunos y algunas tenemos la certeza y por datos que manejamos, eso aunado a las múltiples veces que Chávez fue amenazado y por el concurso de países en el mundo con gran avance científico y tecnológico, de determinar las causas del fallecimiento del Comandante Chávez. Quizá no lograron el magnicidio de Chávez por la vía de un atentado tradicional, pero todo pareciera indicar que lo lograron afectando su salud con las técnicas más avanzadas. Eso hoy en día ya no es tan secreto. De esto tal vez nos enteremos una vez que se desclasifiquen nuevos documentos de la CIA y servicios de inteligencia estadounidenses y/o israelíes.

Ya en 1940 y 1950 ya había algunos países en el mundo, entre ellos Estados Unidos que tenían laboratorios científicos donde se ensayaba como provocar cáncer y otras enfermedades. Ya cuando han pasado casi 80 años cuanto no habrán avanzado en ese sentido. De hecho en Ucrania, en el marco de la Operación Especial Militar que realiza Rusia para librar a este país del nazismo y el fascismo, se han encontrado laboratorios de guerra biológica, nada más y nada menos.

El Sida por ejemplo ya está demostrado que es una enfermedad creada producto de ensayos que se hicieron y luego la diseminaron. Si Chávez logró demostrar que la muerte de Bolívar no fue por tuberculosis, hoy en día debe ser menos difícil demostrar que el asesinato de Hugo Chávez pudo haber sido producido por medios biológicos.

De hecho diez años después de la muerte de Yaser Arafat, se demostró que éste resultó envenenado con la sustancia radiactiva polonio 210, la cual podía colocarse en su kofir (turbante), en su ropa, o en el cepillo de dientes que éste usaba, causándole esa extraña enfermedad que posteriormente lo condujo a su fallecimiento. Y el Mossad israelí detrás de esta acción.

No quiero llegar a conclusiones apresuradas, y esto con los elementos y datos que se manejan. Pero indudablemente todo indica que fuerzas oscuras trabajaron en el asesinato no convencional de Chávez para acabar con la Revolución Bolivariana y así golpear a América Latina y el Caribe.

Tal vez no es este el momento ni las circunstancias históricas estarían dadas para confirmar y afirmar con mayor propiedad estos asertos que he hecho en el presente escrito. Pero ese tiempo llegará y estoy seguro que no falta mucho para ello.

Pero no es tanto de eso a lo que quiero referirme en la presente edición de esta columna, sino de mi sentir y de mi amor por la figura del Comandante Inolvidable, a diez años de su cambio de paisaje como ya lo he expresado párrafos más arriba.

Chávez más que mi líder, más que mi jefe, más que mi Presidente; era y es mi amigo, era y es mi hermano, era y es mi padre. Por eso, esta conexión amorosa de él conmigo se ha mantenido, se mantiene y se mantendrá hasta más allá de esta vida.

Chávez es pasión telúrica de una Patria que lucha por justicia social. Chávez es huracán, es selva, es desierto, es terrón, es agua, es nieve, es volcán. Chávez es Argimiro Gabaldón, Chávez es Rondón que no ha peleado todavía.

Chávez es pasión desenfrenada de amor, de libertad. Chávez es el muro de contención que encarrilo nuestra rabia y la convirtió en Revolución.

Chávez es poesía libertadora y emancipadora. Chávez es camino emancipador y libertario. Chávez es arepa, es sardina, es parranda y dominó. Chávez es pueblo.

Chávez es aquel que enfrentó a los poderosos y siempre fue un buen combatiente. Y que pese a los ataques, a las ofensas, a las pruebas, a las circunstancias más difíciles, siempre mantuvo el dominio de sí mismo, siempre nos alentaba, y tenía esa capacidad de convertir y reencuadrar aparentes derrotas en victorias inconmensurables.

De Chávez no podemos hablar en tiempo pasado sino que a Chávez hay que hablar en tiempo presente y hablarlo en tiempo futuro, porque Chávez sigue estando presente y seguirá estando presente en las luchas y en los combates que están próximos a venir.

Pero sobre todo, Chávez es la energía morfogenética que nos convence, a los revolucionarios y revolucionarias que pese a los obstáculos más grandes y que a las pruebas más difíciles, la Revolución vencerá. Que pase lo que pase, siempre saldremos victoriosos y victoriosas.

¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2324 veces.



Juan Martorano

Abogado, Defensor de Derechos Humanos, Militante Revolucionario y de la Red Nacional de Tuiteros y Tutiteras Socialistas. Www.juanmartorano.blogspot.com , www.juanmartorano.wordpress.com , jmartoranoster@gmail.com, j_martorano@hotmail.com , juan_martoranocastillo@yahoo.com.ar , cuenta tuiter e instagram: @juanmartorano, cuenta facebook: Juan Martorano Castillo. Canal de Telegram: El Canal de Martorano.

 jmartoranoster@gmail.com      @juanmartorano

Visite el perfil de Juan Martorano para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: