Para tratar de culminar los análisis y el panorama de lo que ha ocurrido en Venezuela el pasado 2 de diciembre del año 2007, fecha que como he expresado significa un profundo punto de inflexión en nuestra Revolución. Debo expresar lo siguiente, esos tres millones de compatriotas que forman parte de ese casi 44% de abstención a nivel nacional, más el resultado electoral harto conocido por todos nosotros, representa de alguna manera una crisis en el gobierno del Comandante Chávez. Y aclaro este punto para que no se piense que me stoy contradiciendo. Si bien es cierto que cuando el Comandante, una vez que el CNE hizo del conocimiento público el primer boletín con los resultados del referendo, y un segundo después Hugo Chávez con su reconocimiento, pero sobre todo con su felicitación a las fuerzas que lo adversan, por la victoria pírrica que obtuvieron, y resultado electoral que en otras partes del mundo se pudiese dar la lectura política de un empate técnico.Esto sin duda hizo que el Presidente, su popularidad aumentara por lo menos unos 5 puntos, es decir, sí ya la popularidad y el carisma del Presidente Chávez estaba en un 70%, ya esta llega a un 75% con tendencia a llegar al 80%. Pero este elemento no es igual a la percepción y al porcentaje de aprobación a su gestión del gobierno, porque sabemos que la gestión de algunos Ministros, de Gobernadores, Alcaldes, Presidentes de Institutos y entes del Estado han dejado muy poco que desear, ésta aceptación que se encontraba cerca del 60%, y que eso se traduce en votos, ha descendido, y actualmente se ubica en un 55,06%.

Esto es importante de observar. Hay que tener claro el momento histórico y político que estamos viviendo; esta campanada repito es para el Gobierno de Chávez, y afecta más a su gobierno, aunque sigo teniendo confianza en nuestra Revolución y sé que el pueblo va a poner de su parte para revertir de manera pronta y oportuna este resultado adverso. Pero sí es una crsis en el gobierno, porque muchos de sus miembros no están comprometidos con el alma con este proceso, creen que por el solo hecho de ser amigos de Chávez, constituye ésta una patente de corso para corromperse, para volverse soberbios, para olvidarse de los más humildes, de los desdentados, de los que siempre han estado allí, con una fe y una esperanza incondicional con el Presidente, entonces como Hugo Chávez les alza la mano y les respalda, entonces ellos creen que eso les da derecho a patear a los humildes.

Parte del componente de la Campaña Admirable que he propuesto, tanto para el Presidente Chávez como para todos aquellos que siguen confiando en esta Revolución, pasa por meterle lupa, por revisar todo el gabinete del Presidente Chávez, de su entorno. El Presidente debe parar un tanto el trote, debe evaluar muy bien, de manera concienzuda, dejando el corazón a un lado, y uno por uno, a cada uno de sus colaboradores y de su entorno más cercano. El enemigo más peligroso de este proceso no debe buscarlo por fuera, el enemigo principal esta dentro de nuestras propias filas. Las instituciones venezolanas siguen atadas al diseño y a los principios de la IV República, y mientras sigamos cooptando con este Estado, que ha sido diseñado para no dar respuesta al pueblo, los enemigos internos y la derecha endógena, seguirá socavando las bases de este proceso bolivariano y revolucionario.

Debe revisarse concienzudamente el gabinete ministerial, y los que deban quedarse, que se queden, pero los que deban irse, porque lamentablemente no han estado a la altura de este compromiso revolucionario, los que han traicionado la confianza depositada en el conductor de esta revolución, los que han jugado y se han burlado de las necesidades y anhelos del pueblo, esos deben ser echados y retirados del gobierno. Debe el Presidente Chávez sacarse la mano del corazón y hacer política con la cabeza y no con el corazón o con los sentimientos.

Debe aprovecharse este momento para las necesarias rectificaciones que la base popular nos esta reclamando. De no hacerlo, corremos ahí si el riesgo criminal de que mucha gente decida no acompañar más no a la Revolución Bolivariana que llegó para quedarse en el alma y en el corazón de los venezolanos y venezolanas de buena voluntad, una Revolución cuya viabilidad estará garantizada mientras Hugo Chávez siga siendo Presidente, pero de no rectificarse en el rumbo, de no tomarse las medidas que deban tomarse a tiempo y sin ambages, ocurrirá que mucha gente que hoy acompaña al gobierno deje de hacerlo, porque no se puede avalar ni permitir las desviaciones, las corruptelas y el pisoteo a la voluntad de las grandes mayorías, y que por culpa de dos o tres insensatos, por culpa de dos o tres imbéciles con su visión míope de la realidad, echen al cesto de la basura las conquistas y las esperanzas de un pueblo.

Sin duda que para algunos, un descenso del 5 puntos en las encuestas no es nada significativo, pero resulta que también la base oposicionista creció de igual manera. De ese histórico 40% que históricamente han sacado en los diversos procesos electorales, actualmente se ubican en un 44,94%, es decir que la ventaja que nos separa es de apenas 10 puntos, y esto s prodcuto de cierto desgaste, que por más que un gobierno sea popular, siempre lo tiene, y aún estamos a tiempo de recuperar espacios pérdidos,que son pocos afortunadamente. Esta es una realidad que tenemos y que de verdad la Revolución tiene que llegar verdaderamente al poder.

No se me malinterprete, sabemos de la calidad y del compromiso revolucionario del Presidente Hugo Chávez, pero como dice el refrán, un solo palo no hace montañas, y por el hecho de que un revolucionario este en funciones de gobierno y ocupe espacios de poder, eso no quiere decir que la Revolución este garantizada. Ser un Gobierno Revolucionario es algo más que lemas o slogans, ser un Gobierno Revolucionario implica dar un vuelco al sistema y al orden capitalista existente, y eso implica a verdaderos servidores públicos sujetos y al servicio del mandato popular, y no de las élites y de sus más bajos instintos y pasiones carnales.

He allí el reto, he allí un buen punto de partida, sabemos que no es la única medida que debe tomarse, pero estas medidas y estas necesarias sustituciones y refrescamientos que deben darse en las diversas instancias gubernamentales, se verá como una señal positiva de que se quieren corregir las fallas y se quiere enderezar el rumbo. No nos olvidemos Presidente y compatriotas lo que escribió Bolívar el 15 de diciembre de 1812 en el Manifiesto de Cartagena: "Al abrigo de esta piadosa doctrina, a cada conspiración sucedía un perdón, y a cada perdón sucedía otra conspiración que se volvía a perdonar: porque los gobiernos liberales deben distinguirse por la clemencia. ¡Clemencia criminal, que contribuyó más que nada. a derribar la máquina, que todavía no habíamos enteramente concluido "!.