Las elecciones regionales junto con las de la asamblea nacional hacen recordar a la famosa canción del grupo mexicano Maná ya que la protagonista de ese tema después de una desilusión pierde la cordura y se limita a ver el mar, esperar a que vuelva su amado, así mismo parte de la oposición después del 28 de julio pretende limitar su accionar politico a quedarse cruzados de brazos y ver como el peor gobierno de la historia de este país se hace con las 24 gobernaciones y todas las alcaldías ,o peor aun dedicarse a maldecir y etiquetar negativamente a los que haciendo uso de su derecho constitucional ejerza su derecho al sufragio. La asamblea nacional debería ser espacio totalmente heterogéneo y combativo donde el debate sea ecuanime y no como en la actualidad que es una asamblea genuflexa apatíca y sin razonamientos prácticos por eso veo con preocupación que muchos dirigentes en actitud negativa y rendiciónal bajen los brazos y simplemente se queden esperando una solucion mágica así como la loca del muelle de san blas. Abstenerse ya se ha hecho en el pasado 2005/2018 y a traído nefastas consecuencias para el país. Si nos abstenemos el gobierno celebrará una mayoría que sabemos que no tiene y no es el momento de pensar en mesías y elegidos, ni en proyectos personales de sectores megalomanos, es el momento de ratificar lo que todos sabemos que paso el 28 de julio y hacerlo con votos para que se demuestre el rechazo no solo al gobierno central sino a todo su liderazgo regional maduristas que han demostrado su ineficacia a la hora de gerenciar y que le han dado la espalda a las necesidades del pueblo, por eso dejar de votar en contra del peor gobierno naciinal y regional que hemos tenido los carabobeño es algo así como suicidarse por miedo a que lo maten.
