Aunque algunos lectores puedan creer que es un disparate pero, en mi opinión, entre la historia reciente de Venezuela y la de Alemania hay mucho parecido. Alemania, desde mediados de 1949 y hasta finales de 1989 estuvo oficialmente dividida entre dos Estados, la República Federal Alemana, y la República Democrática Alemana (RDA), esta última hoy ya disuelta.
La República Democrática Alemana, a pesar de su nombre, y de su "democracia plebiscitaria", en realidad no era nada democrática, y terminó levantando un muro en torno a un sector de Berlín, dividiendo a esa ciudad literalmente en dos partes, y además, restringiendo la amplia frontera de la época, con el único objetivo de que sus ciudadanos no pudieran escapar hacia la Alemania Federal.
Sólo para que el lector tenga idea del tamaño de la tragedia que vivieron los alemanes, entre 1961 y 1988 el ejército de ese país, cumpliendo lineamientos de ese gobierno, asesinó a tiros a más de 600 de sus propios ciudadanos al descubrir que intentaban salir de su país. A pesar de eso más de 100.000 personas lograron escapar.
Y, como si eso hubiera sido poco, el gobierno de la RDA contaba con una Policía de Estado, major conocida como Stasi (del Alemán Staatssicherheit (Seguridad del Estado)). Fueron funcionarios de la Stasi, alemanes todos, los que se dedicaron durante décadas a espiar, encarcelar, torturar y asesinar a sus propios compatriotas.
A pesar de todo eso, de todo el terror, el pueblo alemán se levantó contra estos criminales en múltiples oportunidades, aunque muchos de mi generación solo recordemos la caída del muro en 1989.
Previo a esto, entre 1989 y 1990 se realizaron las "Protestas del Lunes" en varias ciudades de la RDA. Protestas pacíficas, en donde los alemanes repetían al unísono: "(Nosotros) somos el pueblo". Una protesta pacífica, contra un gobierno criminal, a pesar de todo el dolor causado, de todos los muertos, que al final obligó a este régimen a abrir el paso entre las dos Alemanias, y a la reunificación de este país.
Y, aunque Venezuela no ha sido dividida físicamente entre dos paises, los venezolanos permitimos que la mal llamada "Revolución Bolivariana" nos dividiera entre "chavistas" y "escuálidos", entre "revolucionarios" y "apátridas", entre "ricos" y "pobres". Una revolución que hizo todo lo contrario a lo que prometió, llevando a nuestro país a, quizás, una de las más grandes crisis económica y social de nuestra historia.
El actual gobierno de Nicolas Maduro, principal responsable de esta tragedia, y heredero de los errores de Hugo Chávez no ha cerrado las fronteras, quizás como consecuencia de su infinita incompetencia, y esto ha devenido en la salida de cerca de 8 millones de personas de nuestro país. Esto es 80 veces la cantidad de personas que escaparon de la RDA, cerca del 25 % de la población de nuestro país, y el equivalente a la población total de Caracas y Maracaibo. No sabría decir cuántos venezolanos han muerto durante protestas en estos 25 de años.
Curiosamente Maduro, y su gobierno, usan los mismos argumentos que usaba el gobierno de la RDA: el imperialismo!. Afortunadamente, ya nadie les cree, ya hemos sobrepasado el muro de odio social y político, ya la mayoría de los venezolanos, hasta el más humilde saben que si no hay dinero, es porque ellos han saqueado las arcas del Estado. Porque si hay una diferencia entre la mal llamada "Revolución Bolivariana" y la RD: El chavismo madurismo ha nadado en recursos desde el principio, pero no han sido capaces de controlar el nivel de corrupción de sus propios miembros del Partido.
Entonces, este 28 de Julio tendremos una oportunidad extraordinaria de demostrarle a ellos que ya no son mayoría, y que ya no pueden seguir jactándose de hablar en nombre del pueblo, porque: nosotros somos el pueblo. Que harán todo lo posible por manipular las elecciones?, de eso no les quede duda. ¿Qué podrán hacerlo?, eso también lo dudo. Y mi explicación es muy sencilla, ellos creían que con su política solo expulsaron del país a sus opositores, pero resulta que también expulsaron a quienes en algún momento los apoyaron. Creyeron que todos íbamos a salir a mendigar al exterior, sin saber que ya después de todos estos años muchos estamos estables, con trabajos que a la mayoría les permite, lo que no se logra con los salarios de hambre que ellos ofrecen: vivir con dignidad.
Y cuando les digan que "dictadura no sale con votos", pues a quien les diga eso, recuerdenle el canto de Libertad de los alemanes: wir sind das Volk – (Nosotros) somos el pueblo, y de lo que las protestas pacíficas de ese pueblo lograron.
Luis Ramos
Ingeniero Industrial
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