Este título es a propósito de un viejo cuento infantil de Hans Christian
Andersen ( Dinamarca 1805 - 1875 ), llamado "El traje nuevo del Emperador".
Creo oportuno recordar el argumento de este cuento para luego hilar
analogías.

Había un Emperador, cuya máxima preocupación de vida consistía en vestir
trajes nuevos todos los días. Una mañana llegaron dos pillos a su reino,
prometiendo confeccionar un traje con finas sedas y oro, este traje tendría
la particularidad maravillosa de solo ser visible para las personas
inteligentes. A el Emperador le gustó la idea de saber quiénes en su reino
eran los poseedores de inteligencia y quiénes no; de inmediato entregó la
materia prima pedida por los truhanes y como de rayo éstos se refugiaron en
un taller a consumar el engaño. Al paso de los días, el impaciente Emperador
envió a diferentes funcionarios para que le informaran sobre los avances de
sus traje, cada uno de ellos sufría una terrible sorpresa al descubrir que
no podían ver el traje, lo que les hacía pensar que no era inteligente; sin
embargo fingían delante de los embaucadores, pues no querían caer en
desgracia ante el Monarca. Así, de esa forma, informaban al Emperador sobre
los prodigios del traje. Los habitantes del pueblo se enteraron de las
virtudes del traje y por supuesto, se llenaron de temor ante la posibilidad
de quedar como ignorantes ante el Emperador y sus vecinos. Faltando pocos
días para la conclusión del traje, el Emperador no aguantó la incertidumbre
y fue al taller de los pillos y rotunda fue su sorpresa al comprobar con sus
propios ojos que era un idiota, pues no veía ni la sombra del fulano traje.
Ante esta situación el Emperador decidió fingir para no ser el hazme reír de
su propio reino, siguió la corriente al par de granujas y se prestó a la
farsa. Llegado el día del estreno del traje, todos esperaban con impaciencia
el desfile del Emperador; por fin, luego de ser vestido por los propios
timadores, comenzó el paseo real, todos quedaban aterrorizados al observar
que el Emperador caminaba desnudo, pero nadie se atrevía a manifestarlo,
pues quedaría en evidencia su ignorancia. El Emperador avanzaba en su
desnudo paso hasta que se escucho la voz de un niño que dijo: no lleva nada,
el Emperador está desnudo, el padre del chiquillo secundó la afirmación y
como en un efecto dominó todo el pueblo comenzó a repetir la frase del
pequeño, esto le inquietó al Emperador y pensó hay que aguantar hasta el fin
y siguió caminando con su misma altivez.

Ahora bien, es sustantivo para el cuerpo de este ensayo precisar algunas
cosas que ocurren con los medios de comunicación y de esta manera dilucidar
la relación del citado cuento.

Los medios de comunicación social que responden a líneas desestabilizadoras
y antidemocráticas, han direccionado su ataque de artillería pesada a la
clase media, le han vendido una especie de neointelectuales de carrusel de
informadores, de gurús de la razón o que pretenden erigirse como los
Zeus del intelecto. Hay que hacer una diferencia, los hay presentadores que
olvidando la ética, se parcializan y pasan a ser los protagonistas de las
entrevistas, es decir se pagan y se dan el vuelto, ejemplo grosero es la
Colomina, que por cierto su juicio por desbancar el canal 8 quedó en
veremos, y Napoleón Bravo, que leía la inventada renuncia del Presidente y
sin rubor en su rostro la pregonaba como verdadera en un descarado festín de
mentiras. También los hay los del tipo carrusel, opinadores de oficio que
cuentan con la anuencia de los dueños de los medios y que van de canal en
canal con un sospechosos cartelito de "experto", volcando camionadas de odio
y segmentación, ejemplo clásico: Mikel de Viana.

Los neointelectuales, son los llamados a hipnotizar a la clase media, se
presentan como los sabelotodos, allí podemos incluir a Cesar Miguel Rondón,
Cuyo merito en las Letras, es escribir telenovelas como Kaina o Ligia Elena
y escribir el libro de la salsa (un García Márquez cualquiera ), también
contemos a Oscar Yánez, de quien el Maestro José Ignacio Cabrujas escribió:
Qué ocurre en el cerebro del diputado Yánez cuando el diputado Yánez tiene
una idea (así sí son las cosas).

Es prudente mencionar cómo pretenden secuestrar la voluntad de los jóvenes
con programas sin profundidad, Ejemplo: Diente x diente, Qué Dice la Gente,
Ají Picante, Chao Pescao, Fuera de Servicio. Es evidente que en esto
programas no habrá un negrito ganador.

Toda esta artillería se enfoca hacia la clase media para hacerles creer:
Por Venezuela o Se Siente Teve o Vive en Ti, Y hacerles olvidar que durante
la Carmonada que ellos apoyaron a rabiar, pretendieron desarticular la
sentencia sobre los créditos indexados; real puñalada para la clases media.
Muchos se dejan arrastrar de esta lamentable inercia, pensando en que si lo
dice fulano de tal debe ser verdad es mejor que ellos piensen por mi o que
si yo lo llego a refutar me van a tildar de bruto o chavista. Prefieren la
manipulación de los pillos antes de gritar la voz del pequeñuelo que es su
conciencia.

En una próxima entrega profundizaré sobre este tema y sobre la supuesta
división del pueblo venezolano.